El Rey apoya en Granada la Educación Inclusiva de calidad: «Dais luz y esperanza a todos nosotros»
El Rey Felipe VI ha visitado este jueves 3 de abril Granada con un doble motivo: por un lado, entregar el premio Escuela del Año que concede la Fundación Princesa de Girona al Centro de Educación Especial Purísima Concepción de las Hermanas Hospitalarias; por otro, inaugurar el Foro por el Futuro del Mediterráneo, que reúne entre hoy y mañana a representantes de 43 países de Europa, Oriente Próximo y el norte de África en el Palacio de Congresos y Exposiciones. Ha habido, por así decirlo, un lado más humano y otro más político. Y la visita al centro educativo cuadra mucho más, lógicamente, con la primera categoría. Allí se atiende a 98 alumnos con necesidades especiales y eso se hace, además, con cariño y profesionalidad. No es raro que el presidente de la Fundación Princesa de Girona, Francisco Belil , haya dicho hoy que se merece sobradamente el premio, como también que debería haber «muchos más lugares así en España». Acompañado de un buen número de autoridades –entre otros, el presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno ; o la ministra de Educación, Pilar Alegría - el monarca ha visitado las instalaciones y se ha detenido en aulas específicas que se emplean para el aprendizaje y la atención especializada. Llaman la atención, por ejemplo, una sala de haloterapia, donde la sal juega un papel fundamental porque ayuda a quienes tienen problemas de respiración, o la de hidroterapia, especialmente indicada para quienes tienen problemas de movilidad y necesitan trabajar la motricidad. Los chicos también aprenden allí habilidades de la vida diari a: hacerse la cama, tender la ropa… Las instalaciones son muy completas y útiles, eso es evidente. «Aquí hacen algo especial y digno de ser aplicado, es un trabajo hecho a medida», ha destacado Francisco Belil, mientras que la directora del centro de educación, Inmaculada Garrido , ha especificado que el premio se concede fundamentalmente por el proyecto Centro Especializado de Referencia y Apoyo (CERA), un modelo «de transformación del modelo de Centro de Educación Especial que primero es interna, porque nosotros estamos continuamente investigando, desarrollando y adaptándonos, y que luego impacta hacia afuera, a otros colegios ordinarios, a centros formativos, a la Universidad…» En un centro « lleno de pasión y de corazón », el objetivo final, ha apuntado, es «perseguir una educación inclusiva verdadera, donde cada persona pueda relacionarse con los demás, controlar su vida y progresar como persona. Es lo que buscamos: la conexión y la contribución a la sociedad». Como era de esperar, la entrega de premios ha sido muy emotiva. Varios alumnos han participado y han dado las gracias al Rey por su presencia y su apoyo a la educación inclusiva. Felipe VI ha leído un breve discurso en el que ha felicitado a los responsables del centro «por una labor diaria en un lugar en el que cada gesto, cada decisión y cada esfuerzo tienen un propósito muy claro: ofrecer las mejores oportunidades para el desarrollo y el bienestar de los alumnos en todas las edades». «La visita me ha servido para comprobar el compromiso de todos los que forman parte de este colectivo, que construyen caminos de aprendizaje adaptados a cada uno, respetando sus ritmos, capacidades y necesidades. Ha sido una experiencia extraordinaria ver cómo dais luz y esperanza a nuestra sociedad en una labor que trasciende a la enseñanza», ha subrayado. Se ha referido al lema del centro educativo: 'Soy capaz, soy protagonista'. «Refleja el profundo cariño con el que trabajáis con cada niño y adolescente, así que debemos daros las gracias por lo que se hace aquí», ha finalizado, no sin antes dar las gracias por el detalle que le han regalado: un mural de la Familia Real realizado por los alumnos con material reciclado. «Mis hijas están lejos, pero se lo mostraré», ha prometido.
El Rey Felipe VI ha visitado este jueves 3 de abril Granada con un doble motivo: por un lado, entregar el premio Escuela del Año que concede la Fundación Princesa de Girona al Centro de Educación Especial Purísima Concepción de las Hermanas Hospitalarias; por otro, inaugurar el Foro por el Futuro del Mediterráneo, que reúne entre hoy y mañana a representantes de 43 países de Europa, Oriente Próximo y el norte de África en el Palacio de Congresos y Exposiciones. Ha habido, por así decirlo, un lado más humano y otro más político. Y la visita al centro educativo cuadra mucho más, lógicamente, con la primera categoría. Allí se atiende a 98 alumnos con necesidades especiales y eso se hace, además, con cariño y profesionalidad. No es raro que el presidente de la Fundación Princesa de Girona, Francisco Belil , haya dicho hoy que se merece sobradamente el premio, como también que debería haber «muchos más lugares así en España». Acompañado de un buen número de autoridades –entre otros, el presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno ; o la ministra de Educación, Pilar Alegría - el monarca ha visitado las instalaciones y se ha detenido en aulas específicas que se emplean para el aprendizaje y la atención especializada. Llaman la atención, por ejemplo, una sala de haloterapia, donde la sal juega un papel fundamental porque ayuda a quienes tienen problemas de respiración, o la de hidroterapia, especialmente indicada para quienes tienen problemas de movilidad y necesitan trabajar la motricidad. Los chicos también aprenden allí habilidades de la vida diari a: hacerse la cama, tender la ropa… Las instalaciones son muy completas y útiles, eso es evidente. «Aquí hacen algo especial y digno de ser aplicado, es un trabajo hecho a medida», ha destacado Francisco Belil, mientras que la directora del centro de educación, Inmaculada Garrido , ha especificado que el premio se concede fundamentalmente por el proyecto Centro Especializado de Referencia y Apoyo (CERA), un modelo «de transformación del modelo de Centro de Educación Especial que primero es interna, porque nosotros estamos continuamente investigando, desarrollando y adaptándonos, y que luego impacta hacia afuera, a otros colegios ordinarios, a centros formativos, a la Universidad…» En un centro « lleno de pasión y de corazón », el objetivo final, ha apuntado, es «perseguir una educación inclusiva verdadera, donde cada persona pueda relacionarse con los demás, controlar su vida y progresar como persona. Es lo que buscamos: la conexión y la contribución a la sociedad». Como era de esperar, la entrega de premios ha sido muy emotiva. Varios alumnos han participado y han dado las gracias al Rey por su presencia y su apoyo a la educación inclusiva. Felipe VI ha leído un breve discurso en el que ha felicitado a los responsables del centro «por una labor diaria en un lugar en el que cada gesto, cada decisión y cada esfuerzo tienen un propósito muy claro: ofrecer las mejores oportunidades para el desarrollo y el bienestar de los alumnos en todas las edades». «La visita me ha servido para comprobar el compromiso de todos los que forman parte de este colectivo, que construyen caminos de aprendizaje adaptados a cada uno, respetando sus ritmos, capacidades y necesidades. Ha sido una experiencia extraordinaria ver cómo dais luz y esperanza a nuestra sociedad en una labor que trasciende a la enseñanza», ha subrayado. Se ha referido al lema del centro educativo: 'Soy capaz, soy protagonista'. «Refleja el profundo cariño con el que trabajáis con cada niño y adolescente, así que debemos daros las gracias por lo que se hace aquí», ha finalizado, no sin antes dar las gracias por el detalle que le han regalado: un mural de la Familia Real realizado por los alumnos con material reciclado. «Mis hijas están lejos, pero se lo mostraré», ha prometido.
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