«Hemos conseguido, peleándolo en el Supremo, cinco sentencias para cambiar las reglas del trasvase»

La del trasvase Tajo-Segura es una carrera de fondo que Castilla-La Mancha está empezando a ganar. Al menos así lo ve el presidente regional, Emiliano García-Page, quien presume de que en la Junta «hemos conseguido, peleándolo en el Supremo, cinco sentencias para adaptar las reglas de explotación y que los ríos tengan unos caudales mínimos». Unos fallos judiciales que, pese a que se tienen que «cumplir», ya acumulan «más de un año de retraso». «Hemos tenido que ir a los tribunales y lo seguiremos haciendo», añadió desde Tarancón, donde la Junta celebró el acto institucional del Día Mundial del Agua bajo el lema 'Comprometidos contra el cambio climático'. Cabe recordar que, debido a las incesantes lluvias de las últimas semanas, los embalses de Entrepeñas y Buendía, en la cabecera del Tajo, superan el 50 por ciento de su capacidad al almacenar más de 1.200 hectómetros cúbicos de agua; una situación que no se daba desde 2011, hace 14 años. Lo que pretende la Junta con el cambio en las reglas del trasvase es que precisamente no se deriven 60 hectómetros de agua al Levante cuando en los embalses de la cabecera se superen los 1.300. Asimismo, Page también anunció una nueva depuradora en este municipio conquense y recordó lo aprobado en el Consejo de Gobierno de la presente semana: que 15 localidades se beneficiarán del agua del trasvase al engancharse a la tubería manchega. En cuanto a la nueva depuradora en Tarancón, tendrá capacidad para dar servicio a una población de 25.500 habitantes y un volumen diario de 3.060 metros cúbicos por segundo (la actual es de 2.100). Las obras empezarán a finales de este año y la inversión será de nueve millones de euros. Mientras, de la tubería manchega, «hay un compromiso» para que, antes del verano, de los grifos de unos 150.000 habitantes del Campo de Calatrava, Daimiel y Ciudad Real salga agua «en cantidad y calidad». Por otro lado, el presidente de Castilla-La Mancha se refirió a la expresión 'cambio climático' como «muy suave»; «es mejor crisis climática». «No actuar contra la crisis climática nos va a costar caro. Tenemos que ser claros y tenemos que ir tomando medidas sin fanatismos, pero no podemos estar de brazos cruzados», considera. También dijo que «durante mucho tiempo he tenido que soportar muchas acusaciones de que utilizábamos el agua como arma electoral en Castilla-La Mancha. Hay mucho cinismo y mucha demagogia en torno a la escasez de algunos recursos como el agua. Ni siquiera el agua del trasvase se ha utilizado sólo para lo previsto». Por su parte, la consejera de Desarrollo Sostenible, Mercedes Gómez, expuso que «estamos trabajando en dos nuevas leyes que situarán a Castilla-La Mancha a la vanguardia de la lucha contra el cambio climático: la de Calidad Ambiental y la de Cambio Climático».

Mar 20, 2025 - 20:11
 0
«Hemos conseguido, peleándolo en el Supremo, cinco sentencias para cambiar las reglas del trasvase»
La del trasvase Tajo-Segura es una carrera de fondo que Castilla-La Mancha está empezando a ganar. Al menos así lo ve el presidente regional, Emiliano García-Page, quien presume de que en la Junta «hemos conseguido, peleándolo en el Supremo, cinco sentencias para adaptar las reglas de explotación y que los ríos tengan unos caudales mínimos». Unos fallos judiciales que, pese a que se tienen que «cumplir», ya acumulan «más de un año de retraso». «Hemos tenido que ir a los tribunales y lo seguiremos haciendo», añadió desde Tarancón, donde la Junta celebró el acto institucional del Día Mundial del Agua bajo el lema 'Comprometidos contra el cambio climático'. Cabe recordar que, debido a las incesantes lluvias de las últimas semanas, los embalses de Entrepeñas y Buendía, en la cabecera del Tajo, superan el 50 por ciento de su capacidad al almacenar más de 1.200 hectómetros cúbicos de agua; una situación que no se daba desde 2011, hace 14 años. Lo que pretende la Junta con el cambio en las reglas del trasvase es que precisamente no se deriven 60 hectómetros de agua al Levante cuando en los embalses de la cabecera se superen los 1.300. Asimismo, Page también anunció una nueva depuradora en este municipio conquense y recordó lo aprobado en el Consejo de Gobierno de la presente semana: que 15 localidades se beneficiarán del agua del trasvase al engancharse a la tubería manchega. En cuanto a la nueva depuradora en Tarancón, tendrá capacidad para dar servicio a una población de 25.500 habitantes y un volumen diario de 3.060 metros cúbicos por segundo (la actual es de 2.100). Las obras empezarán a finales de este año y la inversión será de nueve millones de euros. Mientras, de la tubería manchega, «hay un compromiso» para que, antes del verano, de los grifos de unos 150.000 habitantes del Campo de Calatrava, Daimiel y Ciudad Real salga agua «en cantidad y calidad». Por otro lado, el presidente de Castilla-La Mancha se refirió a la expresión 'cambio climático' como «muy suave»; «es mejor crisis climática». «No actuar contra la crisis climática nos va a costar caro. Tenemos que ser claros y tenemos que ir tomando medidas sin fanatismos, pero no podemos estar de brazos cruzados», considera. También dijo que «durante mucho tiempo he tenido que soportar muchas acusaciones de que utilizábamos el agua como arma electoral en Castilla-La Mancha. Hay mucho cinismo y mucha demagogia en torno a la escasez de algunos recursos como el agua. Ni siquiera el agua del trasvase se ha utilizado sólo para lo previsto». Por su parte, la consejera de Desarrollo Sostenible, Mercedes Gómez, expuso que «estamos trabajando en dos nuevas leyes que situarán a Castilla-La Mancha a la vanguardia de la lucha contra el cambio climático: la de Calidad Ambiental y la de Cambio Climático».