El ministro de Agricultura, Luis Planas, puso cifra este lunes al momento 'dulce' que vive el aceite de oliva en lo que llevamos de la campaña 2024-2025 (que abarca de octubre de 2024 a septiembre de este año): "Los 1,40 millones de toneladas las pasamos. Este año vamos a estar entorno a 1,42 millones. Esto es el 40% de la producción mundial y un 67% de la europea", apuntaba durante la puesta de largo de la vigésima segunda edición de Expoliva que se celebrará de 14 a 17 de mayo en Jaén. Unos números que contrastan con el aforo (previsiones) que publicaba el Ministerio en octubre: hasta 1,26 millones de toneladas. Lo que ya era una buena noticia, tras las campañas de 2023-2024 (783.000 toneladas) y 2022-2023 (620.900 toneladas) marcadas por la falta de precipitaciones. Todo ello, con una buena aportación de lluvias en el final de este invierno y unos precios normalizados. Un círculo virtuoso que solo puede romper una persona: Donald Trump.

"El mercado americano es clave"

El presidente estadounidense anució que impondrá aranceles a todos los productos agrícolas desde el próximo 2 de abril, aunque hasta la actualidad no se ha concretado nada más. A esto se suma la gran inquietud que generó, durate la semana pasada, la amenaza de gravar con un 200% al vino, el champán y otras bebidas alcohólicas con origen en la Unión Europea como respuesta a las contramedidas impuestas por Bruselas a productos como el whisky. Desde la Asociación Española de la Industria y Comercio Exportador de Aceites de Oliva y Aceites de Orujo (Asoliva), su director Rafael Pico, afirma que "el mercado americano es clave: cada año exportamos 180.000 toneladas de aceite de oliva desde España y el tipo de gravámenes y condiciones de aplicación que se definan a partir del 2 de abril, podrían hacer perder competitividad". En términos de valor, el año pasado se vendió aceite de oliva en el exterior por 6.155,17 millones de euros (1.013,43 millones a Estados Unidos).

En este sentido, admite que todavía no hay concreción sobre los productos que puedan verse afectados aunque sostiene que "es más que probable que el aceite de oliva esté entre ellos". En cualquier caso, añade un matiz muy relevante: "el ciudadano estadounidense consume cada vez más aceite y están dispuestos a pagar por ello" y recuerda que Estados Unidos ha sido el país donde menos ha caído el consumo del 'oro verde' en los últimos dos años.

"El ciudadano estadounidense consume cada vez más aceite y están dispuestos a pagar por ello", Rafael Pico (Asoliva)

En una línea similar se pronuncia el presidente del Consejo Sectorial de Aceite de Oliva de Cooperativas Agro-alimentarias, Rafael Sánchez de Puerta, quien constata que hay "una excesiva incertidumbre y parece que no están midiendo que detrás de una acción hay una reacción" en referencia a futuras represalias de los países agredidos por la política arancelaria de Trump. En este sentido, opina que ante la falta de una importante cosecha local "si la estrategia es proteger producciones propias no tiene sentido ninguno, porque lo terminarían pagando los consumidores estadounidenses"

Aranceles para todos o a la carta

Para el director de Asoliva afirma que "será determinante saber cuáles son las medidas concretas que se adopten en Estados Unidos frente a los productos agroalimentarios y, más en concreto, al aceite de oliva". Es decir, qué porcentaje tendría el arancel y cómo se aplicaría. En su opinión, si se estableciera un 25% de arancel a todas las importaciones de alimentos de la UE "independientemente de su origen, el escenario no supondría una elevada distorsión o pérdida de competitividad para España porque también repercutiría en otros países exportadores". Para Pico lo más preocupante vendría si se repitiera el patrón del primer mandato del magnate neoyorquino en la Casa Blanca (2017-2021), cuando eximió al aceite italiano de los aranceles. "Eso sí supondría un mayor impacto, y una pérdida de competitividad de nuestro país frente a otros mercados exportadores que no se vieran afectados", apunta.

Un temor que comparten desde el gigante cooperativo DCOOP, que el año pasado exportó aceite de oliva por valor de 718 millones de euros y tuvo en Estados Unidos su segundo mercado. A nivel global esta cooperativa alcanzó en 2024 la mayor facturación de su historia hasta los 1.554,95 millones de euros. Fuentes de la compañía explican que están a la expectativa para ver si se concretan y de qué forma. En lo que sí coinciden es que "lo peor sería volver a un escenario en el que algunos países sí tengan aranceles y otros no" y ven como un mal menor que todos los países tuvieran el mismo trato.

Desde el grupo cooperativo DCOOP avisan que "lo peor sería volver a un escenario en el que algunos países sí tengan aranceles y otros no" y ven como un mal menor que todos los países tuvieran el mismo trato.

Precios más bajos, lluvias y mayor consumo

Estos nubarrones, que apenas se atisban en el horizonte (hasta el próximo 2 de abril, Trump dixit) coinciden en palabras del presidente del Consejo Sectorial de Aceite de Oliva de Cooperativas Agro-alimentarias Rafael Sánchez de Puerta con "una recuperación del mercado interior muy rápida" y una producción que "superará los 1,40 millones de toneladas". Todo ello, tras dos años que describe como excepcionales por la baja cosecha.

En este sentido, Sánchez de Puerta no duda en destacar el "aterrizaje" de los precios tanto en origen como en la venta al consumidor acentuada desde inicios de año con la llegada de la nueva producción. "Espero que hayamos tocado fondo", apunta el respresentante de Cooperativas quien cree que por mucho que bajara más no aumentarían tanto las ventas y piensa que ahora toca "dinamizar el mercado". En cualquier caso, concluye, "que los precios bajaran más no sería lo más deseable".

"Espero que hayamos tocado fondo", destaca Rafael Sánchez de Puerta (Cooperativas Agro-alimentarias) sobre la caída de los precios del aceite de oliva

Por otra parte, las lluvias de las últimas dos semanas están teniendo un recibimiento muy caluroso desde el sector. Segúnel Ministerio de Transición Ecológica, a fecha de 11 de marzo (las precipitaciones ha continuado durante los días posteriores), la reserva hídrica ha alcanzado el 60,9% de la capacidad total que permiten todas las infraestructuras hídricas alcanzando los 34.125 hectómetros cúbicos. Solo en los 7 días anteriores se ganaron 1.614 hectómetros cúbicos (equivalentes al 2,9% de la capacidad de los embalses españoles). Desde la Asociación Nacional de Industriales Envasadores y Refinadores de Aceites Comestible (ANIERAC), su director Primitivo Fernández las describe como "magníficas" y apunta que "son las mejores noticias para la cosecha de 2025 y 2026, que se confirmará si tenemos un clima favorable en primavera y verano".