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Irene Aldana: cuando entras al octágono sabes que vas a una guerra
La cicatriz en el rostro ya es casi imperceptible, pero ese ligero rastro que aún queda revela la fortaleza de Irene Aldana como peleadora de artes marciales mixtas de la UFC. Es una marca que recorre desde el nacimiento de la cabellera hasta la mitad del tabique nasal de la sinaloense, recordatorio del riesgo y compromiso que está dispuesta a demostrar al entrar al octágono.
La cicatriz en el rostro ya es casi imperceptible, pero ese ligero rastro que aún queda revela la fortaleza de Irene Aldana como peleadora de artes marciales mixtas de la UFC. Es una marca que recorre desde el nacimiento de la cabellera hasta la mitad del tabique nasal de la sinaloense, recordatorio del riesgo y compromiso que está dispuesta a demostrar al entrar al octágono.
