María Valenzuela se bajó de la obra que iba a protagonizar: qué pasó y qué planes tiene ahora

La actriz, que anunció su vuelta al teatro luego de un pico de estrés que la mantuvo varios meses alejada del medio, finalmente no protagonizará la obra La noche de la basura junto a Rodolfo Ranni. En contacto con La Nación, reveló el motivo de su abrupta decisión y anticipó una noticia que le pone alegría a su presente: “Voy a ser abuela”.

Mar 26, 2025 - 17:19
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María Valenzuela se bajó de la obra que iba a protagonizar: qué pasó y qué planes tiene ahora

“Me pasó un camión por encima”, dijo María Valenzuela en el primer episodio del canal de YouTube compartido con su hija (V de Valenzuelas) para explicar los motivos que la impulsaron a abandonar la obra Tom, Dick & Harry en septiembre del año pasado y, acto seguido, internarse en una clínica de rehabilitación.

Luego, en una entrevista exclusiva con LA NACIÓN, llevada a cabo el viernes pasado en Novotel Buenos Aires para anunciar su regreso a la actuación con la obra La noche de la basura, junto a Rodolfo Ranni, la actriz se extendió mucho más. “Tuve un pico de estrés que pudo deberse a varios motivos: a un choque de auto, en el que mi hija Malena y yo resultamos lastimadas; a que luego el seguro me tuvo cinco meses sin abonarme el dinero que me correspondía, y cuando me lo dio eran cinco pesos con veinte centavos y eso no me alcanzaba ni para comprarme una porción de pizza. Y también, por qué negarlo, a estas cosas que están sucediendo en el país. ¿Por ejemplo? ¡Mirá lo que está pasando con los jubilados! Es un puñal directo al corazón verlos marchar en defensa de sus derechos y recibir a cambio pura represión. Es gente que laburó toda su vida para tener una vejez digna y hoy tiene una vejez injusta. ¡Le sacaron hasta los remedios! Te dicen: o como o tomo los remedios. No hay derecho. Hoy pienso en mis viejos, que ya no los tengo; fundamentalmente, en mi papá, que mientras pudo siempre marchó con los jubilados. Tal vez antes todo me chupaba dos ovarios, ahora todo me duele. Ahora que soy más grande y la sensibilidad es mayor, no me miro más el ombligo y me detengo más en ver qué le pasa al otro. En síntesis, eso es lo que me pasó”, aseguró.María Valenzuela se bajó de La noche de la basura

Tras una internación en una clínica de rehabilitación en Ituzaingó (la misma en la que alguna vez estuvo Diego Maradona) y un posterior tratamiento ambulatorio (consistente en terapia psicológica y medicación psiquiátrica), María pretendía dar vuelta la página y volver a trabajar. De hecho, el mismo viernes pasado le dijo a LA NACIÓN: “Ya estoy lista para regresar con todo”. Sin embargo, a dos semanas de comenzados los ensayos y a tres del estreno en el Teatro Metropolitan, la querida actriz no será de la partida en el espectáculo La noche de la basura.

El sábado pasado, luego de una doble jornada de ensayos, le comunicó al productor Giuliano Bacchi que se bajaba del espectáculo. Si bien en un principio se especuló con que su decisión podría deberse a un retroceso en su estado de salud, la actriz disipó las dudas en contacto con este diario. “Había cosas en las que nos teníamos que poner de acuerdo y no nos pusimos, entonces me bajé de la obra”, dio por toda respuesta. Aunque nadie lo confirmó, habría habido un insalvable problema de cartel con su compañero de rubro, también director de la propuesta teatral: Rodolfo Ranni. Lo cierto es que la pieza ya tiene otra coprotagonista y es Graciela Pal. El estreno, pautado originalmente para el martes 15 de abril, se trasladó ahora para el viernes 25 del mismo mes.

