Manuel Román, el vigésimo tercer novillero en recibir la alternativa en la plaza de Los Califas de Córdoba
Los Califas no acoge una alternativa desde 2022. Fue hace tres años cuando el último cordobés en hacerse matador, Javier Moreno Lagartijo, asumió su doctorado, de manos de Roca Rey y Alejandro Talavante. Tres temporadas después, la plaza cordobesa vuelve a albergar un nuevo alumbramiento taurómaco, el del novillero cordobés Manuel Román . El futuro toricantano hará redundar para esa circunstancia al diestro peruano en un cartel que encabeza Juan Ortega y donde se van a lidiar reses de Domingo Hernández. Román va camino de ser el protagonista de la que supondría la vigesimotercera alternativa en el ruedo de Ciudad Jardín . Dieciséis días después de que fuera inaugurada, el 9 de mayo de 1965, la nueva plaza de toros de Córdoba , que reemplazó al histórico Coso de Los Tejares, el torero cordobés Agustín Castellano Martínez El Puri (25 de mayo) recibió de manos de Manuel Benítez El Cordobés la primera alternativa en ese ruedo. Lo hizo junto a otro cordobés, Manuel Cano El Pireo, que actuó como testigo. A los dos días, Antonio Sánchez Fuentes también se haría matador de toros de manos de Diego Puerta. Hubo que esperar otros tres años para que el cordobés Fernando Martín Tortosa ejerciera como tercer lidiador en doctorarse, el 19 de marzo. El propio Martín Tortosa actuó como testigo en la alternativa, un año después de Florencio Casado El Hecho (1 junio). Hasta 1976, el coso cordobés sostuvo un vació de alternativas hasta que en mayo de 1976, el sevillano Curro Romero fuera el padrino de Parrita . El también cordobés Fermín Vioque se doctoró en la feria de 1984 de manos de José Cubero Yiyo y con El Soro como testigo. La década de los noventa fue una de las más prósperas del recinto cordobés en cuanto a alternativas se refiere, sumando un total de siete. Juan Serrano Finito de Córdoba , tras un periplo prometedor como novillero, se hizo matador de toros en mayo de 1991, en uno de los acontecimientos del toreo contemporáneo reciente que mayor expectación ha causado. Paco Ojeda y Fernando Cepeda abrieron la puerta al torero que más tardes haría el paseíllo en dicho coso en toda su historia y hasta la fecha. El también prometedor Rafael González Chiquilín , con quién tanto alternaría el de El Arrecife, también copó el tendido de Los Califas para que, de manos de Curro Romero y con Julio Aparicio como testigo saltara al escalafón superior. Cayetano de Julia , en 1995, fue otro de los novilleros de la tierra que decidiría elevar su rango ante las reses, con Rafi Camino como padrino y el propio Chiquilín ejerciendo de testigo. Otro de los máximos exponentes del toreo reciente, José Luis Moreno , con Enrique Ponce de padrino y Finito de testigo, concretaría su propuesta como matador un año después. Tras dos años sin alternativas, por primera vez, se daría una circunstancia sin precedentes, tres doctorados en un mismo ejercicio, un hecho que no ha vuelto a suceder y que promete perdurar. El primero de mayo de 1998 se hizo torero Manuel Romero . Un mes después, Rubén Cano El Pireo (hijo de Manuel) y en septiembre Alejandro Casto . Este último también estuvo presente en la alternativa del 21 de mayo del 2000, donde Rey Vera, de manos de Juan Muriel se hizo torero. Sonado y aclamado fue el insólito hecho que aconteció el primero de junio de 2002, cuando Enrique Reyes Mendoza se hizo matador de toros teniendo como padrino a Manuel Benítez, que actuó junto a Juan Mora (testigo). Dos años después, el cordobés Manuel Martínez , con Ponce de padrino y El Juli le testigo, engrosaría el listado de cordobeses a este respecto. Los locales José Luis Torres y Sergio Sanz se hicieron toreros también el ruedo, el primero en mayo el segundo en septiembre. En 2006, Leonardo Hernández (hijo), se hizo rejoneador con su padre como Padrino antes de que el toreo a pie recuperara el protagonismo toricantano en la feria de 2007, cuando Julio Benítez , hijo del quinto Califa, recibiera su doctorado de manos de Finito de Córdoba y con la presencia de Cayetano. Dos años después, el ecijano Miguel Ángel Delgado , con Talavante de padrino, recibiera también los mismos honores, resultando el único toreo a pie no identificado como de Córdoba en acreditarse en este ruedo.
