Los bonos argentinos vuelven a caer: qué advertencia hace el mercado en plena volatilidad extrema
El mercado de deuda local acompaña la tendencia de Wall Street. Es evidente que las variables globales impactan sobre la renta fija argentina. ¿Qué rol cumple el factor del FMI?

El mercado de deuda local acompaña la tendencia de Wall Street.
Los bonos soberanos argentinos vuelven a iniciar la jornada a la baja y dejan en claro que las variables globales impactan sobre la renta fija argentina, aunque el factor del Fondo Monetario Internacional (FMI) también resulta una variable clave de corto plazo.
Nueva jornada bajista
Hoy el Global 2029 baja 1,1% y el Global 2030 retrocede 1,4%.
En el tramo medio de la curva, los títulos a 2035 y 2038 muestran mermas de 1,8% y 1,6% respectivamente, mientras que los Globales a 2041 y 2046 evidencian bajas de 1,75% en promedio.
Ayer, tras los anuncios de una prórroga para los aranceles, se vio un rally en los bonos y el riesgo país volvió a ubicarse debajo de los 1000 puntos, y arranca este jueves en 889 puntos.
En el acumulado del último mes, los bonos del tramo corto recortan hasta 3%, mientras que la deuda de mayor plazo exhibe pérdidas de 8,5% en promedio.
Tras el rally de ayer, el riesgo país volvió a ubicarse debajo de los 1000 puntos, y arranca el jueves en 889 puntos.
Las acciones también caen, con Globant marcando su mayor retroceso entre los ADR, perdiendo 7,1%.
Le sigue Vista Oil, con una merma de 6% e IRSA que baja 5,5%.
Otros papeles como Telecom, Edenor, Galicia, YPF, Cresud, Loma Negra, Bioceres, Central Puerto, Mercado Libre y Corporación América operan con bajas de entre 2% y 4,5%.
El S&P Merval baja 3% a u$s 1454 y acumula una caida del 18% en el último mes.
Acompañando a Wall Street
El mercado de bonos local se sigue moviendo a la par del escenario global. Las debilidades en la deuda argentina tienen su correlato con las pérdidas que muestran las acciones en Wall Street en la mañana de hoy.
El Dow Jones baja 1,39%, mientras que el S&P500 retrocede 1,8%. En el caso del Nasdaq, el índice cae 2,7%.
Las pérdidas en Wall Street se dan luego de una impresionante reversión en el día de ayer que dejó al mercado con ganancias de 10% en promedio en los índices, siendo el tercer mejor día en la historia del mercado americano.
Dicho rally se dio tras la pausa por 90 días anunciado ayer por Trump en el aumento de tarifas a las importaciones.
Lo que queda en evidencia es que los bonos argentinos se mueven a la par del contexto global, y que si bien los factores domésticos son claves, la tensión y volatilidad externa afecta la dinámica de la renta fija argentina.
El escenario global afecta a la Argentina dado que la volatilidad internacional hace que los inversores eviten ampliar posiciones en activos de riesgo, tales como los instrumentos locales.
Lisandro Meroi, Research Analyst de TSA Bursátil, indicó que la incertidumbre proviene del lado externo e interno.
"A partir de la tensión comercial entre EEUU y el resto del mundo, es presumiblemente haya una desaceleración en el crecimiento económico. Ante la incertidumbre el mercado debería inclinarse por "activos refugio" y posponer inversiones en títulos de alto rendimiento. Si los temores de una recesión global no se materializan y los drivers locales acompañan, un escenario de menores tasas internacionales podría beneficiar las cotizaciones de la deuda argentina", afirmó.
Pilar Tavella, Directora de Research Macro & Estrategia en Balanz, señala que el factor global afecta a emergentes en general y a países como la Argentina en particular.
