Los posicionamientos del móvil delatan al empresario agrícola acusado de matar a un temporero en Jaén
Los posicionamientos telefónicos contradicen la versión que el empresario agrícola ha dado sobre las circunstancias de la desaparición de uno de sus temporeros en Jaén en el año 2021. El trabajo técnico de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil prueba que el teléfono móvil marcó que estaba en unos lugares diferentes de … Continuar leyendo "Los posicionamientos del móvil delatan al empresario agrícola acusado de matar a un temporero en Jaén"

Los posicionamientos telefónicos contradicen la versión que el empresario agrícola ha dado sobre las circunstancias de la desaparición de uno de sus temporeros en Jaén en el año 2021. El trabajo técnico de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil prueba que el teléfono móvil marcó que estaba en unos lugares diferentes de donde asegura haber estado en los momentos críticos de la investigación.
Tras presentar ante el juez del caso las conclusiones de su investigación, éste envió el jueves a prisión provisional al empresario agrícola, ya no acusado de la desaparición del temporero sino de su homicidio. Dado que no se ha encontrado el cuerpo aún, no se le puede investigar por asesinato aunque esa calificación podría cambiar en un futuro.
La Guardia Civil no ha conseguido aún un prueba contundente de la presunta implicación del empresario agrícola en el homicidio de Ibrahima Diouf en el año 2021, pero su informe detalla una cadena de indicios relacionados que tras cuatro años de investigación han posibilitado su detención y presentanción ante el titular del juzgado de Villacarrillo (Jaén).
Pinchazos telefónicos al empresario
Entre esa cadena de indicios se encuentran los pinchazos telefónicos que se han efectuado contra el único sospechoso del caso, que ya fue investigado hace 12 años por la desaparición de otro de sus temporeros en circunstancias similares.
Cuatro años después, la UCO de la Guardia Civil ha detenido al patrón del temporero senegalés desaparecido en extrañas circunstancias en Villacarrillo (Jáen). Ibrahima Diouf, un jornalero senegalés de 33 años, casado y padre de una niña, desapareció sin dejar rastro en enero del año 2021 tras exigir un sueldo digno al patrón agrícola para el que recogía aceitunas.
Los investigadores detuvieron a principios de semana al patrón Ginés Vicente tras cuatro años de trabajo y registraron su finca y varios domicilios en Jaén. Un amigo del temporero denunció a la Guardia Civil que el hombre desapareció en extrañas circunstancias. El trabajador había anunciado a sus compañeros que iba a dejar su empleo en la finca para trasladarse a Cartaya (Huelva). La última persona que estuvo con él en la casa compartida por los jornaleros fue su jefe, Ginés Vicente.
Tras cuatro años de investigación, la UCO de la Guardia Civil da por terminada la investigación falta conocer si será suficiente para que se materialice en una acusación contra el investigado. De momento, su abogado va recurrir su ingresión en prisión provisional.