El Gobierno descarta que Javier Milei vaya a pedirle a Donald Trump una excepción para la Argentina en la suba de aranceles
En la Casa Rosada insisten en apuntar al Tratado de Libre Comercio y ratifican que no tratarán “casos específicos”; tensión con una empresa local

El Gobierno descartó que Javier Milei vaya a pedirle en su próximo encuentro con Donald Trump una excepción para la Argentina frente al aumento de los aranceles impuesto por los Estados Unidos para las importaciones de aluminio y de acero.
El pedido para que el Gobierno intervenga había surgido del sector empresario tras el anuncio de que los aranceles subirán al 25%.
Pero el Gobierno lo desestimó, según confirmaron a LA NACION altas fuentes oficiales que insisten en enfocar su objetivo en un Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos, una negociación que puede llevar años.
En 2024 las exportaciones argentinas de aluminio y sus manufacturas a Estados Unidos ascendieron a unos US$500 millones y en el caso del acero y sus manufacturas a unos US$100 millones.
Milei emprenderá a primera hora del jueves su viaje a Estados Unidos, el noveno desde que comenzó su gestión como presidente, y en el que se verá por cuarta vez con Trump. Será en el marco de la nueva cumbre de la Conferencia Política de Acción Conservadora (CPAC), en la que el mandatario argentino será el último orador, justo antes de la presentación de su par norteamericano, que tendrá a cargo el cierre del evento.
Por el momento no está confirmada una posible bilateral entre ambos en la Casa Blanca. La tradición norteamericano marca que los mandatarios no mantienen encuentros bilaterales en los primeros meses de gestión, en la sede de Gobierno. Sin embargo, Trump ya rompió otro protocolo en relación con Milei. Fue cuando lo invitó a la asunción presidencial, en enero pasado, en un claro gesto hacia el mandatario argentino. Ese hecho abre algunas expectativas en las filas libertarias sobre lo que puede pasar la semana próxima. Allí también radica buena parte de la expectativa en torno a la agenda.
En el Gobierno toman distancia de las quejas empresarias y descartan una intervención del Estado. “Aluar viene cazando en el zoológico con precios exorbitantes desde hace 40 años y ahora le tocará competir”, aseguró, inconmovible, un alto funcionario de la Casa Rosada. Aluar es una de las dos principales empresas del segmento en la Argentina junto a Tenaris, de
Ambas empresas tuvieron estrategias diferentes. Techint tiene plantas en Estados Unidos y México , mientras que Aluar solo tiene producción en la Argentina y le vende a Estados Unidos el 40% de lo que produce.
El miércoles, tras conocerse la decisión de Trump, lAluar emitió un comunicado en el que dice que las exportaciones de aluminio a Estados Unidos “no representan ninguna amenaza para la seguridad nacional” de ese país y le pidió al Gobierno que use su “excelente vínculo” con el presidente norteamericano para restablecer las condiciones comerciales.
La Argentina se ubica en séptimo lugar entre los países de origen de importaciones de aluminio hacia EEUU, según comentó un analista a la agencia Reuters.
La medida de Trump pretende ayudar a las industrias en dificultades de Estados Unidos, pero también corre el riesgo de desencadenar una guerra comercial en varios frentes. La medida se conoció el domingo y durante una conferencia de prensa el martes, el propio mandatario norteamericano confirmó que Argentina no será una excepción. “Tenemos un pequeño déficit, como con todos”, sostuvo. Antes de firmar el decreto, Trump indicó el domingo en el Air Force One mientras volaba de Florida a Nueva Orleans para asistir al Super Bowl: “Cualquier acero que entre a Estados Unidos tendrá un arancel del 25%”. Cuando se le preguntó sobre el aluminio, respondió que “el aluminio también” estará sujeto a las penalizaciones comerciales.
Este viernes, ante una consulta de LA NACION acerca de si en su visita a Estados Unidos el presidente hará un planteo para tener algún tipo de excepción en la suba de los aranceles al aluminio y aranceles, el vocero Manuel Adorni respondió: “Nuestro objetivo es el tratado de libre comercio y todas las discusiones que se deprendan de allí seguramente incluyan todo tipo de cuestión que haga a que en términos arancelarios o comerciales en generales argentina que de la mejor manera”. “Nada específico se va a hablar en este viaje”, enfatizó.