La inspectora que detectó el fraude del novio de Ayuso ratifica que defraudó 350.000 euros

La jefa de inspectores del equipo de delitos fiscales de Madrid, Mercedes Urbano López, ha ratificado este viernes ante los juzgados de Plaza de Castilla su informe sobre el novio de Isabel Díaz Ayuso, Alberto González Amador, en el que certifica que creó facturas falsas para eludir el pago de impuestos y defraudar hast a350.910 euros a Hacienda, según ha informado El País. La inspectora también ha subrayado que la imputación de esos gastos tenía una clara intención de reducir la cantidad a deber. Urbano ha declarado ante la jueza María Inmaculada Iglesias, titular del Juzgado de Instrucción número 19 de Madrid, con el objetivo de esclarecer algunas líneas sobre el informe que firmó acerca de los indicios de fraude fiscal de González Amador, imputado por delitos contra la Hacienda Pública y otro de falsedad documental. Ese documento demuestra la existencia de hasta 15 facturas falsas por valor de 1,7 millones de euros, de las que la pareja de la presidenta de la Comunidad de Madrid se valió para deducirse gastos que en realidad no existían. El informe señala, además, que González Amador tuvo una "conducta defraudatoria". Para poder demostrar un delito de fraude fiscal son clave dos cosas: que la cuantía defraudada supere los 120.000 euros y que se haya actuado con dolo o voluntad de delinquir. La investigación tributaria, dirigida por Urbano y basada en la denuncia de la Fiscalía de delitos económicos contra el novio de la mandataria 'popular', pone de manifiesto que la consultora de sellos de calidad de González Amador, Maxwell Cremona, registró entre 2020 y 2021 un aumento de sus ingresos gracias a la "intermediación en una operación de venta de material sanitario con dos millones de euros en comisiones, y, en 2021, por la percepción de unos ingresos cuantiosos de 1,3 millones, facturados a su principal cliente desde hace años, Quirón Prevención, con ánimo de minorar su tributación debida". Facturas amañadas con dolo Para conseguirlo, el empresario amañó facturas. En una de ellas falseó un gasto de 620.000 euros con una empresa mexicana para deducir menos impuestos, y desde Maxwell Cremona se admitió que el pagó se anuló y nunca se abonó. Otra factura ascendía casi al millón de euros por la presunta venta de vacunas a la sociedad de Costa de Marfil GAYANI LTD para las autoridades del país africano, que tampoco se ejecutó y tampoco se pagó, salvo en la cantidad de 27.000 euros. La empresa de González Amador contabilizó el gasto cuando ya sabía que la operación de venta no iba a existir. A su vez, el informe analiza otras 13 facturas sospechosas que suman hasta 178.000 euros, que "de forma improcedente se dedujo fiscalmente" González Amador como gasto. Como consecuencia, según el documento, el empresario dejó pagar al Fisco "cuotas impositivas por encima de 120.000 euros", lo que supera el mínimo sancionable en el Código Penal. El informe tambien explica que González Amador intentó enmendar su fraude en la declaración del año siguiente, un movimiento de todo punto ilegal...

Mar 21, 2025 - 18:39
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La inspectora que detectó el fraude del novio de Ayuso ratifica que defraudó 350.000 euros
La jefa de inspectores del equipo de delitos fiscales de Madrid, Mercedes Urbano López, ha ratificado este viernes ante los juzgados de Plaza de Castilla su informe sobre el novio de Isabel Díaz Ayuso, Alberto González Amador, en el que certifica que creó facturas falsas para eludir el pago de impuestos y defraudar hast a350.910 euros a Hacienda, según ha informado El País. La inspectora también ha subrayado que la imputación de esos gastos tenía una clara intención de reducir la cantidad a deber. Urbano ha declarado ante la jueza María Inmaculada Iglesias, titular del Juzgado de Instrucción número 19 de Madrid, con el objetivo de esclarecer algunas líneas sobre el informe que firmó acerca de los indicios de fraude fiscal de González Amador, imputado por delitos contra la Hacienda Pública y otro de falsedad documental. Ese documento demuestra la existencia de hasta 15 facturas falsas por valor de 1,7 millones de euros, de las que la pareja de la presidenta de la Comunidad de Madrid se valió para deducirse gastos que en realidad no existían. El informe señala, además, que González Amador tuvo una "conducta defraudatoria". Para poder demostrar un delito de fraude fiscal son clave dos cosas: que la cuantía defraudada supere los 120.000 euros y que se haya actuado con dolo o voluntad de delinquir. La investigación tributaria, dirigida por Urbano y basada en la denuncia de la Fiscalía de delitos económicos contra el novio de la mandataria 'popular', pone de manifiesto que la consultora de sellos de calidad de González Amador, Maxwell Cremona, registró entre 2020 y 2021 un aumento de sus ingresos gracias a la "intermediación en una operación de venta de material sanitario con dos millones de euros en comisiones, y, en 2021, por la percepción de unos ingresos cuantiosos de 1,3 millones, facturados a su principal cliente desde hace años, Quirón Prevención, con ánimo de minorar su tributación debida". Facturas amañadas con dolo Para conseguirlo, el empresario amañó facturas. En una de ellas falseó un gasto de 620.000 euros con una empresa mexicana para deducir menos impuestos, y desde Maxwell Cremona se admitió que el pagó se anuló y nunca se abonó. Otra factura ascendía casi al millón de euros por la presunta venta de vacunas a la sociedad de Costa de Marfil GAYANI LTD para las autoridades del país africano, que tampoco se ejecutó y tampoco se pagó, salvo en la cantidad de 27.000 euros. La empresa de González Amador contabilizó el gasto cuando ya sabía que la operación de venta no iba a existir. A su vez, el informe analiza otras 13 facturas sospechosas que suman hasta 178.000 euros, que "de forma improcedente se dedujo fiscalmente" González Amador como gasto. Como consecuencia, según el documento, el empresario dejó pagar al Fisco "cuotas impositivas por encima de 120.000 euros", lo que supera el mínimo sancionable en el Código Penal. El informe tambien explica que González Amador intentó enmendar su fraude en la declaración del año siguiente, un movimiento de todo punto ilegal...