La Bella y la Bestia existieron: la historia real en la que se basa el popular cuento de Disney

Desde tiempos inmemoriales, las historias que llegaron a nuestros oídos bajo la forma de cuentos encantados y mágicos, frecuentemente ocultan en sus raíces relatos sombríos y trágicos. 

Aquellas narraciones, inicialmente pensadas para adultos, fueron moldeadas a lo largo de los siglos, suavizadas y transformadas en relatos aptos para los más pequeños. 

Sin embargo, detrás de cada princesa, bestia y hechizo, se esconde una historia real, a menudo más dolorosa que la fantasía. Un claro ejemplo de ello es el famoso cuento de La Bella y la Bestia, una historia que, más allá de sus encantos y giros mágicos, tiene una génesis mucho más sombría y conmovedora. 

¿Cuál es la historia real en la que se basa La Bella y la Bestia? 

La influencer Eunice Balbi, famosa por compartir curiosidades sobre la historia del arte en sus redes sociales, reveló un origen real detrás del famoso cuento clásico de La Bella y la Besti que se hizo viral.

Según una exhaustiva investigación publicada en la Revista de Historia Canaria (vol. 203, mayo de 2021), que arroja luz sobre un triste episodio que podría haber servido como referencia para la creación de la leyenda.

¿Quién era Pedro González, la bestia de la historia?

 A través de esta investigación, se sugiere que la historia de La Bella y la Bestia podría estar vinculada a la vida de Pedro González, un hombre que vivió en el siglo XVI con una enfermedad rara llamada hipertricosis. 

La historia dice que a la edad de 10 años Pedro fue separado de su familia y enviado a la corte francesa, junto al rey de Francia como un objeto exótico. El joven sufrió el estigma y la exclusión, pero también encontró amor y aceptación, algo que coincide con los elementos del cuento.  

¿Cómo era la vida de Pedro González en la corte de Francia?

En 1547, Pedro Gonzáles llegó a la corte del rey Enrique II. Su aspecto, cubierto de vello, provocó asombro y morbo entre los cortesanos, y fue apodado "el salvaje" o el "hombre lobo". 

A pesar de este estigma, Pedro recibió una educación e instrucciones, siendo protegido por el rey. Con el tiempo, se integró en la sociedad, incluso desempeñando roles importantes en la corte.

Gracias a su vínculo con el poder, este personaje superó muchas dificultades. Se le concedió una pensión para estudiar derecho y llegó a ser un hombre respetado, ocupando importantes cargos en París. 

Pedro formó parte del consejo de la iglesia de Saint-Nicolas y profesor de Derecho Canónico en la Universidad de la Sorbona. Su vida demuestra cómo superó su diferencia física y llegó a ser una figura influyente en su tiempo.

La historia de La Bella y la Bestia

El rey Enrique II de Francia encargó a Catalina de Médici la tarea de encontrar una esposa para Pedro. La mujer seleccionada era proveniente de una familia respetable y de gran belleza, que desconocía por completo la inusual apariencia de su prometido.

A pesar de las diferencias físicas, ambos lograron construir una vida feliz juntos; y tuvieron siete hijos. Sin embargo, cuatro de ellos heredaron la misma condición de hipertricosis que su padre. 

Estos niños, al igual que su progenitor, fueron exhibidos en la corte real como un espectáculo para la nobleza de la época.

Así, el legado de Pedro Gonzáles va más allá de su historia personal. Fue un pionero en la lucha contra los prejuicios sobre las apariencias y ayudó a cambiar la forma en que la sociedad europea veía la diversidad. 

Su vida muestra cómo el valor humano no depende de las apariencias externas, sino de la capacidad de integrarse y aportar a la sociedad.