Desplante, el primer aceite LGTBI nace en Villanueva de los Infantes
«Queremos volver, como la película de Almodóvar. Quizá esta no era la manera de volver que esperaban nuestros antepasados, pero aquí estamos, dichosas e irreverentes». Esta es la carta de presentación de ' Desplante ', el primer aceite de oliva virgen extra (AOVE) con la vitola de ser «el primero LGTBI» que un grupo de mujeres ha creado en Villanueva de los Infantes (Ciudad Real). Allí, al sur de esa provincia y lindando con Andalucía, a los pies de Sierra Morena, en una de las zonas más despobladas de España (con una media poblacional de 11 habitantes por kilómetro cuadrado) es donde nace este producto único a partir del olivar de las variedades picual y cornicabra que ellas mismas plantaron hace 17 años . «Durante siglos, las generaciones que nos precedían trabajaron la aceituna. Fueron nuestros abuelos y abuelas los que dieron forma a estas tierras. En los años 90, con la normalización de la formación universitaria, se produjo un éxodo rural que dejó huérfano el territorio», afirma Beatriz Fernández de Sevilla, cofundadora de Desplante, junto con un grupo de mujeres que viven a caballo entre Sevilla y La Mancha . Para intentar recuperar ese pasado y esa tradición olivarera es cómo nace Desplante, que tiene un doble objetivo, según indican sus creadoras: «Reconectar a personas que se habían alejado de su tierra por diferentes motivos y, por otro, preservar el territorio llevando por bandera la tolerancia». Fernández de Sevilla cree que «la España rural nunca ha sido un entorno fácil para las minorías y, aunque a día de hoy existe más apertura, todavía hay muchísimos prejuicios en torno a la orientación sexual. Somos unas enamoradas de nuestra tierra, pero también defensoras de la igualdad», señala. Así es como el pasado noviembre, tras recoger la primera cosecha, empezaron a repartir aceite entre amigos y conocidos. Poco a poco, el boca a boca ha ido funcionando y comenzaron a tener más demanda, llegando a realizar envíos a toda España y Alemania sobre todo , por ahora. Elaborado con la variedad picual, Desplante es un aceite de cosecha de selección, temprano, de cosecha propia y sin residuos que tiene toques afrutados y amargos en boca . No está calificado como ecológico, pero no se utilizan fitosanitarios y se compatibiliza con 40 colmenas del vecino de la finca del olivar, Juanjo. Después de todo ese trabajo y del éxito fulgurante que han cosechado, nunca mejor dicho, este grupo de mujeres emprendedoras puede presumir de haber colocado a su AOVE en el menú del prestigioso restaurante manchego con una estrella Michelin El Coto de Quevedo , situado en Torre de Juan Abad (Ciudad Real), de haber sido invitadas a Fitur (Feria Internacional de Turismo) o de haber sido seleccionado como obsequio del Festival de Cine de Málaga. «Nos quedan ya muy poquitas unidades», informa la cofundadora de Desplante, que explica que ha sido una primera tirada de unas 700 latas de 500 mililitros , formato que, según ella, mejor conserva el aceite. «Los clientes nos han acabado danto la razón, ya que el sabor del AOVE temprano se ha conservado a lo largo del año y mantiene un picor y un sabor frutal extraordinario», concluye.
«Queremos volver, como la película de Almodóvar. Quizá esta no era la manera de volver que esperaban nuestros antepasados, pero aquí estamos, dichosas e irreverentes». Esta es la carta de presentación de ' Desplante ', el primer aceite de oliva virgen extra (AOVE) con la vitola de ser «el primero LGTBI» que un grupo de mujeres ha creado en Villanueva de los Infantes (Ciudad Real). Allí, al sur de esa provincia y lindando con Andalucía, a los pies de Sierra Morena, en una de las zonas más despobladas de España (con una media poblacional de 11 habitantes por kilómetro cuadrado) es donde nace este producto único a partir del olivar de las variedades picual y cornicabra que ellas mismas plantaron hace 17 años . «Durante siglos, las generaciones que nos precedían trabajaron la aceituna. Fueron nuestros abuelos y abuelas los que dieron forma a estas tierras. En los años 90, con la normalización de la formación universitaria, se produjo un éxodo rural que dejó huérfano el territorio», afirma Beatriz Fernández de Sevilla, cofundadora de Desplante, junto con un grupo de mujeres que viven a caballo entre Sevilla y La Mancha . Para intentar recuperar ese pasado y esa tradición olivarera es cómo nace Desplante, que tiene un doble objetivo, según indican sus creadoras: «Reconectar a personas que se habían alejado de su tierra por diferentes motivos y, por otro, preservar el territorio llevando por bandera la tolerancia». Fernández de Sevilla cree que «la España rural nunca ha sido un entorno fácil para las minorías y, aunque a día de hoy existe más apertura, todavía hay muchísimos prejuicios en torno a la orientación sexual. Somos unas enamoradas de nuestra tierra, pero también defensoras de la igualdad», señala. Así es como el pasado noviembre, tras recoger la primera cosecha, empezaron a repartir aceite entre amigos y conocidos. Poco a poco, el boca a boca ha ido funcionando y comenzaron a tener más demanda, llegando a realizar envíos a toda España y Alemania sobre todo , por ahora. Elaborado con la variedad picual, Desplante es un aceite de cosecha de selección, temprano, de cosecha propia y sin residuos que tiene toques afrutados y amargos en boca . No está calificado como ecológico, pero no se utilizan fitosanitarios y se compatibiliza con 40 colmenas del vecino de la finca del olivar, Juanjo. Después de todo ese trabajo y del éxito fulgurante que han cosechado, nunca mejor dicho, este grupo de mujeres emprendedoras puede presumir de haber colocado a su AOVE en el menú del prestigioso restaurante manchego con una estrella Michelin El Coto de Quevedo , situado en Torre de Juan Abad (Ciudad Real), de haber sido invitadas a Fitur (Feria Internacional de Turismo) o de haber sido seleccionado como obsequio del Festival de Cine de Málaga. «Nos quedan ya muy poquitas unidades», informa la cofundadora de Desplante, que explica que ha sido una primera tirada de unas 700 latas de 500 mililitros , formato que, según ella, mejor conserva el aceite. «Los clientes nos han acabado danto la razón, ya que el sabor del AOVE temprano se ha conservado a lo largo del año y mantiene un picor y un sabor frutal extraordinario», concluye.
