Menéame como entrenamiento para la vida real

Estos días se está debatiendo largamente sobre la configuración del ignore en Menéame. Algunos proponemos eliminarlo, mientras que otros quieren dejarlo como está y un tercer sector promueve un nuevo régimen para el ignore llamado "shadowben". Con ese nuevo sistema, si yo ignoro a alguien esa persona deja de poder leerme, apareciéndole cajetines grises en el lugar de mis comentarios, que serán totalmente inaccesibles para él. Es decir, que mi ignorador podrá replicarme, tirarme puyas y decir lo que le venga en gana sobre mí sin que yo pueda no ya reportarle, sino simplemente replicarle.Los defensores de este sistema sostienen que busca prevenir el acoso contra usuarios y aislar a las víctimas del nocivo influjo de los acosadores-perseguidores. Curiosamente, algunos de ellos se pasan la vida leyendo a la gente que tienen en el ignore (incluso a usuarios que, según ellos, les acosan) y respondiéndoles. El surrealismo es tan extremo que uno de ellos se ha creado un script para poder leer a la gente que tiene en el ignore sin sacarles de él. Pero más allá de lo kafkiano de la situación, hay un problema subyacente que trasciende nuestra web y querría comentar.En la vida real los enfrentamientos cara a cara, son inevitables. Un vecino sin educación que monta fiestas nocturnas, un jeta que se te cuela en la cola del supermercado, un jefe que te quiere imponer horas extras sin cobrar, un alcalde que se niega a arreglar el socavón que hay frente a tu casa...las situaciones son miles. La inmensa mayoría son conflictos sin riesgo de violencia física, pues los payasos que amenazan con ella suelen sentir pánico ante sus consecuencias tanto legales como extralegales. Pero, en cualquier caso, si no quieres que te pisen vas a tener que plantar cara ante bastante gente a lo largo de tu vida. Esto implica tener firmeza de carácter para mantenerte en tu sitio, y madurez para que te resbalen las críticas y desprecios que te lance tu rival, que evidentemente pretende hundirte para que te apartes de su camino.Si eres incapaz de mantenerte frío ante los improperios que te lanza un friki anónimo desde internet ¿Cómo vas a enfrentarte a un mamón que tienes a dos metros? Evidentemente los insultos constituyen ataques contra el honor prohibidos por el Derecho, y nadie debería tolerarlos. Para reprimirlos están los admin. En mi caso, uno de los dueños de Menéame me llamó reiteradamente hiena, maltratador, acosador, psicópata, miserable, estafador...y aunque me reí mucho al verle tan exaltado, acabé reportándole por lo objetivamente intolerable de la situación. Y los admin actuaron strikeándole. Pero más allá de eso, he recibido múltiples críticas de usuarios cercanos a él y de haters míos.Tóxico, manipulador, eres lo peor que le ha pasado a esta web, no eres trigo limpio...son frases que me dirigen asiduamente y que jamás me han hecho plantearme recurrir al ignore. Primero porque, cuando me las sueltan en un estado de enrabietamiento, me río abundantemente. Y segundo porque las asumo con naturalidad, en unos casos porque sé que forman parte del peloteo al dueño de la web que me llamaba hiena, y en otros porque, como cantaba Chávez con un sombrero mexicano, "no soy monedita de oro que a la vez le gusta a todos". No gustar a una parte de la gente es parte de la vida, y si se desahogan diciéndotelo, tampoco tiene sentido reprimirles, siempre que no caigan en el insulto. Y, seamos sinceros, si tenemos una autoestima y una fortaleza de espíritu básicas, lo que puedan despotricar contra nosotros desde un nick anónimo debería resbalarnos absolutamente. Si no es así, tenemos un problema, pero Menéame puede ayudarnos.Entrénate opinando libremente en Menéame. Si rebaten tu postura con argumentos que parecen sólidos, valóralos. Pero si un friki te llama mala persona, tóxico, insensible, ególatra, narcisista, o incluso facha, sicario de Putin, otanista o proetarra...haz lo que yo hago cuando me voy a caminar por la mota del Río Segura y el perro de una finca me ladra. Exacto: seguir haciendo lo que hacías sin inmutarte. Aprende a ser indiferente a los exabruptos y críticas irrazonadas (si te divierte puedes responderle con ironía, y seguramente verás que, para él, ser objeto de expresiones menos agresivas que las que te dirige implica acoso, maltrato e insultos atroces). Aprende a creer en ti mismo y en tus decisiones. Renuncia al ignore. Y cuando las paridas de todos esos frikis te resbalen por completo, habrás dado un paso importante para enfrentarte con éxito a tanto hijo de su madre que pulula por la vida real.etiquetas: artículo» noticia original ()

Mar 19, 2025 - 16:12
 0
Menéame como entrenamiento para la vida real

Estos días se está debatiendo largamente sobre la configuración del ignore en Menéame. Algunos proponemos eliminarlo, mientras que otros quieren dejarlo como está y un tercer sector promueve un nuevo régimen para el ignore llamado "shadowben". Con ese nuevo sistema, si yo ignoro a alguien esa persona deja de poder leerme, apareciéndole cajetines grises en el lugar de mis comentarios, que serán totalmente inaccesibles para él. Es decir, que mi ignorador podrá replicarme, tirarme puyas y decir lo que le venga en gana sobre mí sin que yo pueda no ya reportarle, sino simplemente replicarle.