"Más allá de la presión a la baja en el DXY (índice dólar) y en las tasas de los bonos del Tesoro de EEUU, el contexto internacional se complejiza lo cual repercute especialmente en países emergentes de alto rendimiento. Un ambiente de mayor aversión al riesgo no es una buena noticia para Argentina, que necesita recuperar eventualmente el acceso al mercado", dijo.
Por otro lado, en lo local, Tavella agregó que si bien la dinámica del dólar y las tasas puede aliviar parcialmente el impacto, aun así, los riesgos son asimétricos a la baja dado el riesgo de recesión en EEUU y una desaceleración de la economía mundial.
Atentos al FMI
Entre las variables locales, el mercado sigue atento a lo que pueda ocurrir con relación al acuerdo con el FMI. Según trascendidos, el Directorio del organismo aprobaría este viernes un programa de facilidades extendidas por u$s 20.000 millones, que implicaría un desembolso inicial de entre u$s 12.000 y u$s 15.000 millones.
El monto restante sería desembolsado en cuotas y el acuerdo incluiría un período de gracia de cuatro años y medio.
Si el desembolso fuese del monto mencionado, sería por cerca del 60% del programa total y sería algo histórico dentro de los programas del Fondo.
Según explicó Adrián Yarde Buller, economista jefe de Facimex Valores, de los 61 Programas de Facilidades Extendidas (EFF, por sus siglas en inglés) que se acordaron en este siglo, solo hubo 2 en los que el primer desembolso fue idéntico al monto anunciado del programa.
Estos fueron el de Liberia en marzo de 2008 por u$s 561 millones y el de Somalia en marzo de 2020 por u$s 54 millones.
"Es interesante notar que estos dos acuerdos se alcanzaron en años marcados por crisis globales como la Sub-prime y el Covid-19. Entre los 59 EFF restantes, el desembolso inicial fue, en promedio, del 15% del monto anunciado del programa; mientras que el desembolso inicial más alto (32%) equivale a la mitad de lo que recibiría Argentina", dijo Yarde Buller.
Como parte del programa, Argentina se comprometería a flexibilizar el régimen cambiario, adoptando un esquema de flotación administrada (discrecional o bandas cambiarias).
De esta manera, el tipo de cambio podría responder a desbalances entre oferta y demanda, mientras que las intervenciones oficiales tendrían como objetivo evitar saltos abruptos que pongan en riesgo el proceso de estabilización y desinflación o una apreciación excesiva que afecte la competitividad local.
Asimismo, se eliminaría el esquema de dólar blend, lo que implicaría que el total de las exportaciones sea liquidado en el MULC.
Los analistas de Delphos Investments afirmaron que estos avances llevan a especular también a que se habilitaría un mayor acceso al mercado oficial de cambios para importadores, consumidores (dólar tarjeta) y/o ahorristas, con el fin de evitar desbalances en el mercado cambiario libre que pudieran generar una ampliación de la brecha.
"De confirmarse, se trataría de una noticia positiva para Argentina, tanto por el contexto internacional -que ha derivado en un aumento sustancial del riesgo país, alejándolo del acceso a los mercados- como por el escenario local, marcado por una caída constante en las reservas internacionales durante el último mes", indicaron.
Uno de los factores que más inquietud genera actualmente en el mercado y entre los operadores comerciales es la incertidumbre en torno al tipo de cambio.
Desde Delphos Investments consideran que, una vez definido el nuevo esquema cambiario, podrían reanudarse las liquidaciones y desacelerarse el drenaje de reservas provocado por el anticipo de importaciones.
"Una mayor estabilidad derivada de una mayor certidumbre podría contribuir a reducir la brecha cambiaria. Esto último es clave, ya que la reducción de la inflación constituye uno de los principales activos del gobierno de cara a las elecciones legislativas. Además, un mayor colchón de reservas permitiría capitalizar al BCRA y dotarlo de mayor liquidez, lo que facilitaría el cumplimiento de los próximos vencimientos de deuda y habilitaría una progresiva flexibilización del cepo cambiario"; dijeron.
