El calvario de una argentina en Perú: pelea por su vida, tuvo diez cirugías y su familia hace lo imposible para pagarlas
La joven tiene un hematoma subcapsular en su hígado; la complejidad de las operaciones la mantuvo en terapia intensiva en una clínica privada más de un mes y hasta en un coma inducido; los costos son de alrededor de US$40.000

María Belén Flores Passetti es argentina y vive hace dos años en Perú junto a su novio. A principios de enero comenzó a sentir unos fuertes dolores que se convirtieron en el peor calvario: lo que sentía era un hematoma subcapsular en su hígado, acompañado por una hemorragia, que requería un prolongado tratamiento. Belén tuvo diez cirugías y, por un tiempo, debieron someterla a un coma inducido. Después de más de un mes en una clínica privada, ahora su familia afronta el desafío de pagar las costosas operaciones que ascienden a un valor de US$40.000 y, para ello, intentan hasta lo imposible: rifas, colectas, clases brindadas por amigos, y hasta sortear su propio auto.
Todo comenzó el 5 de enero. El dolor de Belén, oriunda de Córdoba, era insoportable e hizo que rápidamente acudiera a Auna, una clínica privada. Una ecografía mostró el hematoma subcapsular, que se genera cuando se acumula sangre debajo de la cápsula de, en este caso, su hígado. En diálogo con el medio local La Voz, su hermana Agustina comentó que, cuando lo detectaron, tenía un tamaño de 800 centímetros cúbicos, pero que creció a gran velocidad. A los pocos días alcanzó el litro y medio.
El tratamiento era urgente. De no hacerlo, el hematoma podía explotar y causar una hemorragia que podía ser fatal para Belén. Eso fue solo el comienzo de un largo y doloroso proceso. En menos de siete días, Belén fue sometida a cinco cirugías y, aun así, no fueron suficientes. El 20 de enero tuvo su sexta cirugía y, desde entonces, tuvo cuatro más.
Por el tamaño del hematoma y las cirugías, los médicos tuvieron que crear un espacio temporal en su abdomen con un dispositivo, que luego debía ser retirado. Esto implicaba 20 días más en la unidad de terapia intensiva. Y además, el proceso implicaba cerrar la pared abdominal después de muchos días abierta, lo cual implicaba un complejo trabajo.
Para esta altura, la familia de Belén ya había publicado una rifa y una clase de mindfullness cuyos ingresos irían directo a pagar los tratamientos. “Les pedimos de corazón que sigan apoyando esta causa adquiriendo rifas, compartiéndola con más personas y continuando con la buena energía para Belu”, escribieron en la cuenta de Instagram que crearon, @todosconbelu.
El 3 de febrero afrontó su penúltima -y novena- cirugía y ocurrió lo peor. Belén estuvo con respirador y en coma inducido, todo mientras realizaban terapia para recuperar su movilidad. Aunque las donaciones ayudaron, debido a la larga estadía, a partir del 7 de febrero su familia debió comenzar a afrontar el 100% de los costos. Todo mientras Belén permanecía internada y la incertidumbre llenaba cada paso del camino.
“En un plazo de 10 días, mi hermana tuvo entre seis y siete operaciones de urgencia para frenar el crecimiento del hematoma, porque si se reventaba, ella se podía desangrar y podía morir”, dijo Agustina al medio local.
Aunque Belén despertó del coma con buenos indicios y se encuentra estable, su familia todavía afronta el malestar económico. Por los altos gastos, crearon un bono de contribución para sortear su propio auto, un Fiat Palio modelo 2017, y reunir los fondos suficientes. La rifa tiene un valor de $30.000.
Se puede colaborar a través de donaciones a la cuenta bancaria a nombre de María Agustina Flores Passetti y José María Godoy, de CBU 0200902911000004325408 y alias BREA.MOJADO.AMOROSOS.