Nadya Rasheed*: La prohibición categórica de existir: Palestina y su pueblo bajo ataque
El mandato bruto y a todas luces ilógico del sionismo por hacer de Cisjordania, Jerusalén Oriental o la franja de Gaza, en Palestina ocupada, un recuerdo lejano y confuso para todos los habitantes del planeta es también un desprecio que apunta al valor propio del presente en nuestra humanidad. Las evidencias del propósito de siempre para hacer de Palestina una abstracción mundial saltan a la vista, cuando cercados por este actualizado genocidio, los patrones de la limpieza étnica vuelven a repetirse con el robo de 78 por ciento de nuestro territorio en 1948 y con la continuación acentuada del terror en la ocupación desde 1967 a esta parte hasta ahora.
