Máxima Zorreguieta rompió todos los protocolos y bailó bajo la nieve con un grupo de niños
La reina de los Países Bajos visitó escuelas en la localidad de Emmen y sorprendió a todos al sumarse a un número musical al aire libre; además tocó el gong y asistió a clases de canto y DJ

Si algo quedó en evidencia en los casi 12 años que lleva como reina consorte de los Países Bajos es que Máxima Zorreguieta no tiene problema de romper las reglas y actuar de una manera diferente a la que se espera que lo haga una integrante de la realeza. Tiene una personalidad descontracturada y divertida y no duda en salirse del libreto si la situación lo amerita. Así como se tiró en parapente y armó arreglos florales para un evento, supo participar de un taller de cocina y de un curso de bordado. Incluso bailó en las calles de Aruba, fue bartender y hasta alentó a los atletas neerlandeses durante los Juegos Olímpicos de París 2024 como una fanática más y no como la mismísima reina consorte del país.
Esta semana la monarca nacida en la Argentina volvió a desplegar su carisma y sorprendió al bailar bajo la nieve con un grupo de niños. El jueves 13 de febrero Zorreguieta estuvo en la localidad de Emmen, en la provincia de Drente y protagonizó un memorable momento musical que le sacó una sonrisa a todos los presentes.
La madre de las princesas Amalia, Alexia y Ariane visitó las escuelas primarias Sint Fransschool y OBS Emmermeer las cuales ofrecen actividades artísticas extracurriculares apadrinadas por la fundación Más Música en el Aula, de la cual Máxima es presidenta honoraria. La casa Orange-Nassau indicó que dichas instituciones están en el camino de convertirse en escuelas insignia en la provincia de Drente por medio del programa “Más arte y cultura en la escuela y el medio ambiente”.
La reina se interiorizó en las actividades de los alumnos, presenció una clase de danza, otra de canto, asistió a una lección de DJ y se interiorizó en los proyectos e historias de los pequeños estudiantes. Pero, sin duda, el mejor momento del día fue cuando rompió el protocolo y bailó, bajo la nieve, con los niños.
En un video que compartió la cuenta de Instagram especializada Blauw Bloed (EO) se pudo ver el momento en el que la reina Máxima se sumó a la performance que un grupo de niños hizo al aire libre con tachos amarillos y palitos de colores para homenajearla. Zorreguieta no dudó en sumarse y, además de bailar, sujetó uno de los tachos para que una de las niñas pudiera hacer música. Luego se alejó para apreciar el número desde lejos y, entre gritos, aplausos y los copos de nieve que caían, la monarca fue la encargada de cerrar el show: cuando la cuenta regresiva llegó a su fin, tocó el gong.
Tras presenciar todas las clases, mantener reuniones, sacarse varias fotos, disfrutar de los shows y recibir regalos, la monarca de 53 años se dispuso a retirarse, pero lo hizo con mucho estilo. Los niños armaron un pasillo y extendieron las manos para que ella pasara y los saludara. A pura sonrisa y con la simpatía que la caracteriza, se despidió de todos de manera personalizada, y “chocándoles” los cinco con la mano.
Pero, además de llamar la atención por romper el protocolo, tomar clases de música, bailar en la nieve y hasta agacharse en el piso para hablar con los niños, Máxima se robó todas las miradas con su look. Lució una blusa azul oscura de manga larga y cuello alto con unos pantalones wide leg tiro alto a cuadros en azul, blanco, marrón y gris de Natan, su firma de cabecera. Por último, sumó un abrigo largo -una de sus prendas favoritas- de la misma casa de modas, también a cuadros y en la misma gama de colores.
Para darle el toque final al outfit, usó unas botas altas con tacón, guantes negros y una cartera de cuero en azul petróleo con apliques dorados. De joyas optó por unos aretes en plateado y azul y un par de pulseras. Al cabello se lo dejó suelto y peinado hacia el costado con un maquillaje sutil y natural.