Israel da el sí a Trump y anuncia su plan para expulsar a todos los palestinos de Gaza
El plan de Donald Trump para arrebatar Gaza al pueblo palestino parece haber encontrado el aliado perfecto en el estado de Israel, dispuesto a activar los mecanismos para conseguirlo. El ministro de Finanzas del país, el ultranacionalista Bezalel Smotrich, ha anunciado este domingo que el Gobierno que dirige el primer ministro Benjamin Netanyahu está preparándose para expulsar a todos los palestinos de la Franja de Gaza. El Ejecutivo israelí ya no se esconde y admite que están trabajando para satisfacer los deseos del presidente norteamericano. Así lo ha dejado claro Smotrich, el ministro más radical del Gabinete de Netanyahu, en el acto parlamentario Tierra de Israel, donde ha asegurado que el plan de Trump "va tomando forma". Asimismo, ha detallado que están preparando una oficina de "administración migratoria", que supervisará la deportación forzosa de los palestinos de su tierra. Ambos gobiernos, anuncia Smotrich, ya están colaborando para dar forma a esta medida. La Casa Blanca y el Ejecutivo de Israel han entablando contactos para determinar qué países podrían aceptar a los millones de palestinos que viven actualmente en Gaza. El representante israelí ha asegurado, además, que "el presupuesto" de la operación "no representará un obstáculo". Israel facilita el plan de Trump para convertir Gaza en un resort "No se trata de un acontecimiento más, es la antesala de un cambio histórico", ha añadido Smotrich ante el caucus parlamentario, uno de los más destacados de la Knesset, el parlamento unicameral israelí, y abanderado a ultranza de la ocupación permanente de Israel en Gaza, en declaraciones recogidas por el canal parlamentario en su cuenta de la red social X. El plan de Trump, repudiado completamente por Naciones Unidas, la Unión Europea y el mundo árabe y musulmán, contempla la expulsión forzada de la población gazatí para remodelar el enclave palestino y convertirlo en una especie de resort turístico. Esta semana, una cumbre de países árabes, con el respaldo de la UE, ofreció una propuesta alternativa que contempla una inversión aproximada de 50.000 millones de euros para reconstruir la Franja tras meses de bombardeos israelíes y descarta absolutamente la expulsión de la población. Estados Unidos ha rechazado esta iniciativa por "inadecuada" a la realidad del terreno.
El plan de Donald Trump para arrebatar Gaza al pueblo palestino parece haber encontrado el aliado perfecto en el estado de Israel, dispuesto a activar los mecanismos para conseguirlo. El ministro de Finanzas del país, el ultranacionalista Bezalel Smotrich, ha anunciado este domingo que el Gobierno que dirige el primer ministro Benjamin Netanyahu está preparándose para expulsar a todos los palestinos de la Franja de Gaza. El Ejecutivo israelí ya no se esconde y admite que están trabajando para satisfacer los deseos del presidente norteamericano. Así lo ha dejado claro Smotrich, el ministro más radical del Gabinete de Netanyahu, en el acto parlamentario Tierra de Israel, donde ha asegurado que el plan de Trump "va tomando forma". Asimismo, ha detallado que están preparando una oficina de "administración migratoria", que supervisará la deportación forzosa de los palestinos de su tierra. Ambos gobiernos, anuncia Smotrich, ya están colaborando para dar forma a esta medida. La Casa Blanca y el Ejecutivo de Israel han entablando contactos para determinar qué países podrían aceptar a los millones de palestinos que viven actualmente en Gaza. El representante israelí ha asegurado, además, que "el presupuesto" de la operación "no representará un obstáculo". Israel facilita el plan de Trump para convertir Gaza en un resort "No se trata de un acontecimiento más, es la antesala de un cambio histórico", ha añadido Smotrich ante el caucus parlamentario, uno de los más destacados de la Knesset, el parlamento unicameral israelí, y abanderado a ultranza de la ocupación permanente de Israel en Gaza, en declaraciones recogidas por el canal parlamentario en su cuenta de la red social X. El plan de Trump, repudiado completamente por Naciones Unidas, la Unión Europea y el mundo árabe y musulmán, contempla la expulsión forzada de la población gazatí para remodelar el enclave palestino y convertirlo en una especie de resort turístico. Esta semana, una cumbre de países árabes, con el respaldo de la UE, ofreció una propuesta alternativa que contempla una inversión aproximada de 50.000 millones de euros para reconstruir la Franja tras meses de bombardeos israelíes y descarta absolutamente la expulsión de la población. Estados Unidos ha rechazado esta iniciativa por "inadecuada" a la realidad del terreno.
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