Científicos argentinos lograron enseñarle a los chingolos un canto que había desaparecido hace 60 años

Un grupo de investigadores de la UBA puso a prueba un robot diseñado especialemnte para rescatar una melodía extinta.

Abr 7, 2025 - 22:09
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Científicos argentinos lograron enseñarle a los chingolos un canto que había desaparecido hace 60 años

Existen entre 7 y 9 subespecies de chingolos, un pájaro cantor también llamado "copetón", que se distribuye a lo largo de toda América del Sur, incluyendo Tierra del Fuego y la Isla de los Estados. 

Los cantos de los chingolos suelen ser característicos de los machos: se componen de 4 notas que arman un tema de tres tiempos y un trino posterior. A pesar de que el canto de cada ave individualmente es distinto, pueden tener similitudes en una misma población.

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En ese contexto, un grupo de científicos de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales de la Universidad Nacional de Buenos Aires (UBA) se dio cuenta de que un canto específico registrado en la década de los sesenta se había perdido entre los chingolos. Por lo tanto, los investigadores se tomaron la tarea de volver a introduirlo en una población específica.

Los científicos argentinos lograron utilizar un tutor robótico con el cual pudieron enseñarle a estas aves del Parque Pereyra Iraola de La Plata el canto desaparecido y que había sido registrado por última vez hace 60 años.

Cómo introdujeron el canto perdido en la población de chingolos

El trabajo consistió en analizar los parámetros de cada uno de los cantos, para luego generar un modelo matemático capaz de producir copias sintéticas de una melodía.

Luego de esto, debieron simular el tracto vocal del ave, para poder observar  la activación de los músculos de la siringe (el órgano vocal), con el objetivo de imitar lo mejor posible el sonido de este pájaro sumadericano.

En el periodo sensorial crítico de la especie (que abarca de octubre a febrero), los científicos realizaron las sesiones de canciones sintéticas, enfocándose principalmente en las horas de la mañana y con intervalos mayores a los naturales. El objetivo era acelarar la respuesta de los chingolos.

Cómo descubrieron el canto perdido que habían dejado de cantar los chingolos

La investigación científica publicada en Physica D: Nonlinear Phenomena contó a la revista National Geographic que el equipo se encargó de asistir al parque argentino para poder grabar las melodías de estos pájaros. 

Más tarde, con la creación de una red neuronal, debieron verificar cuáles eran las melodías que se seguían cantando y cuáles las que habían desaparecido.

Para darse cuenta, previamente contaban con un registro de notas musicales manuscritas, las cuales habían sido anotadas por el ornitólogo argentino Fernando Nottebohm, profesor emérito de la Universidad Rockefeller de Nueva York, Estados Unidos.

Según indicaron en la invesigación, si Nottebohm notaba una frecuencia ascendente, la marcaba con un signo hacia arriba y si era más grave, dibujaba un signo hacia abajo. Por otro lado, el trino era representado por el ornitólogo a través de pequeñas líneas.

De esta manera, los autores del estudio descubrieron que sólo tres canciones clásicas seguían cantándose en la zona y que el resto había desaparecido con los años.

¿Por qué los pajaros chingolos dejaron de cantar esta melodía?

Una posible razón por la que estos pájaros dejaron de cantar dichas melodías puede deberse a la urbanización de los alrededores del parque, lo cual hizo desaparecer a gran parte de la población de chingolos.

Otra teoría que manejan los investigadores argentinos radica en que el parque fue invadido por otras especies de aves cantoras, las cuales podrían haberse adueñado del territorio de estos bonitos pájaros marrones y blancos.

El resultado del estudio científico que logró enseñarles un canto perdido a los pájaros chingolos de Argentina

Luego de que los científicos realizaran las sesiones de canciones sintéticas y tras habrer pasado el período de silencio total, que va de febrero a septiembre, los investigadores notaron que algunos chingolos adultos habían aprendido la melodía enseñada.

No obstante, los jóvenes adultos reproducían la canción sintética con una leve variación en la última sílaba descendente. Según explicaron los expertos, esto podría deberse a una especie de dialecto que compartía esa población de pájaros del parque Pereyra Iraola y que podría haber sido adquirida por tutores reales previamente.

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La palabra de los autores

El director del Instituto de Física Interdisciplinaria y Aplicada (INFINA) de la UBA, Gabriel Mindlin, se refirió a la hazaña lograda por los científicos y destacó que si bien siempre pensaron en la preservación de la biodiversidad como una cuestión genética, según ellos también "implica una cuestión cultural".

"Aquí pusimos de moda una canción extinta, y es un caso de cómo se puede reintroducirse toda una cultura si es necesario", destacó el también coautor del estudio publicado en Physica D: Nonlinear Phenomena.

Por su parte, la coautora Ana Amador aseguró que cada pájaro canta una canción distintiva y que esta es algo así "como una huella dactilar, pero aprendida", ya que los machos suelen memorar entre una y tres canciones, provenientes de su padre.

Este canto "sirve para atraer a la hembra y proteger su territorio", explicó Amador, quien también aclaró que se trata simplemente de una forma de decir: 'Este soy yo, y aquí estoy'".