Por qué no deberías usar ropa ajustada a diario
Mala circulación o infecciones, además de restricción de movimiento, son algunos de los problemas de usar ropa ajustada en exceso Los trucos para una buena hidratación: así puedes beber más agua al día La moda determina muchas veces nuestras elecciones de vestuario, pero cuando estas incluyen ropa muy ajustada podemos estar haciendo más daño que bien a nuestro cuerpo. Elegir una talla menos de la que necesitamos, o unas mallas moldeadoras súper ajustadas, así como pantalones slim que abrazan pero también comprimen nuestras piernas, además de ser opciones incómodas, no son nada recomendables. La ropa no está pensada para dar a nuestro cuerpo una forma que no tiene, y ahí es donde podemos tener problemas ya que el cuerpo puede reaccionar de distintas maneras. Lo advertía en un comunicado hace unos años la Fundación Española del Corazón (FEC), según la cual el uso frecuente de ropa demasiado ajustada puede ayudar a que aparezcan problemas cardiacos porque este tipo de prendas perjudica la circulación venosa y facilita, incluso, en algunos casos, la aparición de trombos e infartos pulmonares. Los expertos también indicaban entonces que, además del ajuste, el tipo de tejido influye ya que la que está confeccionada con telas pesadas como los tejanos obstaculiza la circulación sanguínea venosa, lo que genera dificultad para el retorno de la sangre venosa y un aumento de los edemas, lo que supone un aumento de la aparición de trombos venosos, sobre todo en las piernas. Pero hay más problemas con la ropa muy ajustada. Problemas vaginales en mujeres y de fertilidad en hombres El uso de pantalones vaqueros ajustados también está relacionado con la salud vaginal. Según este estudio recogido en PubMed, usar jeans ajustados de manera regular aumenta el riesgo de que una mujer sufra vulvodinia, un dolor que se produce en la parte externa de la zona genital femenina. Tras analizar la higiene y la preferencia de pantalones, los expertos descubrieron que las mujeres que usan jeans ajustados cuatro o más veces a la semana tienen el doble de probabilidades de sufrir este dolor, en comparación con las que nunca usan pantalones ajustados. Además, usar jeans ajustados también está relacionado con irritación vaginal o infecciones. Tampoco es una buena idea que los hombres abusen de este tipo de prendas ya que, según un estudio publicado en 2018 en Reproductive Biology and Endocrinology, puede perjudicar la calidad seminal, que es inferior a la que quienes prefieren usar ropa más holgada. Ropa interior demasiado ajustada Hablamos primero de los sujetadores. Elegir la talla adecuada no es solo una cuestión de estética; es crucial para la salud y el bienestar. Cuando se usan prendas demasiado ajustadas, sin darnos cuenta, exponemos nuestro cuerpo a posibles consecuencias. El pecho es una zona delicada que alberga órganos vitales y una compleja red de nervios y vasos sanguíneos. Usar un sostén demasiado apretado puede constreñir esta zona sin querer, provocando incomodidad y daños en la piel, generalmente en forma de estrías, que están provocadas como causa del estiramiento de la piel. Usar una talla mal ajustada de sujetador también se asocia con dolor de espalda y hombros, así como mala postura y rozaduras en la piel. ¿Qué ocurre con la ropa interior de los hombres? En este caso, usar calzoncillos demasiado ajustados también tiene consecuencias nada deseables porque, en los casos más graves, algunos estudios han demostrado que los hombres que usan bóxers tienen una concentración de esperma entre un 2% y un 5% mayor que quienes usan ropa interior ajustada. Zapatos demasiado estrechos o pequeños y deformidades en el pie Si bien las ampollas y enrojecimiento son dos problemas comunes como resultado de la fricción de zapatos demasiado ajustados, otras consecuencias pueden ser menos agradables para nuestros pies. Lo explicaba el podólogo Víctor Alfaro en este artículo, en el que afirmaba que unos zapatos inadecuados pueden provocar “ampollas, callosidades y durezas, así como dolor en los pies, tobillos y rodillas y, a largo plazo, otros problemas más serios como fascitis plantar, juanetes y problemas de alineación del pie”. Otros problemas de usar ropa demasiado ajustada

Mala circulación o infecciones, además de restricción de movimiento, son algunos de los problemas de usar ropa ajustada en exceso
Los trucos para una buena hidratación: así puedes beber más agua al día
La moda determina muchas veces nuestras elecciones de vestuario, pero cuando estas incluyen ropa muy ajustada podemos estar haciendo más daño que bien a nuestro cuerpo. Elegir una talla menos de la que necesitamos, o unas mallas moldeadoras súper ajustadas, así como pantalones slim que abrazan pero también comprimen nuestras piernas, además de ser opciones incómodas, no son nada recomendables.
La ropa no está pensada para dar a nuestro cuerpo una forma que no tiene, y ahí es donde podemos tener problemas ya que el cuerpo puede reaccionar de distintas maneras.
Lo advertía en un comunicado hace unos años la Fundación Española del Corazón (FEC), según la cual el uso frecuente de ropa demasiado ajustada puede ayudar a que aparezcan problemas cardiacos porque este tipo de prendas perjudica la circulación venosa y facilita, incluso, en algunos casos, la aparición de trombos e infartos pulmonares.
