La NASA cambia la nave de SpaceX para que los dos astronautas 'atrapados' en el espacio vuelvan antes a la Tierra
La NASA ha decidido no retrasar más el regreso de Suni Williams y Butch Wilmore, los dos astronautas estadounidenses 'atrapados' en la Estación Espacial Internacional (ISS) desde junio de 2024. La misión Crew-10 que debía relevarlos iba a volar a la plataforma orbital en febrero en una nueva versión de la cápsula Dragon de SpaceX , pero la compañía de Elon Musk no ha logrado tenerla a tiempo y, tras un aplazamiento, la agencia espacial ha optado por sustituirla por la Dragon Endurance, ya utilizada previamente en tres ocasiones de forma rutinaria. El lanzamiento hacia la plataforma orbital se llevará a cabo a partir del 15 de marzo en vez del 25, por lo que Williams y Wilmore podrán volver antes de lo esperado. La pareja de astronautas llegó al laboratorio orbital a bordo de la nave Starliner de Boeing, tres meses antes que sus actuales compañeros de la Crew-9, con el objetivo de pasar alrededor de una semana en la ISS. Pero la nave en pruebas, que volaba con tripulación por primera vez, sufrió problemas técnicos y tuvo que regresar vacía. Williams y Wilmore pasaron a formar parte de la rotación ordinaria de astronautas en la estación, por lo que su regreso ha dependido de la llegada de la Crew-10, formada por las estadounidenses Anne McClain y Nichole Ayers, el ruso Kirill Peskov y el japonés Takuya Onishi. La misión será lanzada en un cohete Falcon 9 desde el Centro Espacial Kennedy de la NASA en Florida (EE.UU.). Esta será la cuarta misión a la estación para esta Dragon, que anteriormente apoyó los vuelos Crew-3, Crew-5 y Crew-7 de la agencia. Antes de regresar, probablemente a mediados o finales de marzo, Williams y Wilmore y sus dos compañeros en la ISS, el estadounidense Nick Hague y el ruso Alexander Gorbunov, convivirán con la tripulación recién llegada para ayudarla a familiarizarse con el trabajo científico y de mantenimiento de la estación, lo que favorece "una transición más segura de las operaciones a bordo del complejo orbital". La decisión de intercambiar las naves se ha producido semanas después de que el presidente Donald Trump utilizara las redes sociales para pedir a Elon Musk que rescatase a los astronautas atrapados, algo que en realidad ya se había decidido en verano. Trump culpó a su predecesor, Joe Biden, de la situación de los astronautas, aunque Biden nunca tuvo ninguna implicación en el programa. Musk recogió el guante del presidente y volvió a culpar a Biden, aunque el fallo técnico era responsabilidad de Boeing. “Los vuelos espaciales tripulados están llenos de desafíos inesperados. Nuestra flexibilidad operativa se ve facilitada por la tremenda asociación entre la NASA y SpaceX y la agilidad que SpaceX sigue demostrando para satisfacer de forma segura las necesidades emergentes de la agencia”, ha afirmado en un comunicado un cordial Steve Stich, director del Programa de tripulación comercial de la NASA. “Nos beneficiamos enormemente de los esfuerzos comerciales de SpaceX y de su enfoque proactivo para tener otra nave espacial lista para que la evaluemos y la usemos en apoyo de la Crew-10”. Según la NASA, el cambio también permitirá a SpaceX completar la construcción interior de la nueva nave espacial y realizar las actividades de integración finales. El intercambio de naves espaciales ha afectado a la misión privada de astronautas Fram2 de SpaceX, que pretendía volar en una Dragon en algún momento de este año para una misión de órbita polar. «Hemos perdido el Polo Sur a la luz del día», ha escrito en X el comandante de la misión, el criptoempresario maltés Chun Wang, con un emoji de cara triste. La misión utilizará otra nave de SpaceX. También podría afectar a la cuarta misión de astronautas privados de Axiom Space a la ISS, prevista en los próximos meses.
