El riesgo de pobreza y exclusión social alcanza el nivel más bajo de la última década en España, aunque sigue sin bajar del 25%

La tasa AROPE, que mide la proporción de población en riesgo de pobreza o exclusión social, marcó en 2024 el nivel más bajo de la última década en España: un 25,8% de los ciudadanos cumplían uno de los tres criterios del indicador (riesgo de pobreza, privación material y social severa, o vivir en un hogar con baja intensidad de empleo), esto es, 0,7 puntos menos que en el año anterior y 4,4 puntos respecto a 2014. Por otro lado, según la Encuesta de Condiciones de Vida (ECV) del Instituto Nacional de Estadística (INE), publicada este jueves, la renta de los hogares aumentó un 6,25%, hasta alcanzar una media de 36.996 euros anuales, aunque todavía hay un 9,1% de la población que asegura que llega a fin de mes con "mucha dificultad".

En general, los tres componentes de la tasa AROPE mejoraron el año pasado. El riesgo de pobreza, por ejemplo, que bajó por primera vez del 20%, hasta el 19,7% (0,5 puntos menos que en 2023). La carencia material y social severa es el indicador que más descendió (0,7 puntos), hasta el 8,3%, aunque no es el mejor dato de su serie histórica. Este mide la incapacidad de los hogares para afrontar ciertos gastos básicos, como mantener la vivienda a una temperatura adecuada, hacer frente a imprevistos económicos o permitirse una comida de calidad al menos cada dos días.

Por su parte, el porcentaje de población con baja intensidad en el empleo —hogares en los que los miembros en edad de trabajar solo consiguen hacerlo por debajo del 20% de su potencial máximo— se situó en un 8% (0,4 puntos menos que el año anterior y la mitad de la cifra de hace una década).

Además, en 2024 (con datos de renta de 2023) había un 1,3% de la población que cumplía con los tres indicadores socioeconómicos de vulnerabilidad, es decir, que estaba a la vez en riesgo de pobreza, sufriendo carencia material y social severa y con baja intensidad en el empleo en su hogar.

Se reduce también la proporción de población con mucha dificultad para llegar a final de mes, hasta el 9,1% (0,2 puntos menos), aunque un 35,8% no tiene capacidad para afrontar gastos imprevistos (frente al 37,1% de 2023) y uno de cada tres no se pudo permitir ir de vacaciones fuera de casa al menos una semana al año (0,3 puntos más).

Sube la pobreza infantil

Sin embargo, mientras la mayoría de indicadores de vulnerabilidad experimentaron cierta mejora respecto a años anteriores, no ocurrió lo mismo con la pobreza infantil entre los menores de 16 años, que creció hasta el 34,7%, esto es, un 0,4% más que el año anterior y el dato más alto de la última década. El INE revela también que en España hay más de medio millón de niños que no pueden comer carne, pollo o pescado cada dos días y el 11,5% sufre carencia material y social severa. Aumenta también la pobreza severa en la infancia, pasando del 13,7% al 14,1% o, dicho de otro modo, hay más de un millón de niños y adolescentes en esa situación de vulnerabilidad.

Unos datos que contrastan con el resto de los grupos de edad, que sí han experimentado un descenso de sus tasas de pobreza, especialmente entre las personas de 65 años y más, en las que se han reducido en 1,4 puntos.

"Es urgente que el Gobierno ponga en marcha medidas más ambiciosas y efectivas con perspectiva de infancia, como por ejemplo una prestación universal para la crianza, incrementar las cuantías del Complemento de Ayuda para la Infancia, con especial atención a los niños mayores de 6 años y desligar el Ingreso Mínimo Vital de este complemento", señala el director de la Plataforma de Infancia, Ricardo Ibarra, en un comunicado.

Tasa AROPE por comunidades

Andalucía (35,6%), Castilla-La Mancha (34,2%) y Extremadura y Región de Murcia (32,4% en ambas) fueron las comunidades con las tasas de riesgo de pobreza o exclusión social más elevadas en 2024.

En el lado contrario, País Vasco (14,8%), Baleares (16,2%) y Navarra (18,3%) presentaron los niveles más bajos.