Investigadores tejanos desarrollan nanoestructuras de zafiro con propiedades avanzadas, como resistencia a rayones, reducción de deslumbramiento, autolimpieza, y resistencia al polvo y al empañamiento
Estas nanoestructuras replican efectos naturales como el ojo de la polilla (para transmitir más luz y reducir el deslumbramiento) y la hoja de loto (para repeler el agua). Además, son súper hidrofílicas o hidrofóbicas según el tratamiento aplicado.
