Qué es el Kobido, la técnica que rejuvenece el rostro y estimula la circulación sanguínea en la piel

La estética facial es una tendencia en alza en España. Cada vez existen más tratamientos que ayudan a mejorar la belleza de nuestro rostro. Desde técnicas para eliminar las arrugas hasta ejercicios de yoga que pueden ayudar a realzar los pómulos. Una técnica que quizás muchos no conozcan y cuyo objetivo es el envejecimiento del rostro es el masaje kobido.

Se trata de un masaje ancestral japonés en el que se combina de manera perfecta la relajación con el cuidado de la piel. En los últimos años se ha popularizado debido a los efectos rejuvenecedores y emocionales, puesto que con ella se busca alcanzar el bienestar físico y mental. Según explica la experta en tratamientos de belleza Cristina Aranda de SEDATIO en su página web esta técnica "se caracteriza por movimientos precisos que estimulan la circulación y promueven la producción de colágeno".

Así es el masaje kobido

El masaje kobido utiliza diferentes maniobras para intentar lograr ese efecto rejuvenecedor. Los movimientos drenantes son fundamentales para esta técnica japonesa. "Están diseñadas para facilitar la circulación sanguínea y linfática, favoreciendo el drenaje de toxinas acumuladas en la piel", explica Aranda.

En este tipo de masaje se tocan 16 músculos diferentes y hasta 24 puntos que van desde el rostro, la cabeza, el maxilar, el cuello y la parte superior del pecho. Sus sesiones suelen tener una duración de 50 minutos. Lo primero de todo es limpiar y drenar el rostro presionando la piel y estirando algunos puntos para depurar las toxinas.

Tras esto, llega el estiramiento. En esta fase se tratan las líneas de expresión y las bolsas. Para iluminar se usan aceites que ayudan al deslizamiento. De esta manera, el rostro irá recuperando la luminosidad. Después, toca el 'lifting' haciendo presión, pero sin excesiva fuerza para oxigenar. Y por último, momento shiatsu que busca aliviar las tensiones y alcanzar la relajación.

Beneficios del kobido

La experta en tratamientos de belleza Cristina Aranda afirma en su página web que este masaje ofrece una serie de beneficios. Quizás uno de los principales es "su capacidad para revitalizar la apariencia de la piel". El kobido ayuda también a "dispersar toxinas y mejora la circulación sanguínea". Esto quiere decir que es efectivo para "disminuir arrugas y líneas de expresión".

También destaca los beneficios que ofrece en la salud mental y asegura que "se reconoce por su capacidad para generar un estado de calma y bienestar emocional". La técnica japonesa es "efectiva para liberar tensiones acumuladas en la musculatura facial", por lo que su alivio no solo se va a percibir en la cara, sino que "reduce el estrés general, brindando una pausa saludable en la rutina diaria".

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