Las imágenes suben al cielo de sus altares en Córdoba en cultos llenos de estampas imborrables
La tercera semana de la Cuaresma en Córdoba deja altares de cultos de gran altura con los que las hermandades rinden honores a sus sagrados titulares, y que muestran que no son sólo días de cuenta atrás para la Semana Santa , sino también de disfrute. Ha sido el caso de la hermandad del Huerto , que ha elevado a su titular en un valiente altar de tres niveles, con composiciones piramidales de cera en cada uno de ellos. Sobre el último, encima de una también alta peana, estaba el Señor, iluminado por candeleros y los candelabros del paso de la Virgen del Amparo. Han sido días para disfrutar del Señor entre claveles rojos en el altar mayor de San Francisco y más tarde, este domingo, en el besapiés con que han terminado los cultos en este año de bodas de oro refundacionales. Lo hizo sobre un monte de flores variadas, que recordaba al exorno de su paso procesional en muchas ocasiones. También sorprendió el altar en que se elevó Nuestro Padre Jesús de la Humildad y Paciencia en la iglesia del Santo Ángel. Ha estado rodeado de más de cien piezas de cera, dispuestas de forma piramidal, y vestido con la túnica bordada en oro por Jesús Rosado. A sus pies, iris morados. En la parroquia de Santa María de Guadalupe estaba en besamanos cuaresmal María Santísima en su Soledad , acompañada por el Crucificado de San Damián, San Francisco y Santa Clara. Terminaron en San Andrés los cultos del Señor de las Penas, también muy alto en el altar mayor, y del Cristo de la Buena Muerte , elevado a las alturas góticas de la colegiata de San Hipólito, con una composición de cera también muy vertical. Fue el tercer domingo de la Cuaresma de Córdoba 2025 el del final del quinario conjunto en la Trinidad y el del besapiés del Señor de la Sentencia en San Nicolás y de Jesús Caído en el santuario de la Virgen del Carmen. Celebró las Angustias su fiesta de regla y el Cristo de la Confianza estuvo en besapiés en la parroquia de la Inmaculada Concepción.
La tercera semana de la Cuaresma en Córdoba deja altares de cultos de gran altura con los que las hermandades rinden honores a sus sagrados titulares, y que muestran que no son sólo días de cuenta atrás para la Semana Santa , sino también de disfrute. Ha sido el caso de la hermandad del Huerto , que ha elevado a su titular en un valiente altar de tres niveles, con composiciones piramidales de cera en cada uno de ellos. Sobre el último, encima de una también alta peana, estaba el Señor, iluminado por candeleros y los candelabros del paso de la Virgen del Amparo. Han sido días para disfrutar del Señor entre claveles rojos en el altar mayor de San Francisco y más tarde, este domingo, en el besapiés con que han terminado los cultos en este año de bodas de oro refundacionales. Lo hizo sobre un monte de flores variadas, que recordaba al exorno de su paso procesional en muchas ocasiones. También sorprendió el altar en que se elevó Nuestro Padre Jesús de la Humildad y Paciencia en la iglesia del Santo Ángel. Ha estado rodeado de más de cien piezas de cera, dispuestas de forma piramidal, y vestido con la túnica bordada en oro por Jesús Rosado. A sus pies, iris morados. En la parroquia de Santa María de Guadalupe estaba en besamanos cuaresmal María Santísima en su Soledad , acompañada por el Crucificado de San Damián, San Francisco y Santa Clara. Terminaron en San Andrés los cultos del Señor de las Penas, también muy alto en el altar mayor, y del Cristo de la Buena Muerte , elevado a las alturas góticas de la colegiata de San Hipólito, con una composición de cera también muy vertical. Fue el tercer domingo de la Cuaresma de Córdoba 2025 el del final del quinario conjunto en la Trinidad y el del besapiés del Señor de la Sentencia en San Nicolás y de Jesús Caído en el santuario de la Virgen del Carmen. Celebró las Angustias su fiesta de regla y el Cristo de la Confianza estuvo en besapiés en la parroquia de la Inmaculada Concepción.
