La vastedad sonora de Xochimilco inspiró al compositor Enrico Chapela
Cuando el compositor Enrico Chapela Barba comenzó su obra Chinampa y trajinera, poco antes de la pandemia, pensó, según refiere, en “que había llegado el momento de hacer mi Danzón no. 2, de Arturo Márquez; mi Huapango, de Moncayo, o mi Sensemayá, de Revueltas, y me propuse encontrar algún tipo de folclor originario de la Ciudad de México para tal fin”.
