La Unión Europea, reacciona con importantes medidas económicas, ante el envite del presidente Donald Trump, Economía, VI, 2025
El desafío al Mundo de Donald Trump , ha hecho reaccionar a la Unión Europea con el apoyo de los veintisiete países que la componen . El acuerdo ha sido defendido por la Presidenta de la Comisión Europea Úrsula von der Leyen, en la reciente...

El desafío al Mundo de Donald Trump, ha hecho reaccionar a la Unión Europea con el apoyo de los veintisiete países que la componen. El acuerdo ha sido defendido por la Presidenta de la Comisión Europea Úrsula von der Leyen, en la reciente Cumbre de Bruselas. El plan pretende movilizar 800.000 mill de euros en los próximos años; parece haber consenso en que esta propuesta va en la dirección correcta, pero aún hay muchos interrogantes. Entre ellos, el papel de la industria europea, y si será posible que la financiación no sea solo a través de créditos reembolsables, sino también a fondo perdido, como lo fue el paquete “Next Generation” para hacer frente a los estragos de la pandemia producida por el coronavirus. El papel de la industria europea y la financiación aún deben perfilarse - aunque Von der Leyen ha manifestado hace pocos días que la mayor parte de los 800.000 euros han de ponerlos los países individualmente, aunque flexibilizando las normas tanto de déficit como de deuda a los países que conforman la Eurozona. Los ministros de finanzas de la Comisión Europea, han pactado que del total de fondos por 800.000 mill de euros, 150.000 de préstamos que se faciliten a los gobiernos europeos, solo se utilicen para comprar suministros estratégicos fabricados dentro del continente.
La respuesta de Alemania no se ha hecho esperar. El Canciller Friedrich Merz, ha acordado un plan estratégico por 500.000 mill de euros para infraestructura y armamento en los próximos años, que neutralice en lo posible las tensiones que suponen los aranceles impuestos por Donald Trump a Europa. Merz parafraseó a Mario Draghi al declarar que Alemania hará lo que sea necesario para hacer frente a los desafíos internos y externos. Y junto con el liderazgo en Europa de Emmanuel Macron y Starmer, está dispuesto a dar una respuesta en toda regla a los envites de Trump y Putin; aplicando una política económica más expansiva, que despierte a Alemania del sueño en que ha estado sumida los últimos quince años.
Francia juega la baza de su fuerza nuclear - aunque muy por debajo de Estados Unidos y Rusia; Estados Unidos tiene 5.225 ojivas nucleares, Rusia 5.580, Francia 290 y Reino Unido 225 - aunque solo sea disuasoria; y el Reino Unido ha recuperado el liderazgo tras el Brexit. Y enarbola su buena relación con Donald Trump y su disposición para mediar entre Washington y Kiev. Mientras tanto, Alemania podría ser a medio y largo plazo la locomotora que fue en Europa; aunque para ello necesite años de recuperación.
Europa empieza a tener conciencia de la importancia de preservar su industria y rearmarse. El plan de acción de Merz de “invertir lo que sea necesario" para aumentar el gasto de defensa hasta el 3,5% del PIB en los próximos cinco años, y reforzar la infraestructura y la industria del país, está diseñado para protagonizar el mayor estímulo económico desde la caída del Muro de Berlín. Los economistas del Hamburg Commercial Bank, anticipan el nivel de deuda con respecto al PIB del 67% al 84%, lo que hará crecer la economía alemana, en los últimos años estancada.
El fondo de 100.000 mill de euros que anunció, Olaf Scholz para modernizar el ejército tras la invasión rusa de Ucrania en 2022, contribuyó a allanar el camino tomado por el gobierno de Merz para el cambio transformacional actual. El aumento de la deuda alemana - en este caso fundamental para el aumento del gasto del país - hará subir los costes en toda la Zona Euro, pero se verá compensado por la narrativa positiva de que la mayor parte de la economía europea vuelve a gastar, y por el impulso que experimentará la demanda en Europa; aunque este proceso llevará años.
El despertar de Alemania es una señal de que la crisis producida por las arbitrarias medidas arancelarias de Trump, está impulsando a Europa a unirse una vez más. El pasado doce de marzo Trump aplicó a todo el mundo un 25% de arancel para el acero y el aluminio, lo que ha obligado a la Unión Europea a imponer contramedidas por valor de 26.000 mill de euros; Canadá, principal proveedor de aluminio y acero de Estados Unidos., también reacciona con gravámenes de más de 20.000 mill; Trump ha subido la apuesta manifestando que “ responderá”.
En todo lo antedicho, también hay sombras: la primera es que la guerra comercial provocada por Trump amenaza con un tercio del crecimiento global por debajo del 3%. La segunda sombra viene por la manifestación de la Presidenta del Parlamento Úrsula Von der Leyen el doce de marzo. Von der Leyen manifestó que excepto 150.000 mill de euros que serán puestos por la Unión Europea, el resto del fondo hasta 650.000 millones para rearme de Europa, lo habían de poner los países que la componen individualmente, y que el porcentaje de gasto para defensa debería alcanzar el 3% del PIB de cada país. Algunos países de la Eurozona como España les va a ser muy difícil o imposible cumplir con las metas propuestas por la Presidenta de la Comisión Europea Úrsula Von der Leyen. Cabe advertir sin embargo, y hecho notorio es, que en este escenario adverso para la Unión Europea, tampoco le va a salir gratis a Estados Unidos; la aplicación global de aranceles, va a suponer al país una inflación del 4% y una retracción en el PIB a lo largo del año. Holguemonos, el baile ha comenzado.
Agustín Hidalgo es economista especializado en estructura económica y diplomado en comercio exterior por la Escuela de Organización Industrial.
Referencias:
Financial Times, 7 de marzo de 2025. El nuevo despertar de Alemania.
El Mundo, 10 de marzo de 2025. A la desesperada por un nuevo paraguas nuclear.
El Economista, 8 de marzo de 2025. EE UU se ve abocado a un IPC del 4% y a descensos trimestrales del PIB.