El restaurante histórico madrileño que frecuenta el rey para saborear comida castiza
Madrid es una ciudad con una rica tradición gastronómica, donde los restaurantes históricos siguen conservando su esencia. Entre ellos destaca la Taberna La Cruzada, un establecimiento con casi dos siglos de historia que se ha convertido en un referente de la comida castiza. Recientemente, este emblemático restaurante ha recibido la visita de un comensal muy especial: el rey Felipe VI, quien acudió para degustar uno de sus platos estrella, el cocido madrileño. Un restaurante con historia y tradición Fundada en 1827, la Taberna La Cruzada es uno de los restaurantes más antiguos de Madrid y ha sido testigo de la evolución de la ciudad a lo largo de los siglos. Su fama se debe no solo a la calidad de su cocina, sino también a su historia, ya que fue frecuentada por ilustres personajes como Alfonso XII, intelectuales y grandes personalidades del siglo XIX y XX. Hoy en día, sigue siendo un lugar de referencia para aquellos que buscan sabores auténticos y recetas tradicionales. Este establecimiento, ubicado en la Plaza de Gabriel Miró, en la zona de Las Vistillas, mantiene su esencia castiza y su encanto de taberna clásica. La especialidad de la casa es el cocido madrileño servido en tres vuelcos, un plato que ha sido premiado en múltiples ocasiones como el mejor de la capital. Su compromiso con la tradición y la calidad lo han convertido en una parada obligada para locales y visitantes. La visita del rey Felipe VI El monarca, conocido por su gusto por la gastronomía española, sorprendió al equipo de la taberna con su visita. Según la publicación del restaurante en Instagram, la presencia del rey fue motivo de gran orgullo: “Siempre presumimos de tener los mejores clientes, pero cuando viene el Rey presumimos más”. Su visita tuvo lugar después de presidir la inauguración de la exposición 'Flamboyant' de la artista portuguesa Joana Vasconcelos en el Palacio de Liria. Aunque no es el rey la única personalidad famosa que visita esta taberna. No es la primera vez que una estrella elige este restaurante para comer comida castiza. El rey Felipe VI, en este caso, suele preferir establecimientos con un trato cercano y una oferta gastronómica basada en recetas clásicas, como es el caso de La Cruzada. Su elección refuerza la importancia de estos restaurantes en la cultura gastronómica madrileña. Un referente de la gastronomía madrileña La Taberna La Cruzada ha sabido mantenerse fiel a sus raíces sin dejar de evolucionar. Actualmente, el restaurante es gestionado por la presentadora Laura Gómez, de Telemadrid, quien ha apostado por preservar la autenticidad del lugar mientras lo adapta a los tiempos modernos. La combinación de historia, tradición y buen hacer ha sido clave para su éxito continuado. El cocido madrileño, plato insignia del restaurante, sigue siendo elaborado con ingredientes de primera calidad y respetando la técnica tradicional. Su preparación en tres vuelcos permite apreciar la riqueza de sabores en cada etapa del plato: primero el caldo, luego los garbanzos y verduras, y finalmente las carnes. Este meticuloso proceso ha sido reconocido con varios galardones, consolidando a La Cruzada como un referente en la gastronomía madrileña. Además del cocido, el restaurante ofrece una amplia variedad de platos castizos que transportan a los comensales a la esencia de la cocina madrileña. Callos a la madrileña, rabo de toro y huevos estrellados son algunas de las delicias que se pueden disfrutar en este histórico establecimiento. La carta refleja el amor por la cocina tradicional y el respeto por las recetas que han perdurado a lo largo del tiempo. Con su visita, Felipe VI ha puesto una vez más en el foco la importancia de la gastronomía castiza y la relevancia de los restaurantes históricos de Madrid. Lugares como La Cruzada no solo conservan el sabor de la tradición, sino que también forman parte del patrimonio cultural y gastronómico de la ciudad. Su historia y su cocina siguen atrayendo a quienes buscan autenticidad en cada bocado.
