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La bioinformática clínica, garante de la calidad de los análisis ómicos
Profesión Rosalía Sierra Mar, 11/02/2025 - 16:56 Nuevos perfiles "Disciplina transversal que integra conocimientos de Matemáticas, Estadística, Bioquímica, etc., para resolver problemas complejos de la Biología a través de la aplicación de técnicas computacionales avanzadas y análisis de datos". Así define su disciplina la Sociedad Española de Bioinformática y Biología Computacional (SEBiBC). De hecho, la bioinformática tiene mucho que decir en el mundo sanitario, especialmente si lleva el apellido clínica. Por ello, José Luis Villanueva, especialista en Bioinformática Clínica en el Hospital Clínic, de Barcelona, y Sheila Zuñiga, responsable de la Unidad de Bioinformática del Instituto de Investigación Sanitaria de Valencia (Incliva), son los encargados de coordinar el nuevo grupo de trabajo que sobre esta disciplina ha puesto en marcha la SEBiBC con dos objetivos principales: "Definir el perfil profesional y el alcance de nuestras funciones, y la certificación de calidad en el circuito asistencial, es decir, establecer estándares y guías que sirvan para apoyar y desarrollar la bioinformática clínica en los hospitales", explica Zuñiga a Diario Médico. Sobre el primer aspecto, las funciones del bioinformático clínico incluyen "analizar pruebas moleculares basadas en secuenciación genómica en las áreas de genética, inmunología y cáncer, y el análisis de patógenos y cepas en vigilancia epidemiológica por secuenciación masiva (NGS, next-generation sequencing, en inglés), como sucedió con la covid-19", explica Ángela del Pozo, presidenta de SEBiBC. Perfiles profesionales: la formación no responde a la demanda de las empresas, La industria necesita incluso perfiles profesionales que aún no existen, El cambio que el SNS necesita no vendrá de la bata blanca Según explican, las funciones del bioinformático clínico son claves e irremplazables, y "es importante que se nos distinga de otros perfiles: por un l La presencia de los bioinformáticos clínicos en los hospitales es, en algunos casos, habitual, y, en otros, testimonial. Reivindican por ello su papel clave en la secuenciación. Off Rosalía Sierra Off
"Disciplina transversal que integra conocimientos de Matemáticas, Estadística, Bioquímica, etc., para resolver problemas complejos de la Biología a través de la aplicación de técnicas computacionales avanzadas y análisis de datos". Así define su disciplina la Sociedad Española de Bioinformática y Biología Computacional (SEBiBC). De hecho, la bioinformática tiene mucho que decir en el mundo sanitario, especialmente si lleva el apellido clínica.
Por ello, José Luis Villanueva, especialista en Bioinformática Clínica en el Hospital Clínic, de Barcelona, y Sheila Zuñiga, responsable de la Unidad de Bioinformática del Instituto de Investigación Sanitaria de Valencia (Incliva), son los encargados de coordinar el nuevo grupo de trabajo que sobre esta disciplina ha puesto en marcha la SEBiBC con dos objetivos principales: "Definir el perfil profesional y el alcance de nuestras funciones, y la certificación de calidad en el circuito asistencial, es decir, establecer estándares y guías que sirvan para apoyar y desarrollar la bioinformática clínica en los hospitales", explica Zuñiga a Diario Médico.
Sobre el primer aspecto, las funciones del bioinformático clínico incluyen "analizar pruebas moleculares basadas en secuenciación genómica en las áreas de genética, inmunología y cáncer, y el análisis de patógenos y cepas en vigilancia epidemiológica por secuenciación masiva (NGS, next-generation sequencing, en inglés), como sucedió con la covid-19", explica Ángela del Pozo, presidenta de SEBiBC.