Los Califas no acoge una alternativa desde 2022. Fue hace tres años cuando el último cordobés en hacerse matador, Javier Moreno Lagartijo, asumió su doctorado, de manos de Roca Rey y Alejandro Talavante. Tres temporadas después, la plaza cordobesa vuelve a albergar un nuevo alumbramiento taurómaco, el del novillero cordobés Manuel Román . El futuro toricantano hará redundar para esa circunstancia al diestro peruano en un cartel que encabeza Juan Ortega y donde se van a lidiar reses de Domingo Hernández. Román va camino de ser el protagonista de la que supondría la vigesimotercera alternativa en el ruedo de Ciudad Jardín . Dieciséis días después de que fuera inaugurada, el 9 de mayo de 1965, la nueva plaza de toros de Córdoba , que reemplazó al histórico Coso de Los Tejares, el torero cordobés Agustín Castellano Martínez El Puri (25 de mayo) recibió de manos de Manuel Benítez El Cordobés la primera alternativa en ese ruedo. Lo hizo junto a otro cordobés, Manuel Cano El Pireo, que actuó como testigo. A los dos días, Antonio Sánchez Fuentes también se haría matador de toros de manos de Diego Puerta. Hubo que esperar otros tres años para que el cordobés Fernando Martín Tortosa ejerciera como tercer lidiador en doctorarse, el 19 de marzo. El propio Martín Tortosa actuó como testigo en la alternativa, un año después de Florencio Casado El Hecho (1 junio). Hasta 1976, el coso cordobés sostuvo un vació de alternativas hasta que en mayo de 1976, el sevillano Curro Romero fuera el padrino de Parrita . El también cordobés Fermín Vioque se doctoró en la feria de 1984 de manos de José Cubero Yiyo y con El Soro como testigo. La década de los noventa fue una de las más prósperas del recinto cordobés en cuanto a alternativas se refiere, sumando un total de siete. Juan Serrano Finito de Córdoba , tras un periplo prometedor como novillero, se hizo matador de toros en mayo de 1991, en uno de los acontecimientos del toreo contemporáneo reciente que mayor expectación ha causado. Paco Ojeda y Fernando Cepeda abrieron la puerta al torero que más tardes haría el paseíllo en dicho coso en toda su historia y hasta la fecha. El también prometedor Rafael González Chiquilín , con quién tanto alternaría el de El Arrecife, también copó el tendido de Los Califas para que, de manos de Curro Romero y con Julio Aparicio como testigo saltara al escalafón superior. Cayetano de Julia , en 1995, fue otro de los novilleros de la tierra que decidiría elevar su rango ante las reses, con Rafi Camino como padrino y el propio Chiquilín ejerciendo de testigo. Otro de los máximos exponentes del toreo reciente, José Luis Moreno , con Enrique Ponce de padrino y Finito de testigo, concretaría su propuesta como matador un año después. Tras dos años sin alternativas, por primera vez, se daría una circunstancia sin precedentes, tres doctorados en un mismo ejercicio, un hecho que no ha vuelto a suceder y que promete perdurar. El primero de mayo de 1998 se hizo torero Manuel Romero . Un mes después, Rubén Cano El Pireo (hijo de Manuel) y en septiembre Alejandro Casto . Este último también estuvo presente en la alternativa del 21 de mayo del 2000, donde Rey Vera, de manos de Juan Muriel se hizo torero. Sonado y aclamado fue el insólito hecho que aconteció el primero de junio de 2002, cuando Enrique Reyes Mendoza se hizo matador de toros teniendo como padrino a Manuel Benítez, que actuó junto a Juan Mora (testigo). Dos años después, el cordobés Manuel Martínez , con Ponce de padrino y El Juli le testigo, engrosaría el listado de cordobeses a este respecto. Los locales José Luis Torres y Sergio Sanz se hicieron toreros también el ruedo, el primero en mayo el segundo en septiembre. En 2006, Leonardo Hernández (hijo), se hizo rejoneador con su padre como Padrino antes de que el toreo a pie recuperara el protagonismo toricantano en la feria de 2007, cuando Julio Benítez , hijo del quinto Califa, recibiera su doctorado de manos de Finito de Córdoba y con la presencia de Cayetano. Dos años después, el ecijano Miguel Ángel Delgado , con Talavante de padrino, recibiera también los mismos honores, resultando el único toreo a pie no identificado como de Córdoba en acreditarse en este ruedo.