Pese a su frustrado regreso a la actuación, hoy María Valenzuela tiene un motivo de alegría que lo compensa todo. “Voy a ser abuela por primera vez”, le confirmó a LA NACIÓN el viernes pasado, en medio de una larga entrevista con pormenores de la obra que iba a protagonizar y que ya no tiene sentido publicar en su totalidad. “¡A esta altura pensé que me iba a morir sin ver un nieto! Pero el más chico de mis tres hijos, Juan, con Florencia, su pareja, me dieron hace poco la noticia de que voy a ser abuela. Voy a ser abuela en pocos meses de una nena que se va a llamar Filipa”, adelantó.María Valenzuela, feliz con su nuevo rol: pronto será abuela

¿Cómo te ves como abuela?

–Totalmente descontracturada, enseñándole todo lo que no le enseñarán los padres. Yo quiero que me diga Babu, porque es un nombre fácil y entonces pienso que lo aprenderá y me lo dirá enseguida. Babu, además, es la versión abreviada de Babushka, que en ruso significa abuela. Yo ya le hablo a la panza de Florencia y le digo: hola, acá está la “Babu”, te estamos esperando, no te atrases, ¿eh? La fecha de su nacimiento está estipulada para el 4 de agosto. Estoy muy feliz por mi hijo y por mí. Por él porque siempre fue muy familiero y sabía que, por eso, moría por tener un hijo. Si me lo permiten seré siempre una abuela muy presente. En cuanto necesiten una mano, allí estaré para Filipa. Quiero verla cada vez que pueda, quiero mimarla y seguir su crecimiento, tirarnos en la alfombra y pintar juntas, jugar a lo que sea y llevarla de paseo. Será como un volver a renacer con los hijos. Estoy seguro que esto me dará mucha vida y ganas de seguir adelante, que es lo que necesito.

Hoy María vive en su casa de Tortuguitas, dentro de un barrio cerrado, junto a su hija Malena. “Se vino a vivir conmigo cuando se separó de su última pareja. Estamos bárbaras porque como la casa es muy grande cada una está en una punta y no invade a la otra. Malena ha sido siempre un gran apoyo para mí. Así como yo lo he hecho en su momento (se refiere a cuando la joven sufrió un ACV en 2003), Malena se cargó la mochila y se hizo cargo de mí en todos estos últimos meses, por lo cual le estoy una vez más súper agradecida. En fin, la convivencia es fantástica, por momento somos amigas, por momentos somos madre e hija y es ahí cuando le pongo los puntos, aunque siempre soy muy permisiva con ella. Porque Malena siempre me puede. Y, por último, por momentos somos colegas porque estamos compartiendo un canal de YouTube, que nos da muchas alegrías. Es la primera vez que hacemos algo juntas y es algo que nos gusta mucho y nos divierte. ¿Qué más podemos pedir?”, sostiene.

En la tranquilidad de ese paraje espera ahora que se concrete un nuevo proyecto laboral que, por fin, posibilite su regreso al trabajo rentado. Su amigo personal, el productor teatral Juan Manuel Caballé, le ha acercado varias obra para leer y juzgar y, en breve, se decidirá por alguna para salir de gira. “Nada ni nadie me va a parar, quiero y necesito salir a trabajar. Hay muchas cuentas que pagar”, confiesa.

En las últimas décadas pasaste por muchos momentos angustiantes: primero tu hija sufrió un ACV, luego perdiste todos tus ahorros en un proyecto inmobiliario y estuviste internada por un cuadro de depresión; más tarde fuiste víctima de mala praxis en un tratamiento odontológico y, por último, acusaste un pico de estrés. ¿Hoy el término resiliente es el que más te identifica?

–Totalmente. Yo soy una resiliente nata. Podía no haber salido nunca de todos estos episodios, pero salí, acá estoy, aquí me tenés. Pero, bueno, parece que siempre la tengo que pasar mal para después sacar las fuerzas de no sé dónde y empezar a pasarla bien, salir adelante y no parar. Como ahora.