Vélez sigue de capa caída, ahora con Barros Schelotto: en el debut del DT, derrota contra Riestra
En Liniers, el último campeón perdió por 1 a 0; una deslucida tarea, más allá del reclamo por un penal no cobrado
La presentación fue propia de una figura. Del regreso de una estrella internacional a nuestro medio. Guillermo Barros Schelotto está de vuelta en el fútbol argentino. Ídolo y figura como jugador de Boca, de paso efervescente como entrenador (varias luces, unas cuantas sombras, entre ellas, la final de Madrid) construyó una carrera en el exterior. Algunas buenas, otras no tanto. En Estados Unidos y el seleccionado de Paraguay, años después del impacto en Lanús, en donde es una estatua viviente.
Ahora, en Vélez, empezó otra aventura. Las luces de su imagen le dieron paso a un equipo que está en plena etapa de reconstrucción. Hace tiempo que el campeón de la Liga Profesional quedó en el recuerdo. La derrota contra Riestra fue una clara muestra.
La prepotencia ofensiva que suele darle a sus equipos se vio (y se diluyó) rápido, con un cabezazo de Braian Romero que chocó con las manos de Ignacio Arce, antes de impactar en el travesaño. Parecía que Vélez se lo llevaba puesto a Riestra, aunque duró un suspiro. A los 7 minutos, después de un lateral (Guillermo se quejó de dónde se sacó, como Fernando Gago en un Boca-Racing), Antony Alonso envió un centro que cabeceó Jonathan Herrera con alma y vida.
El silencio tomó la posta en Liniers, luego de tanta algarabía y esperanza.
Silbidos, tensión y hasta reproches de Guillermo a sus jugadores. No tiene fortuna Vélez: un pase genial de Maher Carrizo (imperial por el sector derecho), encontró una definición exquisita de Romero, pero no fue celebrado por una leve posición adelantada. Vélez busca, intenta, pero no puede. Como si se tratara de un maleficio.
El reclamo de Guillermo Barros Schelotto ante juez de línea