Los tontos del fin del mundo

A pesar de su nombre de explorador –Roald Amundsen–, el barco es un crucero de lujo. Se detiene en Caleta Péndulo, en la lejana Isla Decepción, un lugar de la Antártida con actividad volcánica y aguas termales. Los turistas bajan con sus celulares y empiezan a sacarse fotos en traje de baño, compulsivamente, para subirlas a TikTok o Instagram. “El turismo está creciendo de forma desmesurada. Y este es un ejemplo dramático de un turismo descontrolado y malentendido”, se lamenta al ver llegar al enésimo crucero el biólogo Antonio Quesada, responsable del Comité Polar Español. A principios de siglo la Antártida recibía menos de 20.000 visitantes. El año pasado fue visitada por 125.000. Y casi todos eligen el mismo lugar.Este “efecto TikTok” es el culpable de la contaminación y daño ambiental en la región. Las fotos que nos llegan nos hacen pensar en sujetos ricos, pero con alma de adolescentes vanos y un poco estúpidos. Difundiendo su evangelio de memes hasta los rincones más lejanos del planeta.ßAlgo más...Playas abarrotadas. Fiestas electrónicas entre icebergs. Turistas disfrazados de pingüinos, picando hielo para tomarse unos tragos. Maratones en el hielo e incluso fiestas eróticas. El turismo antártico todavía no está regulado; se habla de cobrar un canon y destinarlo a la preservación del sistema.ß

Mar 8, 2025 - 05:50
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Los tontos  del fin del mundo

A pesar de su nombre de explorador –Roald Amundsen–, el barco es un crucero de lujo. Se detiene en Caleta Péndulo, en la lejana Isla Decepción, un lugar de la Antártida con actividad volcánica y aguas termales. Los turistas bajan con sus celulares y empiezan a sacarse fotos en traje de baño, compulsivamente, para subirlas a TikTok o Instagram.

“El turismo está creciendo de forma desmesurada. Y este es un ejemplo dramático de un turismo descontrolado y malentendido”, se lamenta al ver llegar al enésimo crucero el biólogo Antonio Quesada, responsable del Comité Polar Español. A principios de siglo la Antártida recibía menos de 20.000 visitantes. El año pasado fue visitada por 125.000. Y casi todos eligen el mismo lugar.

Este “efecto TikTok” es el culpable de la contaminación y daño ambiental en la región. Las fotos que nos llegan nos hacen pensar en sujetos ricos, pero con alma de adolescentes vanos y un poco estúpidos. Difundiendo su evangelio de memes hasta los rincones más lejanos del planeta.ß

Algo más...

Playas abarrotadas. Fiestas electrónicas entre icebergs. Turistas disfrazados de pingüinos, picando hielo para tomarse unos tragos. Maratones en el hielo e incluso fiestas eróticas. El turismo antártico todavía no está regulado; se habla de cobrar un canon y destinarlo a la preservación del sistema.ß