Elon Musk tomó una contundente decisión sobre ChatGPT y puso una condición innegociable
El gurú tecnológico renovó la presión sobre OpenAI y generó una dura reacción de parte de Sam Altman. Por qué crece la pelea.

Tras haber ofertado casi 100.000 millones de dólares por OpenAI, la empresa detrás del revolucionario chatbot ChatGPT, el multimillonario Elon Musk anunció que retirará su propuesta siempre y cuando la compañía acepte una condición fundamental.
El hecho es que Musk exige que OpenAI abandone sus planes para convertirse en una empresa comercial y mantenga su estructura sin fines de lucro.
Una propuesta agresiva para "frenar" a los creadores de ChatGPT
La propuesta inicial de u$s 97.400 millones fue vista como un intento audaz y hostil de Musk por adquirir el control sobre la avanzada tecnología emergente de OpenAI.
La respuesta del CEO Sam Altman fue tajante: "No, gracias". Además, bromeó sobre comprar Twitter (ahora X) por una fracción del valor pagado por Musk. Esta reacción refleja no solo un rechazo a la oferta sino también una postura firme contra las maniobras estratégicas del empresario ahora devenido en funcionario de Donald Trump.
De hecho, Altman afirmó que la propuesta de Musk no es real, sino solo un intento por frenar el avance de OpenAI. "Me gustaría que compitiera simplemente creando un producto mejor, pero creo que ha recurrido a muchas otras tácticas", planteó. Y fue más allá, al decir: "No creo que sea una persona feliz. Realmente lo siento por él". Elon Musk quiere quedarse con OpenAI, la empresa creadora de ChatGPT.
Crece la rivalidad entre Elon Musk y Sam Altman
La relación entre Musk y Altman es tensa desde hace años. Ambos fueron cofundadores originales de OpenAI, pero se separaron debido a diferencias internas. Desde entonces, han mantenido enfrentamientos públicos.
Pero no es una rivalidad solo personal. Al obstaculizar los planes comerciales de OpenAI, Musk podría obtener ventajas competitivas significativas su propia empresa, llamada xAI, en el mercado emergente de IA.
A fin de cuentas, mientras Elon Musk presiona con condiciones específicas para influir en el futuro estratégico de OpenAI, Sam Altman parece decidido a mantener firme su posición contra cualquier intento de adquisición hostil o manipulación externa. Este enfrentamiento marca un capítulo crucial en la lucha por definir cómo se desarrollará e implementará esta tecnología revolucionaria en los próximos años.