Así es 'Adolescencia', el drama policial de Netflix sobre la tragedia y el crimen en la juventud que te enganchará

Si estos días exploras el catálogo de Netflix, deberías darle una oportunidad a uno de sus últimos estrenos, Adolescencia. Esta miniserie británica llegó a la plataforma el 13 de marzo y tiene todas consigo para convertirse en uno de los grandes títulos del año. Hay muchos motivos que respaldan su candidatura, pero se pueden destacar tres: su historia desgarradora, la técnica prodigiosa empleada para rodar y el potente mensaje que trata de transmitirnos desde el comienzo hasta el final.

Adolescencia consta de cuatro capítulos en los que se abordan las consecuencias de un crimen devastador que afecta a familias enteras y a la pequeña comunidad donde se produce. Es una nueva asociación entre el director Philip Barantini y el actor Stephen Graham, que ya trabajaron juntos en la película Hierve (2021) y en su posterior adaptación a serie. Graham, además de ser protagonista, también escribió el guion junto a Jack Thorne, con quien ya colaboró en la miniserie The Virtues (2019). Detrás del proyecto también está The Plan B Entertainment, la productora de Brad Pitt.

La nueva miniserie británica ha recibido muy buenas críticas, aunque queda esperar a la respuesta de la audiencia. Son muchos los motivos para pensar que no dejará indiferente a nadie y que puede convertirse en uno de los mejores estrenos del año.

Sinopsis de 'Adolescencia'

La paz de la familia Miller se ve perturbada una mañana cuando entra en su domicilio un equipo de SWAT que busca detener al pequeño de la familia, Jamie (Owen Cooper), acusado de asesinar a una de sus compañeras de clase. La familia no puede hacer nada por evitar el arresto del joven de 13 años, que pasa a disposición judicial.

A partir de este momento, la serie pasa a presentarnos cómo el proceso afecta a varias de las partes implicadas: a la familia de Jamie, a los policías a cargo de la investigación, a la terapeuta del acusado y al propio joven. Se trata de un drama criminal que sumerge al espectador dentro de todo lo que ocurre tanto en las dependencias judiciales como en el hogar del presunto asesino, en el colegio y en el pueblo donde tiene lugar el homicidio.

Adolescencia está dividida en cuatro actos. En el primero, Jamie es detenido y pasa a disposición de los agentes, que lo interrogan para esclarecer los hechos que envuelven al asesinato de Katie. El segundo capítulo tiene lugar en la escuela, donde el inspector Bascombe (Ashley Walters) y la sargento Frank (Faye Marsay) acuden a buscar más pistas. En el tercero, Erin Doherty encarna a la terapeuta que trata de entender a Jamie Miller. Por último, el cuarto episodio se centra en la familia del acusado, en especial en cómo sus padres, interpretados por Stephen Graham y Christine Tremarco, conviven con todo lo que está sucediendo.

Un prodigio técnico y dramático

Como ya hicieron en Hierve, Philip Barantini y Stephen Graham se atrevieron de nuevo con el plano secuencia para grabar cada uno de los cuatro episodios, de principio a fin. El resultado es tan inmersivo que sumerge de lleno al espectador en todo lo que está ocurriendo y favorece la sensación de angustia y tensión constante que viven sus personajes.

Barantini explicó a El Correo Gallego que este tipo de método para rodar era apropiado para una serie tan visceral como Adolescencia, y que además servirá para meter al espectador de lleno en la historia para luego sacarlo y que así "rellenara los huecos mentalmente". Porque la trama no te enseña todo masticado, sino que te muestra lo que necesitas saber para que puedas formar tu propia imagen de lo que está sucediendo. Adolescencia nos propone constantemente un ejercicio interpretativo sobre el crimen y todos los condicionantes que llevaron a que ocurriera.

La preproducción duró seis meses. Una vez que se determinaba dónde debía estar cada cámara y cada elemento, se pasaba a trabajar con los actores. El proceso para cada capítulo era el mismo: dos semanas de trabajo con los actores y ensayos junto a los técnicos y los extras, y una para grabar. En la tercera semana, se grababa la secuencia dos veces al día durante cinco días. Al final, cada episodio tenía diez tomas completas.

La parte técnica es muy importante en Adolescencia, pero también la dramática. El elenco está a la altura de la historia, y cabe destacar la actuación de Owen Cooper, que pese a ser su primer actuación profesional, interpreta con mucha virtuosidad a Jamie Miller.

'Adolescencia' estimula y genera debate

Desde el principio, Adolescencia te hace pensar al poner el foco en un adolescente acusado de asesinato. ¿Qué se debe hacer cuando el crimen lo comete alguien del que damos por sentado su inocencia? ¿Cómo puede un niño ser culpable de algo tan atroz? ¿Hay un solo culpable? Son preguntas de difícil respuesta, y aunque se muestra un punto de vista muy claro, la última reflexión siempre debe recaer en el espectador.

Puede parecer sorprendente que se acuse a un niño de 13 años de matar a alguien. De hecho, es fácil preguntarse si la serie está basada en hechos reales. Stephen Graham admitió en una entrevista para Tudum que tomó como referencia varios casos de adolescentes cometiendo crímenes, en algunos casos llegando a apuñalar a otras personas hasta la muerte. Pero no, Adolescencia no se inspira en un hecho concreto, es más bien una amalgama de situaciones que por desgracia suceden actualmente.

Además de todo el dramatismo que envuelve a los protagonistas de la historia, también salen a la luz otras reflexiones sobre todo lo que influye en el caso. Es muy fácil cuestionarse hasta dónde ha llegado la normalización de la violencia, en parte amparada por las redes sociales en las que participan los propios niños y niñas. También se abordan otros asuntos como la salud mental y la masculinidad tóxica, señalando particularmente a la machosfera de internet que promueve mensajes misóginos que acaban calando entre los más jóvenes. Se hace mucho hincapié, por ejemplo, en una teoría que sostiene que el 80% de las mujeres se fijan en el 20% de los hombres, por lo que el resto debe adoptar otra personalidad para poder encajar en ese pequeño porcentaje. Esta y otras chorradas contaminan la mente de miles de hombres y, por supuesto, también de los jóvenes.

En definitiva, Adolescencia promete ser uno de los grandes éxitos del 2025 e invitará a quienes le den una oportunidad a reflexionar sobre las atrocidades que puede llegar a cometer el ser humano y las consecuencias de un ambiente cada vez más tóxico no solo para los más pequeños, sino para la sociedad en general.

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