La profecía del «fin del mundo» ha comenzado: Baba Vanga ya predijo el terremoto de Birmania

Baba Vanga, conocida como la «Nostradamus de los Balcanes», es una figura conocida en todo el mundo debido a sus supuestas habilidades proféticas. Nacida en 1911 en lo que hoy es Macedonia del Norte, perdió la vista a los 12 años y, según los relatos, desarrolló una capacidad para prever eventos futuros. A lo largo de su vida, se le atribuyen predicciones que, según sus seguidores, se han cumplido con suma precisión, como la desintegración de la Unión Soviética, los ataques del 11 de septiembre de 2001 y el desastre nuclear de Chernóbil.

Estas afirmaciones han generado tanto fascinación como escepticismo en la comunidad internacional.​ Recientemente, el 28 de marzo de 2025, un terremoto de magnitud 7,7 sacudió Myanmar y algunas zonas de Tailandia y China, resultando en miles de víctimas y daños significativos. Este evento ha llevado a muchos a recordar las predicciones de Baba Vanga, quien supuestamente había anticipado «terremotos devastadores» para este año, los cuales marcarían «el principio del fin del mundo» .​

‘El principio del fin del mundo’ según Baba Vanga

Sus predicciones para este año abarcan diversos ámbitos, desde desastres naturales hasta avances científicos, y aunque muchas de sus visiones son ambiguas, algunos eventos recientes parecen coincidir con sus advertencias, lo que ha reavivado el interés por sus supuestas habilidades sobrenaturales.

Una de las principales predicciones atribuidas a Baba Vanga para este año tiene que ver con el cambio climático. Según los intérpretes de sus visiones, la clarividente advirtió sobre condiciones climáticas extremas que afectarían a distintas partes del planeta. En lo que va del año, se han registrado fenómenos naturales de gran magnitud, como olas de calor inusuales, incendios forestales descontrolados y lluvias torrenciales que han provocado inundaciones masivas. .

Además, otra predicción relevante tiene que ver con los avances tecnológicos, especialmente en inteligencia artificial y biotecnología. Durante los primeros meses de 2025, se han anunciado innovaciones importantes, como nuevos tratamientos médicos basados en edición genética y el desarrollo de inteligencias artificiales capaces de diagnosticar enfermedades con mayor precisión que los médicos humanos. Estas transformaciones no sólo están cambiando la medicina, sino que también plantean interrogantes éticos sobre los límites del progreso científico, algo que, según sus seguidores, Vanga ya había anticipado.

En el ámbito geopolítico, la vidente también habría predicho un aumento de conflictos globales, especialmente aquellos relacionados con la competencia por recursos naturales. En este sentido, se han observado tensiones entre varias potencias mundiales debido a la disputa por fuentes de agua y energía, especialmente en regiones como Asia Central y África. Aunque estos conflictos no son nuevos, su intensificación este año da lugar a interpretaciones que buscan vincularlos con las visiones de la profetisa.

Por otro lado, Baba Vanga también predijo «terremotos devastadores», y muchos creen que el sismo de magnitud 7,7 que sacudió Birmania el pasado 28 de marzo sería una prueba de ello. Este terremoto, uno de los más destructivos de los últimos años, también ha afectado a China y Tailandia. Para sus seguidores, esta tragedia confirma su vaticinio y marca el inicio de una serie de eventos críticos que podrían alterar el rumbo del planeta.

A pesar de estos supuestos aciertos, muchas de las profecías de Baba Vanga son vistas con escepticismo. Su vaguedad y la manera poco rigurosa en la que se recopilaron (basadas mayormente en testimonios de familiares y seguidores) hacen que se cuestione su autenticidad. Sus mensajes se pueden adaptar a múltiples contextos históricos, lo que alimenta tanto la fascinación como la duda en torno a su figura.

Eventos futuros

Baba Vanga dejó una lista de predicciones sobre cómo terminaría la humanidad:

• 2028: en respuesta a la creciente demanda energética, la humanidad emprendería la exploración de Venus para encontrar nuevas fuentes de energía. Esta afirmación resulta difícil de creer, dado que las condiciones del planeta lo hacen prácticamente inaccesible: temperaturas extremas y una atmósfera corrosiva han destruido todas las sondas enviadas hasta ahora en poco tiempo.
• 2033: el impacto del cambio climático se intensificaría drásticamente. Se pronostica el derretimiento completo de los polos y una elevación significativa del nivel del mar, lo que afectaría gravemente a las regiones costeras y a millones de personas en todo el mundo.
• 2076: el comunismo resurgirá con fuerza y se convertirá en el sistema dominante en todo el planeta, lo que recuerda más a una sátira geopolítica que a una profecía seria.
• 2130: la humanidad, supuestamente, hará contacto con vida extraterrestre. Las consecuencias de este encuentro son totalmente desconocidas, pero se plantea como un punto de inflexión.
• 2170: el planeta enfrentará una sequía global de gran magnitud, agravando aún más los efectos del calentamiento global.
• 3005: Marte ya estaría habitado y se habría desarrollado una civilización marciana que, en este punto, entraría en conflicto con la Tierra en una guerra interplanetaria.
• 3797: la Tierra dejaría de ser habitable. Los humanos se verían obligados a migrar hacia otros rincones del universo en busca de un nuevo hogar.
• 5079: el universo (o al menos la civilización humana tal como la conocemos) llega a su fin. ¿Cómo? Nadie lo sabe.