Elisa Mouliaá dona los 54.000 euros de sus entrevistas en Mediaset a una ONG que ayuda a víctimas de violencia de género
La actriz acudió este jueves a entregar su móvil al juzgado, pero no disponían de los medios técnicos necesarios.

Elisa Mouliaá ha donado este jueves 54.000 euros, el dinero que ganó por distintas entrevistas en Mediaset, a Mujeres en Acción, ONG que ayuda a víctimas de violencia de género.
Así lo anunció recientemente y lo reiteró este jueves a su llegada al Juzgado de Instrucción número 47 de Plaza de Castilla, al que acudió para entregar su móvil para que analizasen sus conversaciones con Íñigo Errejón, tal y como le solicitó el juez que investiga si el exportavoz de Sumar la agredió sexualmente.
No obstante, según explicó su abogado al salir del tribunal, no se pudo realizar el clonado porque el juzgado no dispone de los medios técnicos, por lo que el magistrado les indicó que la Policía les citará para hacer el volcado allí.
La actriz también se pronunció frente a la prensa y confirmó que iba a cumplir su promesa y donar el dinero que había ganado en televisión hablando del caso a "la acogida de víctimas de violencia de género y a sus hijos".
Ella misma reveló en sus redes sociales que la asociación que había elegido era Mujeres en Acción (MUAC), que se encarga de acoger a mujeres víctimas de abuso sexual y a sus hijos en una vivienda, propiedad de la ONG, en la que también trabajan.
Elisa Mouliaá ha donado los 54.000 euros que ganó en Mediaset, procedente de dos contratos distintos: uno firmado con Unicorn Content, productora de Ana Rosa Quintana, por el que le pagaron 30.000 euros a cambio distintas apariciones en sus programas; y otro con Producciones Mandarina a cambio de asistir como invitada a De viernes por 24.000 euros.
Errejón recurrió la orden de entrega del móvil
Por su parte, Íñigo Errejón recurrió la orden del juez Adolfo Carretero de que ambos entreguen su móvil, al entender que clonar el dispositivo móvil atenta contra sus derechos, pero se ha ofrecido a acudir con el terminal al juzgado y exhibir presencialmente todo lo que se le requiera.
Su defensa incide en que toda la información relativa a las conversaciones con Mouliaá, en todas sus modalidades, ya fue aportada por la defensa del expolítico, y actualmente la Audiencia Provincial tiene pendiente resolver el recurso que interpuso sobre este asunto.
El juez Adolfo Carretero dio a principios de marzo un plazo de cinco días al exdiputado de Sumar y a la actriz para que presentaran sus dispositivos móviles de cara a que la Policía elabore un informe sobre las conversaciones que se hayan cruzado.
En un principio, el magistrado acordó el clonado de los terminales de Errejón y Mouliaá, si bien finalmente, a petición del primero, admitió que el análisis "debe limitarse única y exclusivamente a las conversaciones" entre ellos.
"El juez pide más medios a la justicia para que los juzgados de instrucción puedan instruir más rápido y más eficientemente", añadió Alfredo Arrién, letrado de la intérprete, que puso de relieve este jueves que, en contra de lo que ha hecho la denunciante, el investigado "no ha querido comparecer para entregar el terminal móvil".
Ante esta diferencia de actitudes, Elisa Mouliaá defendió con la prensa que "los hechos hablan por sí solos" y ella va a entregar su móvil porque no tiene "nada que ocultar", y colaborará en todo porque entiende que "la justicia tiene que ser contundente y tiene que mirar las pruebas con lupa".
"¿Errejón dónde está? Pues no sabemos", declaró la actriz. "¿Who knows (quién sabe) lo que tiene que ocultar?", contestó a preguntas de los periodistas.
Mouliaá especificó que en dos años -desde que ocurrieron los hechos hasta su denuncia- solo hay ocho mensajes entre ellos, que en realidad son "contestaciones esporádicas de Instagram", y "ninguno alude a volver a verse, con lo cual algo debió pasar". "No hay ninguna amistad", incidió.
Sobre las declaraciones de testigos que tomó el juez la semana pasada, la actriz apuntó que ella ya explicó que tras la agresión estaba "afectada y en shock", y que es "algo que tardas bastante tiempo en procesar". "Que te han humillado y que te han maltratado es algo que no asumes" al momento, añadió.
"La verdad florece y al final la verdad cae por su propio peso. Y que yo lo que digo, lo cumplo", concluyó.