Darío Lopérfido, sobre Vargas Llosa: “Estoy muy agradecido por haber pasado tiempo con un prócer de la literatura”

Desde Madrid, el exministro de Cultura confirmó la continuidad de la cátedra creada por el Nobel; recordó “el horror” del enfrentamiento con intelectuales K en la Feria del Libro y definió al escritor como “un intelectual irrepetible”

Abr 14, 2025 - 17:28
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Darío Lopérfido, sobre Vargas Llosa: “Estoy muy agradecido por haber pasado tiempo con un prócer de la literatura”

Horas después de la muerte del Nobel de Literatura 2010, el escritor Mario Vargas Llosa, la Cátedra Vargas Llosa -creada por el Nobel en 2011 y que dirige el periodista y escritor peruano Raúl Tola- emitió un comunicado. “Desde la Cátedra Vargas Llosa, acompañamos a los familiares, amigos y lectores de Mario Vargas Llosa, nuestro fundador y presidente, en la tristeza tras la noticia de su partida. La literatura del siglo XX no se entiende sin su voz y su obra. Su legado cultural, intelectual y de defensa de la libertad es inconmensurable. La Cátedra tiene la el compromiso y la enorme responsabilidad de cuidarlo y proseguirlo”.

Entre otros objetivos, la Cátedra Vargas Llosa tiene el propósito de fomentar el estudio de la literatura contemporánea, potenciar el interés por la lectura y la escritura, apoyar la nueva creación literaria iberoamericana (mediante concursos con generosos premios, vistos desde la empobrecida Argentina), analizar las ideas del presente y desarrollar modelos de innovación tecnológica para la educación, la investigación y la difusión científica y cultural. También está encargada de difundir la obra del autor de La guerra del fin del mundo.Lopérfido, Vargas Llosa, Nada Chedid Ziade, Álvaro Vargas Llosa y Gerardo Bongiovanni

Un argentino, el exministro de Cultura de la ciudad de Buenos Aires y gestor cultural Darío Lopérfido, integra el Comité de Dirección de la Cátedra como coordinador de contenidos. Y la escritora y periodista Leila Guerriero representa a la Argentina en el Consejo de Honor de la Cátedra.

“Conocí a Mario en Madrid -dice Lopérfido a LA NACION desde Madrid-. Nos presentó Gerardo Bongiovanni en un foro de la Fundación Libertad. Al tiempo, Álvaro Vargas Llosa y Gerardo me convocaron a participar en el directorio de la Cátedra Vargas Llosa. El mismo Mario me presentó en un discurso en Guadalajara. A partir de ahí nos encontramos muy a menudo en actividades de la Cátedra y de la Fundación".Lopérfido y Vargas Llosa, con espada, el día en que el Nobel de Literatura ingresó en la Academia Francesa

Lopérfido, que no viajará Lima, cuenta que el Nobel era “una persona muy cordial y de una cultura infinita; charlar con él era un privilegio porque tenía un conocimiento enorme y una memoria prodigiosa”. Lo define como “un intelectual irrepetible”.

Estoy muy agradecido por haber pasado tiempo con alguien que es un prócer de la literatura -reconoce-. Estar con él en París el día que ingresó a la Academia Francesa es un recuerdo imborrable. Mario era un novelista fuera de lo común y un defensor de la libertad muy consecuente. No le importaban los riesgos si se trataba de enfrentar a autócratas. Su enfrentamiento con la dictadura cubana en 1971 luego del episodio en que se humilló públicamente al poeta Heberto Padilla lo enfrentó al mundo cultural que defendía a Fidel Castro. La combinación de extraordinario escritor con su inclaudicable defensa de la libertad lo convierten en un personaje único".

Vargas Llosa forjó a lo largo de su vida una relación sólida con la Argentina, donde sus libros y su palabra fueron y seguirán siendo muy apreciados. “Sobre la Argentina y sobre América Latina, opinaba siempre que el populismo y los nacionalismos debían ser derrotados por las ideas de la libertad. Era muy crítico del kirchnerismo, del chavismo y de todas las expresiones populistas. También en Cataluña enfrentó al nacionalismo. Defendía la libertad donde lo convocaran. Fue muy consecuente y eso le valió represalias. Recuerdo, con horror, cuando los intelectuales kirchneristas se opusieron a que Mario inaugurara la Feria del Libro cuando ya era Premio Nobel y uno de los escritores más importantes del mundo. No lo consiguieron pero el solo intento fue patético". En 2011, por iniciativa del entonces director de la Biblioteca Nacional, el escritor Horacio González, un grupo de intelectuales simpatizantes del kirchnerismo se opuso a que el Nobel de Literatura diera el discurso inaugural del evento porque Vargas Llosa había opinado que la entonces presidenta Cristina Kirchner era “un desastre total” para la Argentina.

“Su legado intelectual es enorme -dice Lopérfido-. Muchos de sus libros son joyas literarias y denuncias de procesos autoritarios. Conversación en La catedral, La fiesta del Chivo, Tiempos recios son solo algunos ejemplos de eso. Denunciaba a la izquierda o a la derecha cuando se trataba de autocracias“.

Consultado si el Nobel de Literatura 2010 (que fue despedido con palabras de respeto de primeros mandatarios de muchos países del mundo, menos de la Argentina), se sentía más peruano que español o viceversa, dice Lopérfido que no tenía problema con eso. “Era de los dos lugares. También Francia era un lugar al que pertenecía. Su último libro, Le dedico mi silencio, es una historia con el trasfondo de la música peruana”.

La Cátedra Vargas Llosa está en plena actividad. “Ahora mismo se están recibiendo libros para la Bienal Vargas Llosa que tiene un premio de cien mil dólares. La actividad de la Fundación y de la Cátedra seguirán adelante y forman parte su legado literario y político”, concluye Lopérfido. El VI Premio de la Bienal de Novela Mario Vargas Llosa se celebrará por primera vez en España, en la ciudad de Cáceres (Extremadura). Hay tiempo para participar hasta el 15 de mayo. Más información en este enlace.