La NASA ha decidido no retrasar más el regreso de Suni Williams y Butch Wilmore, los dos astronautas estadounidenses 'atrapados' en la Estación Espacial Internacional (ISS) desde junio de 2024. La misión Crew-10 que debía relevarlos iba a volar a la plataforma orbital en febrero en una nueva versión de la cápsula Dragon de SpaceX , pero la compañía de Elon Musk no ha logrado tenerla a tiempo y, tras un aplazamiento, la agencia espacial ha optado por sustituirla por la Dragon Endurance, ya utilizada previamente en tres ocasiones de forma rutinaria. El lanzamiento hacia la plataforma orbital se llevará a cabo a partir del 15 de marzo en vez del 25, por lo que Williams y Wilmore podrán volver antes de lo esperado. La pareja de astronautas llegó al laboratorio orbital a bordo de la nave Starliner de Boeing, tres meses antes que sus actuales compañeros de la Crew-9, con el objetivo de pasar alrededor de una semana en la ISS. Pero la nave en pruebas, que volaba con tripulación por primera vez, sufrió problemas técnicos y tuvo que regresar vacía. Williams y Wilmore pasaron a formar parte de la rotación ordinaria de astronautas en la estación, por lo que su regreso ha dependido de la llegada de la Crew-10, formada por las estadounidenses Anne McClain y Nichole Ayers, el ruso Kirill Peskov y el japonés Takuya Onishi. La misión será lanzada en un cohete Falcon 9 desde el Centro Espacial Kennedy de la NASA en Florida (EE.UU.). Esta será la cuarta misión a la estación para esta Dragon, que anteriormente apoyó los vuelos Crew-3, Crew-5 y Crew-7 de la agencia. Antes de regresar, probablemente a mediados o finales de marzo, Williams y Wilmore y sus dos compañeros en la ISS, el estadounidense Nick Hague y el ruso Alexander Gorbunov, convivirán con la tripulación recién llegada para ayudarla a familiarizarse con el trabajo científico y de mantenimiento de la estación, lo que favorece "una transición más segura de las operaciones a bordo del complejo orbital". La decisión de intercambiar las naves se ha producido semanas después de que el presidente Donald Trump utilizara las redes sociales para pedir a Elon Musk que rescatase a los astronautas atrapados, algo que en realidad ya se había decidido en verano. Trump culpó a su predecesor, Joe Biden, de la situación de los astronautas, aunque Biden nunca tuvo ninguna implicación en el programa. Musk recogió el guante del presidente y volvió a culpar a Biden, aunque el fallo técnico era responsabilidad de Boeing. “Los vuelos espaciales tripulados están llenos de desafíos inesperados. Nuestra flexibilidad operativa se ve facilitada por la tremenda asociación entre la NASA y SpaceX y la agilidad que SpaceX sigue demostrando para satisfacer de forma segura las necesidades emergentes de la agencia”, ha afirmado en un comunicado un cordial Steve Stich, director del Programa de tripulación comercial de la NASA. “Nos beneficiamos enormemente de los esfuerzos comerciales de SpaceX y de su enfoque proactivo para tener otra nave espacial lista para que la evaluemos y la usemos en apoyo de la Crew-10”. Según la NASA, el cambio también permitirá a SpaceX completar la construcción interior de la nueva nave espacial y realizar las actividades de integración finales. El intercambio de naves espaciales ha afectado a la misión privada de astronautas Fram2 de SpaceX, que pretendía volar en una Dragon en algún momento de este año para una misión de órbita polar. «Hemos perdido el Polo Sur a la luz del día», ha escrito en X el comandante de la misión, el criptoempresario maltés Chun Wang, con un emoji de cara triste. La misión utilizará otra nave de SpaceX. También podría afectar a la cuarta misión de astronautas privados de Axiom Space a la ISS, prevista en los próximos meses.
