Si cobras menos de 35.200 euros, este es el susto que te llevarás en la próxima declaración de la Renta
La declaración de la Renta en España ya tiene día de comienzo confirmado para 2025: comienza el próximo 2 de abril. Y este año, viene con sorpresas para...

La declaración de la Renta en España ya tiene día de comienzo confirmado para 2025: comienza el próximo 2 de abril. Y este año, viene con sorpresas para los contribuyentes que cobren entre 22.000 y 35.200 euros al año, debido a la reducción en las retenciones del IRPF aplicada desde 2023.
Esta medida, que hizo para paliar los denominados "errores del salto", se aprobó en diciembre de 2022, con el objetivo de reducir las retenciones en la nómina de estos contribuyentes, y como resultado, alrededor de 250.000 españoles experimentaron un aumento en su sueldo neto a partir de febrero de 2023, elevándose hasta 1.014,23 euros.
Sin embargo, esta reducción de las retenciones en la nómina tendrá un efecto negativo en la próxima declaración de la Renta para estos contribuyentes: debido a que la empresa ha practicado una retención menor sobre el salario de los trabajadores durante el año pasado, tendrán que hacer un ajuste más significativo para abonar a Hacienda lo que no se ha ingresado durante el ejercicio.
¿Cuánto dinero tendrán que pagar?
Las cantidades que deberán pagar a la Agencia Tributaria se situarán entre los 400 y 900 euros, según explican los expertos del despacho de abogados Temprano López de Sebastián.
Sin embargo, si los rendimientos íntegros de trabajo no superan los 22.000 euros y se ha tenido un único pagador, se está exento de declarar. "Asimismo, si percibes rendimientos íntegros de trabajo por debajo de los 15.000 euros con dos o más pagadores, siempre y cuando los ingresos del segundo y siguientes no superen los 1.500 euros, tampoco tendrás que presentar la declaración", añaden desde el bufete de abogados.
¿Cómo evitar que vuelva a pasar?
Para evitar esta situación en futuras declaraciones, los contribuyentes deben saber que existe la posibilidad de solicitar a su empresa que se les aplique una retención mayor en la nómina, lo que les permitirá repartir mejor el pago del IRPF a lo largo del año y reducir el impacto en la declaración de la Renta.