Dedovic lidera a un Insolac Caja 87 crecido en la adversidad (91-98)
A falta de Bertain (con permiso del club por su reciente paternidad) y Bilalovic (lesionado), el Insolac Caja 87 tiró de la fuerza del grupo y otros argumentos de peso para corregirse a tiempo en Logroño, dominar el segundo periodo desde la defensa e imponerse en la prórroga a un rival directo como el Rioverde Clavijo . Dedovic y Franch , para ganar partidos de este tipo ficharon por el club verdirrojo, reunieron entre ambos 45 puntos y el bosnio, además, atrapó 13 rebotes que lo convirtieron en el indiscutible hombre del partido con 35 créditos de valoración. Pudieron ahorrarse los cajistas el sufrimiento del tiempo extra, pero no se amilanaron y se lo llevaron con contundencia. No hubo color entonces. Dedovic anotaba de tres, Franch se fabricaba dos puntos más, Santos dejaba una preciosa bandeja (83-88) y Bulatovic aparecía en el partido colocando un tapón que ensuciaba un ataque riojano y dejaba noqueado al rival. Miladinovic , posteando, y Dedovic (83-92) completaban el trabajo del Insolac Caja 87 , que se agigantó y puso la directa para sumar una victoria de muchísimo valor que lo pone con trece triunfos en la tabla y lo mantiene en la carrera por el play off de ascenso. Un objetivo que tiene prácticamente amarrado a falta de tres jornadas de temporada regular. Tuvo que sudar muchísimo porque el partido tuvo tanto metraje como giros de guion. A un inicio prometedor le siguió una fase de atasco con una defensa agujereada por el Clavijo en el puesto de cinco , donde el juego de pies de un pívot como Sakhniuk causó más daño del seguramente esperado hasta el punto que Eloy Ramírez pronto le cambió a la pareja de baile: Latorre ocupó el sitio de Miladinovic. El sevillano firmó, por cierto, una sensacional canasta a tabla (11-12) con el partido absolutamente equilibrado y ambos equipos huérfanos de puntos exteriores. Sin la capacidad ofensiva de otros días, echar el cerrojo defensivo era clave y el Caja 87, demasiado tierno se mostró en la pintura, concedió ya varias canastas fáciles en el cuarto de apertura (18-14). Serrano, tras asistencia de Herrera, lijaba la diferencia (20-19) al término de los diez primeros minutos. Se avecinaba sufrimiento si no se reparaban las fisuras interiores . Franch asumió galones entonces y Wyatt, al fin, se estrenaba en el partido. Tenía el estadounidense, sin Bertain ni Bilalovic, una excelente oportunidad para reivindicarse, pero volvió a pasar inadvertido. Bastaron dos triples, de Querejeta y Kevin Torre s (31-25), para que Eloy Ramírez llamase a sus hombres a capítulo. A esas alturas, con catorce minutos consumidos, apenas dos triples había intentado el Caja 87, sin acierto. El equipo, al borde del colapso. En ataque, sin ideas, todo lo hacía Franch (el primer triple verdirrojo fue suyo) y en defensa sufría tanto en el perímetro como en las transiciones. Hasta los once se disparó el Clavijo (41-30) tras triple a tabla de Miguel de Pablo. El volumen y la calidad del lanzamiento exterior ya marcaba diferencias mientras el porcentaje de tiro de los sevillanos seguía bajando. Ni desde la línea de personal anotaban. La última canasta riojana, en palmeo tras bandeja fallada con cuatro segundos por jugarse (45-34), retrató por enésima vez a la laxa defensa hispalense . El equipo necesitaba puntos exteriores y tal vez por ello envidó Eloy Ramírez con Wyatt de alero y Dedovic de cuatro en el quinteto inicial del segundo tiempo. Había que tocar teclas porque el engranaje no estaba funcionando. Baoko redujo a diez 'maltratando' el aro riojano (48-38); Dedovic, hasta entonces desapercibido, recortaba a siete con un dos más uno y Baoko, desde la bombilla, a cinco (48-43). El parcial de 0-7 apremió el tiempo muerto de Ricardo Uriz para abortar la reacción cajista. Los sevillanos abrían la escotilla de la esperanza. Su mejoría era real pero aún insuficiente. El rebote seguía siendo un problema y de tres no acertaban. Con esas limitaciones, el Insolac no renunciaba. Ni mucho menos. Iba a más . Rafa Santos ajustaba más el marcador (51-47) en esa persecución a los riojanos en que se había convertido el partido y Dedovic anunciaba la remontada con un triple frontal (51-50), contestado de inmediato por Kevin Torres (54-50). A diferencia de la primera mitad, el Insolac corría gracias a su crecimiento atrás. Se endureció en defensa y así reducía la eficacia riojana. Miladinovic, tras rebote de ataque, completaba la remontada verdirroja con un 2+1 (sin adicional). Dedovic, sin embargo, capturó el rebote ofensivo y este sí hizo pleno desde el 4,60 (56-59) . Esa ventaja, pequeña, era un tesoro de valor incalculable para el Insolac. Entre Querejeta y Kevin Torres devolvieron los mandos del partido al Clavijo (67-62) en el arranque del último segmento. Un momento crítico. Dedovic y Franch se echaron entonces el equipo a la espalda asumiendo las operaciones ofensivas (69-70). El pronóstico, de lo más incierto. Dedovic, on fire , clavaba el quinto triple verdirrojo a 2.15 del final (74-79). Franch, S