Los expertos también indicaban entonces que, además del ajuste, el tipo de tejido influye ya que la que está confeccionada con telas pesadas como los tejanos obstaculiza la circulación sanguínea venosa, lo que genera dificultad para el retorno de la sangre venosa y un aumento de los edemas, lo que supone un aumento de la aparición de trombos venosos, sobre todo en las piernas. Pero hay más problemas con la ropa muy ajustada.
Problemas vaginales en mujeres y de fertilidad en hombres
El uso de pantalones vaqueros ajustados también está relacionado con la salud vaginal. Según este estudio recogido en PubMed, usar jeans ajustados de manera regular aumenta el riesgo de que una mujer sufra vulvodinia, un dolor que se produce en la parte externa de la zona genital femenina.
Tras analizar la higiene y la preferencia de pantalones, los expertos descubrieron que las mujeres que usan jeans ajustados cuatro o más veces a la semana tienen el doble de probabilidades de sufrir este dolor, en comparación con las que nunca usan pantalones ajustados. Además, usar jeans ajustados también está relacionado con irritación vaginal o infecciones.
Tampoco es una buena idea que los hombres abusen de este tipo de prendas ya que, según un estudio publicado en 2018 en Reproductive Biology and Endocrinology, puede perjudicar la calidad seminal, que es inferior a la que quienes prefieren usar ropa más holgada.
Ropa interior demasiado ajustada
Hablamos primero de los sujetadores. Elegir la talla adecuada no es solo una cuestión de estética; es crucial para la salud y el bienestar. Cuando se usan prendas demasiado ajustadas, sin darnos cuenta, exponemos nuestro cuerpo a posibles consecuencias. El pecho es una zona delicada que alberga órganos vitales y una compleja red de nervios y vasos sanguíneos. Usar un sostén demasiado apretado puede constreñir esta zona sin querer, provocando incomodidad y daños en la piel, generalmente en forma de estrías, que están provocadas como causa del estiramiento de la piel.
Usar una talla mal ajustada de sujetador también se asocia con dolor de espalda y hombros, así como mala postura y rozaduras en la piel.
¿Qué ocurre con la ropa interior de los hombres? En este caso, usar calzoncillos demasiado ajustados también tiene consecuencias nada deseables porque, en los casos más graves, algunos estudios han demostrado que los hombres que usan bóxers tienen una concentración de esperma entre un 2% y un 5% mayor que quienes usan ropa interior ajustada.
Zapatos demasiado estrechos o pequeños y deformidades en el pie
Si bien las ampollas y enrojecimiento son dos problemas comunes como resultado de la fricción de zapatos demasiado ajustados, otras consecuencias pueden ser menos agradables para nuestros pies. Lo explicaba el podólogo Víctor Alfaro en este artículo, en el que afirmaba que unos zapatos inadecuados pueden provocar “ampollas, callosidades y durezas, así como dolor en los pies, tobillos y rodillas y, a largo plazo, otros problemas más serios como fascitis plantar, juanetes y problemas de alineación del pie”.
Otros problemas de usar ropa demasiado ajustada

- Irritación de la piel
La ropa extremadamente ajustada, sobre todo la que está confeccionada con materiales sintéticos, puede generar fricción en la piel, causando irritación, enrojecimiento e incluso erupciones cutáneas graves y afecciones como eccemas y dermatitis. Estos problemas cutáneos pueden ser más frecuentes cuando la tela roza de manera repetida contra la piel tras un tiempo prolongado.
- Más celulitis
Llevar ropa demasiado ajustada, ya sea vaqueros, mallas, ropa interior o calcetines, puede provocar problemas circulatorios porque esta ropa comprime en exceso las venas, lo que puede provocar una mala oxigenación, retención de líquidos y toxinas que, según la FEC, favorece la aparición de celulitis y de depósitos de grasa en algunas zonas del cuerpo.
También es común que se produzca una sensación de entumecimiento en las extremidades inferiores, hinchazón, pies fríos e incluso de varices si las venas están dilatadas.
- Dificultad para realizar bien la digestión
La ropa demasiado ajustada alrededor del estómago puede ralentizar la digestión ya que aprieta la zona abdominal. Por tanto, el estómago tiene más dificultades para digerir los alimentos. Sobre todo si usamos pantalones, tanto largos como cortos, y faldas de cintura alta, pero también tops y vestidos, así como chaquetas y abrigos ajustados o con cinturón incorporado.
- Qué priorizar a la hora de elegir la ropa
Cuando se trata de ir a comprar ropa, la máxima prioridad que deberíamos considerar, más allá de modas y gustos, es la comodidad. Es importante elegir ropa que no sea ni muy apretada ni muy holgada, que no roce ni raspe en ninguna zona del cuerpo. En el caso de los sujetadores, por ejemplo, una buena opción es usar sujetadores sin aros; en el caso de optar por esta opción, es importante que queden bien alineados con la forma del pecho.
También resulta clave evitar los tejidos sintéticos y priorizar los de fibras naturales como el algodón, el lino, el cáñamo, la seda o la lana.