Los defensores de este sistema sostienen que busca prevenir el acoso contra usuarios y aislar a las víctimas del nocivo influjo de los acosadores-perseguidores. Curiosamente, algunos de ellos se pasan la vida leyendo a la gente que tienen en el ignore (incluso a usuarios que, según ellos, les acosan) y respondiéndoles. El surrealismo es tan extremo que uno de ellos se ha creado un script para poder leer a la gente que tiene en el ignore sin sacarles de él. Pero más allá de lo kafkiano de la situación, hay un problema subyacente que trasciende nuestra web y querría comentar.

En la vida real los enfrentamientos cara a cara, son inevitables. Un vecino sin educación que monta fiestas nocturnas, un jeta que se te cuela en la cola del supermercado, un jefe que te quiere imponer horas extras sin cobrar, un alcalde que se niega a arreglar el socavón que hay frente a tu casa...las situaciones son miles. La inmensa mayoría son conflictos sin riesgo de violencia física, pues los payasos que amenazan con ella suelen sentir pánico ante sus consecuencias tanto legales como extralegales. Pero, en cualquier caso, si no quieres que te pisen vas a tener que plantar cara ante bastante gente a lo largo de tu vida. Esto implica tener firmeza de carácter para mantenerte en tu sitio, y madurez para que te resbalen las críticas y desprecios que te lance tu rival, que evidentemente pretende hundirte para que te apartes de su camino.

Si eres incapaz de mantenerte frío ante los improperios que te lanza un friki anónimo desde internet ¿Cómo vas a enfrentarte a un mamón que tienes a dos metros? Evidentemente los insultos constituyen ataques contra el honor prohibidos por el Derecho, y nadie debería tolerarlos. Para reprimirlos están los admin. En mi caso, uno de los dueños de Menéame me llamó reiteradamente hiena, maltratador, acosador, psicópata, miserable, estafador...y aunque me reí mucho al verle tan exaltado, acabé reportándole por lo objetivamente intolerable de la situación. Y los admin actuaron strikeándole. Pero más allá de eso, he recibido múltiples críticas de usuarios cercanos a él y de haters míos.

Tóxico, manipulador, eres lo peor que le ha pasado a esta web, no eres trigo limpio...son frases que me dirigen asiduamente y que jamás me han hecho plantearme recurrir al ignore. Primero porque, cuando me las sueltan en un estado de enrabietamiento, me río abundantemente. Y segundo porque las asumo con naturalidad, en unos casos porque sé que forman parte del peloteo al dueño de la web que me llamaba hiena, y en otros porque, como cantaba Chávez con un sombrero mexicano, "no soy monedita de oro que a la vez le gusta a todos". No gustar a una parte de la gente es parte de la vida, y si se desahogan diciéndotelo, tampoco tiene sentido reprimirles, siempre que no caigan en el insulto. Y, seamos sinceros, si tenemos una autoestima y una fortaleza de espíritu básicas, lo que puedan despotricar contra nosotros desde un nick anónimo debería resbalarnos absolutamente. Si no es así, tenemos un problema, pero Menéame puede ayudarnos.

Entrénate opinando libremente en Menéame. Si rebaten tu postura con argumentos que parecen sólidos, valóralos. Pero si un friki te llama mala persona, tóxico, insensible, ególatra, narcisista, o incluso facha, sicario de Putin, otanista o proetarra...haz lo que yo hago cuando me voy a caminar por la mota del Río Segura y el perro de una finca me ladra. Exacto: seguir haciendo lo que hacías sin inmutarte. Aprende a ser indiferente a los exabruptos y críticas irrazonadas (si te divierte puedes responderle con ironía, y seguramente verás que, para él, ser objeto de expresiones menos agresivas que las que te dirige implica acoso, maltrato e insultos atroces). Aprende a creer en ti mismo y en tus decisiones. Renuncia al ignore. Y cuando las paridas de todos esos frikis te resbalen por completo, habrás dado un paso importante para enfrentarte con éxito a tanto hijo de su madre que pulula por la vida real.

etiquetas: artículo

» noticia original ()