Madrid es una ciudad con una rica tradición gastronómica, donde los restaurantes históricos siguen conservando su esencia. Entre ellos destaca la Taberna La Cruzada, un establecimiento con casi dos siglos de historia que se ha convertido en un referente de la comida castiza. Recientemente, este emblemático restaurante ha recibido la visita de un comensal muy especial: el rey Felipe VI, quien acudió para degustar uno de sus platos estrella, el cocido madrileño.
Un restaurante con historia y tradición
Fundada en 1827, la Taberna La Cruzada es uno de los restaurantes más antiguos de Madrid y ha sido testigo de la evolución de la ciudad a lo largo de los siglos. Su fama se debe no solo a la calidad de su cocina, sino también a su historia, ya que fue frecuentada por ilustres personajes como Alfonso XII, intelectuales y grandes personalidades del siglo XIX y XX. Hoy en día, sigue siendo un lugar de referencia para aquellos que buscan sabores auténticos y recetas tradicionales.
Este establecimiento, ubicado en la Plaza de Gabriel Miró, en la zona de Las Vistillas, mantiene su esencia castiza y su encanto de taberna clásica. La especialidad de la casa es el cocido madrileño servido en tres vuelcos, un plato que ha sido premiado en múltiples ocasiones como el mejor de la capital. Su compromiso con la tradición y la calidad lo han convertido en una parada obligada para locales y visitantes.
La visita del rey Felipe VI
El monarca, conocido por su gusto por la gastronomía española, sorprendió al equipo de la taberna con su visita. Según la publicación del restaurante en Instagram, la presencia del rey fue motivo de gran orgullo: “Siempre presumimos de tener los mejores clientes, pero cuando viene el Rey presumimos más”. Su visita tuvo lugar después de presidir la inauguración de la exposición 'Flamboyant' de la artista portuguesa Joana Vasconcelos en el Palacio de Liria. Aunque no es el rey la única personalidad famosa que visita esta taberna.
No es la primera vez que una estrella elige este restaurante para comer comida castiza. El rey Felipe VI, en este caso, suele preferir establecimientos con un trato cercano y una oferta gastronómica basada en recetas clásicas, como es el caso de La Cruzada. Su elección refuerza la importancia de estos restaurantes en la cultura gastronómica madrileña.
Un referente de la gastronomía madrileña
La Taberna La Cruzada ha sabido mantenerse fiel a sus raíces sin dejar de evolucionar. Actualmente, el restaurante es gestionado por la presentadora Laura Gómez, de Telemadrid, quien ha apostado por preservar la autenticidad del lugar mientras lo adapta a los tiempos modernos. La combinación de historia, tradición y buen hacer ha sido clave para su éxito continuado.
El cocido madrileño, plato insignia del restaurante, sigue siendo elaborado con ingredientes de primera calidad y respetando la técnica tradicional. Su preparación en tres vuelcos permite apreciar la riqueza de sabores en cada etapa del plato: primero el caldo, luego los garbanzos y verduras, y finalmente las carnes. Este meticuloso proceso ha sido reconocido con varios galardones, consolidando a La Cruzada como un referente en la gastronomía madrileña.
Además del cocido, el restaurante ofrece una amplia variedad de platos castizos que transportan a los comensales a la esencia de la cocina madrileña. Callos a la madrileña, rabo de toro y huevos estrellados son algunas de las delicias que se pueden disfrutar en este histórico establecimiento. La carta refleja el amor por la cocina tradicional y el respeto por las recetas que han perdurado a lo largo del tiempo.
Con su visita, Felipe VI ha puesto una vez más en el foco la importancia de la gastronomía castiza y la relevancia de los restaurantes históricos de Madrid. Lugares como La Cruzada no solo conservan el sabor de la tradición, sino que también forman parte del patrimonio cultural y gastronómico de la ciudad. Su historia y su cocina siguen atrayendo a quienes buscan autenticidad en cada bocado.
