El Seguro Social retrasa un polémico cambio que desató críticas: cuándo entra en vigor
Descubre por qué el Seguro Social retrasa un polémico cambio que desató críticas y cuándo entra en vigor.

La Administración del Seguro Social de Estados Unidos (SSA, por sus siglas en inglés) decidió retrasar la implementación de una nueva política que exigirá verificaciones de identidad presenciales para millones de beneficiarios. Según informó, la nueva fecha de entrada en vigor de esta medida será el próximo lunes 14 de abril, en lugar del 31 de marzo previsto inicialmente.
La controversia detrás de la política del Seguro Social
La política que obliga a los beneficiarios del Seguro Social a presentarse en persona para verificar su identidad fue anunciada como parte de un esfuerzo para fortalecer la seguridad y la integridad del sistema. Sin embargo, rápidamente se desataron las críticas por parte de la Asociación Americana de Personas Mayores (AARP, por sus siglas en inglés) y otros grupos defensores de los derechos civiles en EE.UU.
La fuerte oposición acerca de la medida surgió principalmente debido a las posibles repercusiones que la política tendrá en millones de ciudadanos estadounidenses, especialmente en aquellos que residen en zonas rurales o que tienen problemas de movilidad y no podrán asistir en persona a una oficina de la SSA.
¿Quiénes están exentos del trámite del Seguro Social en persona?
El retraso de dos semanas para la implementación de la nueva política fue anunciado oficialmente por la SSA el miércoles, mediante un comunicado en el que se reconoció la necesidad de tomarse más tiempo para coordinar la implementación de la nueva política. Además de informar esta decisión, el organismo también hizo importantes aclaraciones en relación con los beneficiarios que estarían exentos de esta nueva obligación.
Según el anuncio, las solicitudes relacionadas con estos trámites estarían exentas de la verificación presencial:
- Medicare.
- Seguro por Incapacidad del Seguro Social (SSDI, siglas en inglés).
- Programa de Ingreso Suplementario de Seguridad (SSI, por sus siglas en inglés).
Esto significa que los beneficiarios de estos programas no necesitarán presentarse en persona para llevar a cabo sus trámites.
La política de verificación del Seguro Social
Además de la polémica relacionada con la verificación presencial, el SSA implementó procedimientos más estrictos para verificar las identidades de los solicitantes de beneficios y de aquellos que deseen modificar la información de su depósito directo. La agencia tiene como objetivo reducir los tiempos de espera en el proceso de cambios.
En el comunicado, la SSA destacó que la implementación del Servicio de Verificación de Cuentas (AVS) permite acelerar los tiempos de procesamiento y mejorar la seguridad de los pagos. Esto podría reducir el número de cobros rechazados debido a información bancaria incorrecta.
El Seguro Social también dio a conocer que exigió que casi todos los empleados de la agencia, lo que incluye a los que atienden al público en todas las oficinas de la nación, trabajaran cinco días a la semana. “Este cambio garantiza la máxima disponibilidad de personal para cumplir con el requisito más estricto de verificación de identidad en persona”, destacó.
¿Quiénes no pueden acceder al Seguro Social en EE.UU. y por qué?
La SSA cuenta con criterios muy estrictos que determinan la elegibilidad, lo que excluye a ciertos trabajadores que no cumplen con los requisitos mínimos. Algunas de las razones por las que una persona no puede solicitar el Seguro Social tras su retiro son:
- Falta de créditos laborales suficientes: es necesario acumular al menos 40, equivalentes a diez años de trabajo en EE.UU. con ingresos sujetos a impuestos.
- Labores en el extranjero sin convenio de totalización: quienes trabajan en un país sin acuerdo con EE.UU. pueden no reunir los créditos necesarios.
- Carecer de estatus legal en el país: los inmigrantes indocumentados no pueden recibir beneficios.
- Pertenecer a un sistema de pensiones distinto: algunos empleados públicos y ferroviarios reciben coberturas de otros programas.
- No haber pagado impuestos al Seguro Social: personas que trabajaron sin declarar sus ingresos.