El oasis japonés para una escapada a solo unas horas de CDMX
Uno piensa que descansar es fácil, pero cuando vives en la CDMX, ese concepto se desdibuja muchísimo. El ruido, el tráfico, las pantallas y el estrés constante hacen que la idea de relajarse se convierta en un mito. Yo no sabía que necesitaba un verdadero respiro hasta que descubrí este oasis japonés a solo dos […]

Uno piensa que descansar es fácil, pero cuando vives en la CDMX, ese concepto se desdibuja muchísimo. El ruido, el tráfico, las pantallas y el estrés constante hacen que la idea de relajarse se convierta en un mito. Yo no sabía que necesitaba un verdadero respiro hasta que descubrí este oasis japonés a solo dos horas de la ciudad. Lo que encontré aquí no solo fue descanso, sino una experiencia completa de desconexión, retiro y renovación.
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Japoneza Retreat, un oasis de calma en medio de Tlaxcala
Ubicado entre paisajes rústicos y con una estética minimalista inspirada en la arquitectura japonesa, este lugar es perfecto para quienes buscan un escape del caos citadino. Desde que llegas, el ambiente te envuelve con una tranquilidad que es difícil de encontrar en el día a día.
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Aquí, el descanso no es solo una opción, sino el corazón de la experiencia. Las habitaciones, con una decoración sencilla pero acogedora, están diseñadas para alejarte de las distracciones tecnológicas. Olvídate de la tele, de la señal del celular y de la prisa. La idea es reconectar contigo mismo, y vaya que lo logran.
Actividades para el descanso del cuerpo y la mente
La experiencia va más allá de solo dormir en un lugar bonito. Hay actividades pensadas para relajar la mente y el cuerpo, como sesiones de meditación guiada, yoga al amanecer y caminatas por los senderos rodeados de naturaleza.
El lugar cuenta con dos casas: Japoneza y Nakamura, cada una con un sincretismo entre la cultura japonesa y mexicana, ofreciendo diferentes amenidades. Japoneza es una cabaña tradicional con cuatro habitaciones completas, cada una con una cómoda cama matrimonial (pero cuando digo cómoda, lo digo en serio), baño, regadera y algunas incluso con tina. También tiene una cocina funcional y una sala perfecta para compartir con seres queridos. Nakamura, en cambio, es más rústica, con cuatro habitaciones privadas sumamente acogedoras y un área común ideal para actividades físicas y de meditación.
Alrededor de Japoneza hay un jacuzzi y múltiples espacios donde puedes sentarte por horas a admirar el paisaje o trabajar. A un lado de Nakamura, hay una doble piscina que combina mundos opuestos: una con agua caliente y otra con agua fría, creando un contraste sensorial que revitaliza el cuerpo.
Entre las actividades que el equipo organizó para nosotros estuvieron banquetes que combinaban cocina mexicana, japonesa y platillos originarios de Tlaxcala. Probamos desde ramen hasta garnachas gourmet, todo preparado por el equipo del staff. También tuvimos una clase privada de defensa personal con un artista marcial capacitado, una cabalgata en las yeguas de la propiedad hacia la laguna cercana y una sesión de numerología.
Este es un lugar sumamente único y romántico, tan especial que incluso Belinda y Nodal lo eligieron para grabar un videoclip hace algunos años. La mejor recomendación es rentar todo el lugar junto e ir con amigos, equipo de trabajo o familia, para disfrutar de un retiro espiritual como nunca antes.
Si estás buscando una escapada de fin de semana que te ayude a reiniciar tu energía, este oasis es una opción perfecta. A tan solo dos horas de la CDMX, el viaje en carretera se vuelve parte de la experiencia: el trayecto rodeado de paisajes naturales es el preámbulo ideal para la tranquilidad que te espera.
No se trata solo de descansar, sino de aprender qué significa realmente desconectarse. Entre la arquitectura, la naturaleza, la comida y las actividades, este lugar es un recordatorio de que a veces, lo único que necesitamos para sentirnos bien es alejarnos un poco de todo. Y sí, definitivamente lo recomiendo.
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