Finalmente, y mirando a mediano plazo desde la consultora entienden que todo esto podría acelerar el proceso de mejora en la calificación crediticia del soberano argentino y derivaría en una reducción del riesgo país.
"De concretarse, este escenario nos acercaría nuevamente al acceso a los mercados internacionales de deuda, facilitando un círculo virtuoso donde el roll-over de vencimientos evitaría la utilización de reservas para pagos de deuda y contribuiría a sostener la solidez del balance del Banco Central", remarcaron dese Delphos.
Selloff de los bonos
Tomando desde los máximos alcanzados en enero, el Global 2029 baja 6,5% y el Global 2030 pierde 6,7%. En el tramo medio, el Global 2035 retrocede 14% y el Global 2038 baja 14,5%. Finalmente, los bonos más largos como el Global 2041 y el Global 2046 muestran caídas de 15% en promedio.
El acuerdo del FMI podría servir como escudo para que la volatilidad global impacte menos sobre la deuda local.
Sin embargo, los analistas entienden que resulta difícil evitar dicho contexto y que la tensión en la deuda podría persistir.
Juan Manuel Franco, economista jefe de Grupo SBS, advierte que el escenario global plantea un desafío para los activos locales.
"La volatilidad a la que vienen sujetos los mercados internacionales por la política comercial de EEUU, algo exacerbado en los primeros días de abril. Esta volatilidad, así como sus consecuencias sobre tasas de interés de los bonos del tesoro americano, los precios de commodities, las monedas emergentes y riesgos geopolíticos deberán ponerse sobre la mesa a la hora de pensar en una estrategia de inversión adecuada para cada perfil", advirtió.
Además, agregó que "de escalar la volatilidad, créditos emergentes High Yield podrían ver presionados sus spreads, haciendo necesarias medidas más ambiciosas de policía económica para reducir la prima de Riesgo País de Argentina, por lo que es sumamente relevante la consideración de los riesgos exógenos en las inversiones, para todos los tipos de perfil".
Pablo Lazzati, CEO de Insider Finance, agregó que la falta de señales sobre una posible estabilización o una eventual negociación en tarifas internacionales añade aún más incertidumbre.
En cuanto al impacto local Lazzati agregó que, al igual que en el resto de los Mercados Emergentes, este cimbronazo se hará sentir con posible alza en el Riesgo País, aletargando un poco más la estrategia de Caputo y equipo que incluía estabilizar la macro, bajar inflación, liberar cepo y a principios de 2026 volver al mercado de deuda internacional habiendo bajado el Riesgo País al nivel aprox de 300 a 400pbs.
Joaquín Álvarez, CEO de IMSA Alyc, entiende que de la volatilidad global existe una parte que positiva para el país y otro más bien negativo
"El hecho de tener un dólar más débil y tasas de interés yendo a la baja definitivamente impactan positivamente en la deuda porque disminuyen el costo del financiamiento. Pero por otro lado, estamos viendo que el apetito de riesgo de los inversores disminuye con estos miedos de recesión mundial", resaltó.
De esta manera, Álvarez advierte que el timing al cual se saldrá nuevamente al mercado es muy importante.
"En un contexto recesivo, el escenario como el actual no es positivo. Sin embargo, si el panorama en lo económico a nivel mundial fuera más claro, definitivamente sería muy positivo para Argentina. De esta manera, habrá que ir monitoreando el timing al cual se sale el mercado, el cual será una variable clave", detalló.
Finalmente, Rodrigo Benítez, economista jefe de MegaQM, alertó que la dinámica del petróleo resulta clave para la Argentina en medio de esta crisis.
"La economía argentina pasó de ser importadora neta de combustibles y energía a ser exportadora neta, por lo tanto, la caída en el precio afecta al volumen de sus exportaciones. Pero más importante que ese proceso es el impacto que tiene sobre las decisiones de inversión en el corto plazo. Que caiga el precio del petróleo es una noticia negativa que desalienta ese proceso de inversión", alertó.