Carmen Martín Gaite ya tiene su legado en la caja de las letras del Cervantes: una boina con broche, sus obras completas y cartas inéditas
El Instituto homenajea a la escritora salmantina, cuyo centenario se cumple este año

El Instituto Cervantes, un antiguo banco situado en la calle Alcalá de Madrid, destinó el sótano de la cámara acorazada a habilitar otra caja más lírica, llamada de las letras.
Estas cajas dentro de la caja, debidamente numeradas e identificadas, como si fueran un buzón personalísimo, contienen tesoros de escritores relacionados con su obra, inéditos o no, pero muy significativos de quiénes son como creadores, o de quiénes fueron. Hay cerca de 1.800 de las que unas 300 están dotadas de contenido. El resto permanece vacío de momento.
La escritora Carmen Martín Gaite, de quien se celebra su centenario en este 2025, tiene ya la suya, desde este lunes 17 de marzo. Patricia Caprile, vicepresidenta de la Fundación que lleva su nombre y el catedrático de Filología y experto en su obra, José Teruel, han sido los 'escoltas' en esta ceremonia, a la que también ha asistido el director del Cervantes, Luis García Montero.
Junto a ellos, el ex rector de la universidad Autónoma de Madrid y un íntimo amigo del profesor Teruel, el defensor del pueblo, Ángel Gabilondo. Gentes de letras y de pensamiento para honrar a una escritora universal.
Este emotivo acto coincide con la presentación del premio Comillas 2025, que entrega la editorial Tusquets, y que este año ha recaído, por unanimidad del jurado, en el libro de José Teruel Carmen Martín Gaite. Una biografía.
Ha sido el propio Teruel quien ha confirmado el legado de la escritora salmantina, que falleció hace 25 años (julio 2000), dejando una obra de carácter intimista que hoy no ha perdido ni vigencia ni importancia, si acaso, su memoria las ha potenciado.
"El legado consiste en las obras completas de Carmen Martín Gaite, cuyos tres primeros volúmenes fueron destruidos, es decir, que están descatalogados (...) y en la correspondencia con Juan Benet, que no se ha editado más".
También se han depositado fotos inéditas familiares en su casa de El Boalo, Madrid (que su padre, notario, se hizo construir al jubilarse), en una de las cuales sale con su hermana, Ana María (conocida como Anita).
Hay igualmente dos postales manuscritas a su madre y a su padre. Quizás lo más personal sea una boina, un objeto muy significativo de la representación pública de Carmen Martín Gaite, con su correspondiente broche, que permanece inalterable en tantas fotos hechas a la autora, amante de lucirlas en cafés y paseos.
La parte bibliográfica del legado de Martín Gaite pasará a la bilioteca del Cervantes en un plazo no fijado, para que pueda ser consultada por futuros investigadores de su obra.