El pasado sábado 15 de febrero, un hombre de Filadelfia ganó el premio mayor de US$57.000 en el Parx Casino de Bensalem, en Pensilvania. Sin embargo, la emoción del momento se convirtió rápidamente en decepción cuando los empleados del lugar le informaron que no podía cobrar el dinero. Esto se debe a que el jugador se encontraba en la lista de autoexclusión de por vida para juegos de azar en el estado.

Según ABC27, el hombre de 46 años había decidido en el pasado excluirse voluntariamente de la posibilidad de apostar en cualquier establecimiento de juegos de azar del estado, lo que significa que se inscribió en un programa de autoexclusión para impedirse a sí mismo el acceso a los casinos. Como consecuencia de esta restricción, no solo se le negó el cobro del premio, sino que también fue citado por la Justicia por ingresar al casino sin autorización.

En qué consiste el programa de autoexclusión de Pensilvania

El programa de autoexclusión de Pensilvania está diseñado para ayudar a personas que tienen problemas de adicción a los juegos de azar. Cualquier individuo puede inscribirse de forma voluntaria a este proyecto para ser bloqueado del acceso a casinos físicos, juegos de azar online y apuestas en deportes de fantasía. Esta restricción puede establecerse por un periodo de tiempo determinado o puede ser permanente, como en este caso.

La Policía Estatal de Pensilvania remarcó que este hombre había optado por la autoexclusión de por vida, lo que implica que no puede ingresar a ninguna sala de apuestas dentro del estado. Al haber violado esta condición, perdió la posibilidad de cobrar el dinero y deberá afrontar las consecuencias legales de su presencia en el establecimiento.

Existen programas similares en distintas partes del mundo que buscan brindar herramientas a quienes luchan contra la ludopatía. Las medidas pueden incluir la restricción de acceso a determinados juegos, la limitación de los montos de las apuestas o la exclusión completa de los establecimientos. En Pensilvania, la autoexclusión es gestionada por la Junta de Control de Juegos del estado y es una de las estrategias implementadas para mitigar los efectos negativos del juego compulsivo.

El proyecto de ley que busca ayudar a los ludópatas

La Ley de Recuperación, Inversión y Tratamiento de la Adicción al Juego (GRIT, por sus siglas en inglés) busca financiar los estudios y la asistencia a las víctimas de ludopatía en Estados Unidos. De acuerdo con Estafa.info, este proyecto de ley, propuesto por la diputada Andrea Salinas y el Senador Richard Blumenthal a principios de 2024, busca ser el primer soporte federal para las tareas relativas a la adicción a los juegos de azar.

En primer lugar, este proyecto de ley, separaría el 50% de los ingresos por el impuesto especial sobre el deporte para utilizarlos en la investigación y el tratamiento de los ludópatas. El 75% de este monto se repartirá a los distintos estados a través del Programa de Concesiones para el Tratamiento y Prevención del Abuso de Sustancia, mientras que el 25% restante iría a becas de estudio relacionadas con la adicción al juego.