Inversores vuelven a buscar campos ganaderos en la Argentina
La escasez de tierras agrícolas disponibles y el aumento del precio de la carne en dólares llevó a los inversores y productores a buscar zonas con condiciones para la producción ganadera. Cuáles son los campos más buscados y cuánto sale una hectárea

Los inversores locales vuelven a interesarse por los campos ganaderos en el país. Sucede que, por la apreciación de la carne, la actividad ganadera se volvió más rentable y, hoy una hectárea cuesta la mitad -medido en kilos de carne- que lo que valía hace un año atrás.
La venta de campos se reactivó, a su vez, a causa de la estabilidad económica actual de la Argentina, aunque el sector inmobiliario rural todavía espera mayores medidas para concretar las búsquedas de campos en efectivas ventas. Entre ellas, la eliminación del cepo, la vuelta del financiamiento, la reducción o quita de impuestos, entre otros.
"El interés por campos ganaderos estuvo muerto durante los últimos años. Sin embargo, ahora se recuperó en dólares el valor del kilo de novillo para faena, lo que hizo que se empezara a reactivar la actividad", indicó José Bauza, expresidente de la Cámara Argentina de Inmobiliarias Rurales (CAIR).
Sucedió que, como consecuencia de las medidas de estabilización económica que implementó el Gobierno durante el año pasado, los precios de los commodities -en este caso, de la carne- se recuperaron en dólares. Esto hizo que los inversores empezaran a mirar actividades que, antes, no eran tan rentables y a mostrar interés por campos en regiones que no figuraban entre las principales opciones.
De acuerdo con datos de Rosgan, la agrupación del Mercado Ganadero de Rosario que depende de la Bolsa de Cereales de la ciudad santafesina, el precio de la carne vacuna subió 10,6% en febrero. Si bien hasta diciembre del año pasado, el valor de la carne estuvo 52 puntos porcentuales por debajo de la inflación, entre enero y febrero de 2025, ese número quedó sólo a 14 puntos del nivel de IPC.
"La relación carne-dólar hoy es beneficiosa, así como también lo es la relación carne-hectárea ya que el precio de los campos no subió", analizó Bauza.
A su vez, explicó que, a pesar de que los campos se comercializan por un índice conformado por la productividad de la tierra, la ubicación, entre otros factores, "hoy un campo ganadero vale menos kilos de hacienda que antes".
Si bien el precio de la tierra depende de diversos factores, la hectárea en un campo ganadero ronda los u$s 2500.
"Entre las zonas que están captando la atención de los inversores se destacan el sudoeste de Buenos Aires, particularmente en Coronel Suárez y Coronel Pringles, así como también San Luis y, en menor medida, Río Negro", dijo Federico Nordheimer, CEO de Nordheimer Campos y Estancias.
El incremento en la demanda de campos en estas áreas, explicó, tiene que ver, además, con la mayor disponibilidad de tierras, los precios más económicos y la posibilidad de implementar sistemas de riego, un factor indispensable para el sector, que viene de atravesar tres campañas con dificultades climáticas.
"La eficiencia hídrica se convirtió en una prioridad para el sector agropecuario, lo que explica el aumento de consultas sobre estos territorios. La capacidad de adaptación a nuevas condiciones productivas es fundamental para garantizar la rentabilidad a largo plazo", expuso Nordheimer.
Durante los últimos 50 años, la producción ganadera estuvo a la baja. De hecho, según comentaron en el sector, la ganadería perdió, en manos de la agricultura, unos 25 millones de hectáreas. Esto hizo que la actividad agrícola creciera en un 300 por ciento.
No obstante, la actividad empieza a recuperarse. Según datos de Senasa, hasta marzo de 2025, los feedlots registraron un total de 1,7 millones vacunos, lo que representa un incremento del 2,4% respecto al reporte del mes anterior y del 7,2%, si se compara con el mismo mes de 2024. Esta fue la mayor marca para aquel mes en los últimos cuatro años.
Sin embargo, aún restan algunos pedidos por parte del sector. "El contexto económico mostró signos de estabilización, lo que alentó el movimiento del mercado. Sin embargo, persisten desafíos importantes como continuar con el descenso de la inflación, eliminar el cepo, eliminar las retenciones, ausencia de financiamiento y atacar el aspecto impositivo donde la carga es altísima y donde además se superponen impuestos", expuso el último informe de CAIR.