Una azafata del '1,2,3', cuenta el infierno que vivió con Chicho Ibáñez Serrador: "Era un desequilibrado"

Marta de Pablo decidió hablar sobre un episodio poco conocido de su vida profesional. Invitada al programa de TardeAR de este martes, la actriz rememoró algunas experiencias desagradables de su paso por Un, dos, tres, responda otra vez, el popular concurso televisivo creado por Chicho Ibáñez Serrador, de quien no guarda un buen recuerdo.

"Era un desequilibrado", aseguró sin miramientos. Según explicó, conoció a Ibáñez Serrador en unos castings en Barcelona para un proyecto que no llegó a realizarse. Poco después, fue fichada para 1,2,3, siendo aún menor: "Ahí empiezan las cosas raras".

En su relato, De Pablo comentó que, por aquel entonces, tendía a confiar en quienes le doblaban la edad: "Normalmente, alguien joven piensa que los adultos saben mucho más". En ese contexto, mencionó un episodio especialmente turbio: fue llevada a un lugar donde se realizaban grabaciones en un prostíbulo. "Era tétrico", dijo.

La intérprete, además, subrayó la inestabilidad emocional del director: "Era una persona que carecía de cualquier tipo de estabilidad. Tenía muchos problemas psicológicos". También aludió a su forma de ejercer autoridad en el set: "Él quería dominar el plató".

A lo largo de la entrevista, reconoció nunca le resultó fácil interpretar las intenciones del realizador con ella: "Es muy complicado saber si era una obsesión o estaba enamorado". Según desveló, incluso llegó a aparecer frente a su domicilio sin previo aviso para que se fuese con él: "Se llegó a plantar debajo de mi casa con billetes de avión diciéndome que se quería fugar conmigo".

Según sus palabras, en aquel entorno laboral no era fácil llevarle la contraria. "Era una persona que lo tenía todo y no aceptaba un no", afirmó. "Te castigaba, te quería humillar", concluyó.