El novio de Ayuso sabe que Sánchez no le pagará los 100.000 euros que le reclama y se prepara para llevarlo al Supremo
En su particular cruzada contra todo aquel que ha intentado poner pie en pared las actuaciones fraudulentas de Alberto González Amador, el novio de Isabel Díaz Ayuso se prepara para ir un paso más allá con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. El empresario, que incluyó en su lista de denunciados al líder del Ejecutivo Central quiere llevar al responsable de Moncloa al Tribunal Supremo después de la falta de acuerdo de este miércoles ante la negativa del secretario general de los socialistas de pagarle 100.000 euros y retractarse de haberle llamado "delincuente confeso". La etiqueta, que han empleado tanto rostros de la izquierda como partidos políticos, y que aparece también en medios de comunicación, hace referencia al acuerdo que la persona implicada trató de alcanzar con la Fiscalía, a la que reconoció haber cometido delitos fiscales, con el objetivo de evitar la pena de prisión. González Amador ya dio el paso con la vicepresidenta María Jesús Montero, a quien demandó por la misma razón. La pareja de la lideresa regional acudió a los tribunales para pedir la celebración de un acto de conciliación como paso previo a la interposición formal de una denuncia, pero la ministra no se presentó, por lo que los hechos se elevaron directamente al Alto Tribunal. La Sala Civil admitió a trámite la demanda de González Amador contra Montero el pasado 16 de diciembre, y las posibilidades que pasan ahora con el presidente del Gobierno son los mismos pasos o activar la vía penal con una querella. De hecho, esta última probabilidad ya se dejaba caer en el escrito que solicitaba un acto de conciliación. La diferencia reside en que en el caso de la vía civil, la admisión a trámite de la demanda es autonómica en caso de que se cumplan los requisitos formales para ello, mientras que la querella, por su parte, exige un examen mayor por parte del Supremo, dado que abre la puerta a penas de prisión de hasta dos años cuando las calumnias se han propagado con publicidad. Parece que la elección dependerá, según indican fuentes cercanas al caso a El Confidencial, de si Sánchez vuelve a realizar o no este tipo de declaraciones. Amparado por Ángel Hurtado El novio de Ayuso lleva meses viendo reforzada su postura gracias a los movimientos del juez, precisamente, del Alto Tribunal Ángel Hurtado, magistrado a la vez que investiga al fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, por la presunta revelación de la causa judicial. Todo a la vez que la información que se analiza ya había llegado previamente a varios medios de comunicación. En cualquier caso, entre las no pocas acciones polémicas llevadas a cabo por Hurtado en lo que rodea el caso, el magistrado defendió que González Amador no es un "defraudador confeso" a pesar de los correos en los que reconoce haber cometido dos delitos fiscales. "El reconocimiento expreso que en él se hace de que se han cometido dos delitos contra la Hacienda Pública, cuando aparece en determinados medios...
En su particular cruzada contra todo aquel que ha intentado poner pie en pared las actuaciones fraudulentas de Alberto González Amador, el novio de Isabel Díaz Ayuso se prepara para ir un paso más allá con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. El empresario, que incluyó en su lista de denunciados al líder del Ejecutivo Central quiere llevar al responsable de Moncloa al Tribunal Supremo después de la falta de acuerdo de este miércoles ante la negativa del secretario general de los socialistas de pagarle 100.000 euros y retractarse de haberle llamado "delincuente confeso". La etiqueta, que han empleado tanto rostros de la izquierda como partidos políticos, y que aparece también en medios de comunicación, hace referencia al acuerdo que la persona implicada trató de alcanzar con la Fiscalía, a la que reconoció haber cometido delitos fiscales, con el objetivo de evitar la pena de prisión. González Amador ya dio el paso con la vicepresidenta María Jesús Montero, a quien demandó por la misma razón. La pareja de la lideresa regional acudió a los tribunales para pedir la celebración de un acto de conciliación como paso previo a la interposición formal de una denuncia, pero la ministra no se presentó, por lo que los hechos se elevaron directamente al Alto Tribunal. La Sala Civil admitió a trámite la demanda de González Amador contra Montero el pasado 16 de diciembre, y las posibilidades que pasan ahora con el presidente del Gobierno son los mismos pasos o activar la vía penal con una querella. De hecho, esta última probabilidad ya se dejaba caer en el escrito que solicitaba un acto de conciliación. La diferencia reside en que en el caso de la vía civil, la admisión a trámite de la demanda es autonómica en caso de que se cumplan los requisitos formales para ello, mientras que la querella, por su parte, exige un examen mayor por parte del Supremo, dado que abre la puerta a penas de prisión de hasta dos años cuando las calumnias se han propagado con publicidad. Parece que la elección dependerá, según indican fuentes cercanas al caso a El Confidencial, de si Sánchez vuelve a realizar o no este tipo de declaraciones. Amparado por Ángel Hurtado El novio de Ayuso lleva meses viendo reforzada su postura gracias a los movimientos del juez, precisamente, del Alto Tribunal Ángel Hurtado, magistrado a la vez que investiga al fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, por la presunta revelación de la causa judicial. Todo a la vez que la información que se analiza ya había llegado previamente a varios medios de comunicación. En cualquier caso, entre las no pocas acciones polémicas llevadas a cabo por Hurtado en lo que rodea el caso, el magistrado defendió que González Amador no es un "defraudador confeso" a pesar de los correos en los que reconoce haber cometido dos delitos fiscales. "El reconocimiento expreso que en él se hace de que se han cometido dos delitos contra la Hacienda Pública, cuando aparece en determinados medios...