A falta de Bertain (con permiso del club por su reciente paternidad) y Bilalovic (lesionado), el Insolac Caja 87 tiró de la fuerza del grupo y otros argumentos de peso para corregirse a tiempo en Logroño, dominar el segundo periodo desde la defensa e imponerse en la prórroga a un rival directo como el Rioverde Clavijo . Dedovic y Franch , para ganar partidos de este tipo ficharon por el club verdirrojo, reunieron entre ambos 45 puntos y el bosnio, además, atrapó 13 rebotes que lo convirtieron en el indiscutible hombre del partido con 35 créditos de valoración. Pudieron ahorrarse los cajistas el sufrimiento del tiempo extra, pero no se amilanaron y se lo llevaron con contundencia. No hubo color entonces. Dedovic anotaba de tres, Franch se fabricaba dos puntos más, Santos dejaba una preciosa bandeja (83-88) y Bulatovic aparecía en el partido colocando un tapón que ensuciaba un ataque riojano y dejaba noqueado al rival. Miladinovic , posteando, y Dedovic (83-92) completaban el trabajo del Insolac Caja 87 , que se agigantó y puso la directa para sumar una victoria de muchísimo valor que lo pone con trece triunfos en la tabla y lo mantiene en la carrera por el play off de ascenso. Un objetivo que tiene prácticamente amarrado a falta de tres jornadas de temporada regular. Tuvo que sudar muchísimo porque el partido tuvo tanto metraje como giros de guion. A un inicio prometedor le siguió una fase de atasco con una defensa agujereada por el Clavijo en el puesto de cinco , donde el juego de pies de un pívot como Sakhniuk causó más daño del seguramente esperado hasta el punto que Eloy Ramírez pronto le cambió a la pareja de baile: Latorre ocupó el sitio de Miladinovic. El sevillano firmó, por cierto, una sensacional canasta a tabla (11-12) con el partido absolutamente equilibrado y ambos equipos huérfanos de puntos exteriores. Sin la capacidad ofensiva de otros días, echar el cerrojo defensivo era clave y el Caja 87, demasiado tierno se mostró en la pintura, concedió ya varias canastas fáciles en el cuarto de apertura (18-14). Serrano, tras asistencia de Herrera, lijaba la diferencia (20-19) al término de los diez primeros minutos. Se avecinaba sufrimiento si no se reparaban las fisuras interiores . Franch asumió galones entonces y Wyatt, al fin, se estrenaba en el partido. Tenía el estadounidense, sin Bertain ni Bilalovic, una excelente oportunidad para reivindicarse, pero volvió a pasar inadvertido. Bastaron dos triples, de Querejeta y Kevin Torre s (31-25), para que Eloy Ramírez llamase a sus hombres a capítulo. A esas alturas, con catorce minutos consumidos, apenas dos triples había intentado el Caja 87, sin acierto. El equipo, al borde del colapso. En ataque, sin ideas, todo lo hacía Franch (el primer triple verdirrojo fue suyo) y en defensa sufría tanto en el perímetro como en las transiciones. Hasta los once se disparó el Clavijo (41-30) tras triple a tabla de Miguel de Pablo. El volumen y la calidad del lanzamiento exterior ya marcaba diferencias mientras el porcentaje de tiro de los sevillanos seguía bajando. Ni desde la línea de personal anotaban. La última canasta riojana, en palmeo tras bandeja fallada con cuatro segundos por jugarse (45-34), retrató por enésima vez a la laxa defensa hispalense . El equipo necesitaba puntos exteriores y tal vez por ello envidó Eloy Ramírez con Wyatt de alero y Dedovic de cuatro en el quinteto inicial del segundo tiempo. Había que tocar teclas porque el engranaje no estaba funcionando. Baoko redujo a diez 'maltratando' el aro riojano (48-38); Dedovic, hasta entonces desapercibido, recortaba a siete con un dos más uno y Baoko, desde la bombilla, a cinco (48-43). El parcial de 0-7 apremió el tiempo muerto de Ricardo Uriz para abortar la reacción cajista. Los sevillanos abrían la escotilla de la esperanza. Su mejoría era real pero aún insuficiente. El rebote seguía siendo un problema y de tres no acertaban. Con esas limitaciones, el Insolac no renunciaba. Ni mucho menos. Iba a más . Rafa Santos ajustaba más el marcador (51-47) en esa persecución a los riojanos en que se había convertido el partido y Dedovic anunciaba la remontada con un triple frontal (51-50), contestado de inmediato por Kevin Torres (54-50). A diferencia de la primera mitad, el Insolac corría gracias a su crecimiento atrás. Se endureció en defensa y así reducía la eficacia riojana. Miladinovic, tras rebote de ataque, completaba la remontada verdirroja con un 2+1 (sin adicional). Dedovic, sin embargo, capturó el rebote ofensivo y este sí hizo pleno desde el 4,60 (56-59) . Esa ventaja, pequeña, era un tesoro de valor incalculable para el Insolac. Entre Querejeta y Kevin Torres devolvieron los mandos del partido al Clavijo (67-62) en el arranque del último segmento. Un momento crítico. Dedovic y Franch se echaron entonces el equipo a la espalda asumiendo las operaciones ofensivas (69-70). El pronóstico, de lo más incierto. Dedovic, on fire , clavaba el quinto triple verdirrojo a 2.15 del final (74-79). Franch, Santos, Herrera, Dedovic y Baoko , protagonistas de un gran trabajo coral, le habían cambiado la cara al equipo con una defensa mucho más seria y un ataque más surtido y diverso. Herrera y Santos pudieron sentenciar en el último minuto en dos tiros aparentemente sencillos, pero sus errores los penalizó Fields con un triple frontal (79-79) que le dejó trece segundos al Caja 87 para armar un ataque ganador que malgastó y envió el choque a esa prórroga que los verdirrojos dominaron con absoluta autoridad.
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