El menor que se precipitó desde una octava planta en Gran Canaria pudo saltar por un caso de acoso
El joven se encuentra hospitalizado en estado crítico tras lo que la Policía investiga como un intento de suicidio.

El menor de 14 años que se precipitó este lunes desde una octava planta en Las Palmas de Gran Canaria se encuentra hospitalizado en estado crítico. La Policía investiga el suceso como un intento de suicidio derivado de un posible caso de acoso, según ha confirmado un portavoz policial.
No obstante, la Jefatura Superior de Policía de Canarias precisa en un comunicado que en las bases de datos que maneja no constan "denuncias previas por acoso escolar (bullying) ni ningún otro tipo de incidencia relacionada" que afecte a ese niño. Por ello, pide prudencia, ya que en este momento "no se puede confirmar ni descartar el motivo que llevó al menor a esa situación".
Los agentes todavía están pendientes de tomar declaración a los padres del niño, que siguen en shock, ha precisado las fuentes. La última información que ha recibido la Policía sobre el estado del niño indica que se encuentra en situación estable en la Unidad de Medicina Intensiva del Hospital Materno Infantil de Las Palmas de Gran Canaria.
Por su parte, el viceconsejero de Educación del Gobierno de Canarias, José Manuel Cabrera, que ha calificado de "triste" lo ocurrido, ha indicado que desde la consejería se ha contactado con la familia del menor. Asimismo, ha añadido en declaraciones a los medios, que desde Inspección Educativa se ha iniciado una investigación al respecto por si existiera "algún problema" relacionado con la convivencia escolar que "pudiera ser el origen de lo acontecido".
El 112 de Canarias dio a conocer en la noche de este lunes los detalles de la asistencia sanitaria, que tuvo lugar sobre las 18.20 hora local (19.20 hora peninsular española) en la calle Diego Betancor Suárez, en el barrio capitalino de La Feria. Un portavoz de la Policía ha relatado que, al parecer, el menor se intentó suicidar en un momento en el que se encontraba solo en casa con su hermana, una niña de 9 años, según las primeras informaciones recabadas por los agentes en el edificio.
El padre había bajado un momento al portal del bloque de viviendas para realizar una gestión, cuando recibió una llamada de alerta de la madre, que también se encontraba fuera, pero había visto a su hija llorando a través de una cámara de seguridad de la casa. En el piso se personaron agentes de la Policía Científica, el grupo de Homicidios y la Unidad de Atención a la Familia y la Mujer, servicio este último que se ha hecho cargo del caso.