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El Papa Francisco se mantiene "estable" tras la crisis del viernes por broncoespasmo
El Papa Francisco ha pasado una noche "tranquila" y sigue descansando, según ha informado el Vaticano este domingo, tras la crisis aislada de broncoespamos del pasado viernes. "La noche ha sido tranquila, el Papa sigue descansado", dice el comunicado que ha emitido la Santa Sede a primera hora de este domingo, 2 de marzo. El Pontífice lleva ingresado desde el 14 de febrero en el Hospital Gemelli de Roma como consecuencia de diferentes complicaciones en su salud. En el boletín del sábado por la tarde, el Vaticano informaba de que el estado clínico del Papa "permanecía estable". El día anterior había presentado una crisis aislada de broncoespasmo. Este episodio no se ha repetido. El Pontífice, según el comunicado médico del sábado, alternó la ventilación mecánica no invasiva con largos periodos de oxigenoterapia de alto flujo, manteniendo siempre una buena respuesta al intercambio gaseoso. Apirético, Francisco no presentaba leucocitosis y sus parámetros hemodinámicos eran siempre estables. Además, el Papa seguía alimentándose por sí mismo y realizaba regularmente fisioterapia respiratoria "colaborando activamente". Vigilante y orientado, el Papa Francisco recibió este sábado la Eucaristía y rezó durante unos veinte minutos en la capilla. El último comunicado médico, del sábado El último parte médico del Pontífice, el correspondiente al sábado 1 de marzo, indicaba que se encontraba "afebril", que sus condiciones clínicas eran "estables" y que no presentaba leucocitosis, según informó el Vaticano. En el comunicado, se detallaba que el Pontífice ha alternado "ventilación mecánica no invasiva con largos periodos de oxigenoterapia de alto flujo, manteniendo siempre buena respuesta al intercambio gaseoso". Del mismo modo, el Papa ya no presentaba más broncoespasmos, a diferencia del viernes, cuando sufrió una crisis aislada de broncoespasmos que desembocó en un episodio de vómitos con inhalación y "un empeoramiento repentino de la afección respiratoria". En el comunicado del sábado por la tarde, el Vaticano destacó que "las condiciones clínicas del Santo Padre se mantuvieron estables" y los "parámetros hemodinámicos", también. El Papa, que lleva ingresado desde el 14 de febrero en el Hospital Gemelli de Roma tras sufrir una infección de las vías respiratorias, ha continuado comiendo y se ha sometido "periódicamente a fisioterapia respiratoria, colaborando activamente" este sábado. Además, el Pontífice está "orientado" y por la tarde ha recibido la Eucaristía y luego se ha dedicado a la oración, aunque el pronóstico médico sigue siendo reservado.
El Papa Francisco ha pasado una noche "tranquila" y sigue descansando, según ha informado el Vaticano este domingo, tras la crisis aislada de broncoespamos del pasado viernes. "La noche ha sido tranquila, el Papa sigue descansado", dice el comunicado que ha emitido la Santa Sede a primera hora de este domingo, 2 de marzo. El Pontífice lleva ingresado desde el 14 de febrero en el Hospital Gemelli de Roma como consecuencia de diferentes complicaciones en su salud. En el boletín del sábado por la tarde, el Vaticano informaba de que el estado clínico del Papa "permanecía estable". El día anterior había presentado una crisis aislada de broncoespasmo. Este episodio no se ha repetido. El Pontífice, según el comunicado médico del sábado, alternó la ventilación mecánica no invasiva con largos periodos de oxigenoterapia de alto flujo, manteniendo siempre una buena respuesta al intercambio gaseoso. Apirético, Francisco no presentaba leucocitosis y sus parámetros hemodinámicos eran siempre estables. Además, el Papa seguía alimentándose por sí mismo y realizaba regularmente fisioterapia respiratoria "colaborando activamente". Vigilante y orientado, el Papa Francisco recibió este sábado la Eucaristía y rezó durante unos veinte minutos en la capilla. El último comunicado médico, del sábado El último parte médico del Pontífice, el correspondiente al sábado 1 de marzo, indicaba que se encontraba "afebril", que sus condiciones clínicas eran "estables" y que no presentaba leucocitosis, según informó el Vaticano. En el comunicado, se detallaba que el Pontífice ha alternado "ventilación mecánica no invasiva con largos periodos de oxigenoterapia de alto flujo, manteniendo siempre buena respuesta al intercambio gaseoso". Del mismo modo, el Papa ya no presentaba más broncoespasmos, a diferencia del viernes, cuando sufrió una crisis aislada de broncoespasmos que desembocó en un episodio de vómitos con inhalación y "un empeoramiento repentino de la afección respiratoria". En el comunicado del sábado por la tarde, el Vaticano destacó que "las condiciones clínicas del Santo Padre se mantuvieron estables" y los "parámetros hemodinámicos", también. El Papa, que lleva ingresado desde el 14 de febrero en el Hospital Gemelli de Roma tras sufrir una infección de las vías respiratorias, ha continuado comiendo y se ha sometido "periódicamente a fisioterapia respiratoria, colaborando activamente" este sábado. Además, el Pontífice está "orientado" y por la tarde ha recibido la Eucaristía y luego se ha dedicado a la oración, aunque el pronóstico médico sigue siendo reservado.
