El 'primo de Zumosol' habla de su dura infancia: "Me puse delante de un tren, quería desaparecer"
Sergio Medialdea da charlas en los colegios y cuenta su historia para dar visibilidad al acoso escolar.

Sergio Medialdea se convirtió en uno de los rostros más conocidos de los años 90 gracias a una famosa campaña publicitaria por la que se le empezó a conocer como 'el primo de Zumosol'. Tres décadas más tarde, regresa a la televisión para visibilizar el bullying contando la dureza de su infancia y adolescencia.
Se convirtió en un símbolo de seguridad y valentía, pero detrás de esa fortaleza se escondía un niño que sufrió acoso escolar por su apariencia física. "Yo no tenía la culpa de medir 1,46 metros con 14 años y llevar gafas de culo de vaso", expresa Sergio Medialdea en Fiesta.
La situación llegó a tal punto que se planteó quitarse la vida. "Llega un momento en el que te lo crees, y piensas que quizá lo mejor es desaparecer", expresa. "Me puse delante de un tren. Yo llevaba la intención de desaparecer", añade en el programa de Emma García, donde explica que el pensar en sus padres fue lo que le hizo que se apartara de las vías del tren.
Él mismo asegura que lo peor que hizo fue no decírselo a nadie. "No lo dije porque en principio yo no quería parecer débil. Nunca hubiera llegado a ser lo fuerte que me crió mi padre, era una decepción para mí", explica 'el primo de Zumosol', que añade que el hecho de no parecer un chivato y lo difícil que le resultaba hablar del tema fueron también aspectos que influyeron en su decisión de no contar nada en el momento en el que lo sufrió.
Pero ahora es él el que anima a las víctimas de acoso a que no se queden callados. "Por favor, todos los niños que están viviendo una situación así, que se lo digan a sus profesores y a sus padres", expresa dirigiéndose a los espectadores. Pero también lanza un mensaje a los colegios: "Aplicad protocolos contra el bullying, porque el bullying se lleva vidas".
Es precisamente en los centros escolares donde Sergio Medialdea ahora se dedica a contar su historia para dar más visibilidad a este problema. "Vamos por los colegios dando charlas y es increíble cuando cuentas tu historia y cinco o seis niños se ponen a llorar", explica.
Sergio asegura que cerró una historia en aquellas vías del tren y se hizo fuerte. Tras esa traumática experiencia, comenzó a entrenar, creció y terminó convirtiéndose en 'el primo de Zumosol' y, aunque asegura que nunca va a olvidar lo que vivió de niño, lanza un último mensaje: "Antes era el niño asustado el que me controlaba a mí, ahora soy el hombre que controla al niño asustado que se quiso quitar la vida".