El significado de la estrella de Mercedes-Benz y sus tres puntas

Mercedes es una de las marcas de automóviles más reconocidas de toda la historia del motor, tanto en coches 'de calle' como en competición, y la unión Mercedes-Benz también es una de las más exitosas de todos los tiempos. Además, el fabricante de Stuttgart tiene uno de los símbolos más reconocibles del mundo del automovilismo, y es que todos los conductores en España son capaces de relacionar a la casa alemana con la mítica estrella de tres puntas.

Este logo está presente tanto en los modelos que Mercedes vende en los concesionarios como en los coches de carreras de la marca, sobre todo en los de Fórmula 1 que pilotan George Russell y Andrea Kimi Antonelli. Eso sí, no son muchos los apasionados que conocen la historia de este símbolo tan icónico y cómo evolucionó a lo largo del tiempo, pero el usuario de TikTok @vroombastic se ha encargado de explicarlo.

La historia de la estrella de Mercedes-Benz

Todo se remonta a finales del siglo XIX, cuando el empresario austríaco Emil Jellinek competía en carreras con coches de DMG (Daimler-Motoren-Gesellschaft) a los que bautizó como a su hija, Mercedes. En 1902 encargó a la casa alemana 36 coches de competición (Mercedes P35) y que los llamase como su primogénita, lo que dio pie al nacimiento de la marca. En un primer momento, el logo era muy simple, pero siete años más tarde se dio el germen de la estrella tan conocida hoy en día.

En 1909, DMG cambió su símbolo a una prístina estrella de tres puntas para simbolizar los tres elementos que querían "dominar con sus vehículos", es decir, "tierra, mar y aire", como se afirma en el vídeo. Eso sí, el logo no estuvo presente mucho tiempo, ya que en 1916 se añadió el círculo con el nombre de la hija alrededor de él y en 1926, con la unión de Mercedes y Benz, se introducen los laureles para simbolizar el triunfo, aunque en el año 1933 se simplificó.

Tras más de medio siglo con ese logo, la estrella pasó a ser de color plata en el año 1989 en honor a las 'flechas plateadas', el apodo con el que se conocía a los coches de carreras de Mercedes-Benz, como con los que Juan Manuel Fangio ganó dos de sus cinco mundiales de Fórmula 1. De hecho, los monoplazas de la casa de Stuttgart en su regreso al 'Gran Circo' en el año 2010 también tuvieron esa tonalidad hasta el año 2020.

Además de ser un símbolo icónico del automovilismo, la estrella de Mercedes-Benz también lleva intrínseca una historia apasionante que se remonta más de un siglo atrás. Por ello, no es de extrañar que se haya convertido en uno de los logos más reconocibles de todo el planeta, tanto en el mundo del motor como fuera de él.