Zelensky "no reconocerá" las conversaciones entre EE.UU. y Rusia si excluyen a Ucrania

Altos funcionarios estadounidenses y rusos se reunirán el martes en Riad para mantener conversaciones que el Kremlin ha saludado como un paso hacia el restablecimiento pleno de las relaciones bilaterales y el fin de la guerra de Ucrania, pero que Kiev dice que no reconocerá.

Mientras el secretario de Estado estadounidense, Marco Rubio, llegaba a la capital saudita -antes de reunirse con la delegación rusa-, el presidente ucraniano, Volodímir Zelensky, afirmó que Kiev "no participará" en las conversaciones y que "no sabe nada al respecto".

Hablando desde los Emiratos Árabes Unidos, Zelensky añadió: "Ucrania considera que cualquier negociación sobre Ucrania sin Ucrania no tiene ningún resultado, y no podemos reconocer... ningún acuerdo sobre nosotros sin nosotros".

Washington dijo que Rubio estaría acompañado por el asesor de seguridad nacional del presidente Donald Trump, Mike Waltz, y el enviado especial Steve Witkoff. El Kremlin dijo que el ministro de Relaciones Exteriores ruso, Sergei Lavrov, y Yuri Ushakov, asesor de política exterior del presidente Vladímir Putin, encabezarían la delegación de Moscú.

Rusia está enmarcando la reunión como el comienzo de su vuelta del frío tras años de intentos occidentales de aislarla en respuesta a su invasión de Ucrania.

"Los presidentes acordaron dejar atrás este periodo absolutamente ridículo en las relaciones entre Estados Unidos y Rusia, en el que básicamente no se hablaban salvo para cuestiones técnicas y humanitarias aisladas", declaró Lavrov el lunes.

La reunión del martes tiene como objetivo determinar si "los rusos tal vez van en serio y si están en la misma página" para poner fin a la guerra entre Rusia y Ucrania, dijo el Departamento de Estado de EE.UU.

Añadió que las conversaciones eran preliminares y no se esperaba que fueran negociaciones detalladas sobre las condiciones para poner fin a la guerra.

Un vocero dijo que la reunión en el hotel Ritz-Carlton fue "un seguimiento" de la conversación telefónica inicial de la semana pasada entre Putin y Trump "sobre si ese primer paso es posible, cuáles son los intereses, si esto se puede manejar".

Las conversaciones convocadas precipitadamente han alarmado a Ucrania y a sus aliados europeos. EE.UU. no informó con antelación a sus aliados de la llamada de Trump a Putin y los ha dejado en gran medida al margen del proceso.

El presidente turco Recep Tayyip Erdogan, que en el pasado intentó desempeñar un papel de mediador en el conflicto, invitó a Zelensky a visitar Ankara el martes.

Zelensky también tiene previsto reunirse con el enviado de Trump a Ucrania, Keith Kellogg, a finales de esta semana. Kellogg dijo el lunes en Bruselas que sus interacciones con Ucrania y las conversaciones de sus colegas con funcionarios rusos eran "simultáneas" y "sincronizadas". Kellogg dijo que estaría en Kiev para debatir, no para decirle a Ucrania lo que tiene que aceptar.

"No voy a exigir nada. Eso no va a pasar", afirmó. "Las decisiones son [de Zelensky] y nadie se las impondrá a un líder electo de una nación soberana. Él y el pueblo de Ucrania tomarán esa decisión".

El Departamento de Estado dijo que las conversaciones en Arabia Saudita podrían ser precursoras de una reunión entre Trump y Putin.

Rusia desestimó los esfuerzos europeos por hacerse un espacio en las conversaciones de paz y posiblemente enviar un contingente de mantenimiento de la paz a Ucrania.

"Su deseo de formar parte del proceso de negociación de Ucrania ya ha sido satisfecho en más de una ocasión", dijo Lavrov, en referencia al fallido proceso de Minsk, liderado por Francia y Alemania, que negoció un frágil alto el fuego tras la invasión inicial de Rusia en 2014.

Mientras los países europeos quieran reforzar militarmente a Ucrania, "no sé si tienen algo que hacer en la mesa de negociaciones", añadió.

Dmitry Peskov, portavoz del presidente ruso, dijo que era "difícil hablar" de una fuerza de paz europea en Ucrania porque implicaría a miembros de la OTAN y "se desplegarían tropas de la OTAN en territorio ucraniano".

El primer ministro del Reino Unido, Sir Keir Starmer, ofreció poner "botas [británicas] sobre el terreno" de Ucrania, antes de la cumbre en París con otros líderes europeos el lunes.

Funcionarios europeos afirmaron que la cumbre de París se centraría en el posible despliegue de tropas europeas en Ucrania, que se situarían detrás de una futura línea de alto el fuego, no sobre ella, como "fuerza de seguridad". Pero uno de ellos señaló que Alemania, en particular, se mostraba cautelosa ante la idea de fuerzas de mantenimiento de la paz.