La historia de Carla Bernat: una chaqueta verde prohibida y un techo de cristal roto

Una de las competiciones más míticas del mundo del golf solo lleva siete años con presencia femenina. Este titular puede sorprender aún más si se añade que las mujeres solo pueden disputarlo actualmente en categoría amateur, porque solo se les considera a los hombres como profesionales.

Esto sucede en el Masters de Augusta, el campeonato que cualquier golfista soñaría con ganar. Una ilusión para muchos, una realidad para Carla Bernat, la española que ha escrito su nombre en uno de los templos sagrados del golf mundial.

Aunque la emblemática chaqueta verde que se le entrega al campeón sigue siendo un privilegio reservado para los hombres, Carla Bernat vivió este fin de semana su propio momento de gloria.

La joven castellonense se ha convertido en la primera mujer española en conquistar el Masters de Augusta, firmando una gesta histórica que se suma a las siete victorias logradas por representantes nacionales en este prestigioso escenario, aunque en la categoría profesional masculina.

Hasta ahora, solo Severiano Ballesteros (1980 y 1983), José María Olazábal (1994 y 1999), Sergio García (2017) y Jon Rahm (2023) habían logrado triunfar en el mítico campo de Georgia. Ahora Carla se une ahora a este selecto grupo.

Símbolo de una nueva generación de golfistas

La española debutó en Augusta en 2022 y no logró pasar el corte. Siguió su progresión en el circuito universitario estadounidense y está sumando una sólida trayectoria en torneos internacionales. Por eso, solo tres años después desde ese primer campeonato, tenía claro que si no fallaba en uno de los golpes importantes, tendría muchas probabilidades de acercarse al título. Y lo logró.

Con su triunfo, sucede en el palmarés a figuras como las estadounidenses Rose Zhang, Jennifer Kupcho y Anna Davis, la japonesa Tsubasa Kajitani y la inglesa Lottie Woad, campeonas en ediciones anteriores de un torneo creado hace apenas siete años, como respuesta a la apertura del Augusta National Golf Club a las mujeres.

Hasta 2012, este exclusivo club había mantenido su membresía exclusivamente masculina. Fue entonces cuando figuras como Condoleezza Rice, ex secretaria de Estado de EE.UU., y la empresaria Darla Moore rompieron esa barrera al ser admitidas como las primeras socias femeninas, abriendo el camino para una nueva era en el golf.

Aunque no haya chaqueta verde para ella, su hazaña tiene un gran valor para el deporte español y para el talento femenino.